La idea de Miguel Ángel Russo es la de contar con el marcador de punta a partir del 18 de junio cuando Boca inicie una nueva pretemporada.
Ante las bajas de Julio Buffarini y Leo Jara (se les venció el contrato) y los constantes intentos por ubicar a Nicolás Capaldo (que también se iría del club) en esa posición, el regreso de Weigandt se volvió una prioridad para Riquelme y compañía, ya que deben reforzar el lateral derecho.
Gimnasia perdería a un valor fundamental, el cual pensaban que tendrían hasta el 31 de diciembre de este año. Pero Boca lo necesita ahora y hará uso de la opción que le permite interrumpir el préstamo a mitad de año.
Los otros nombres que andan dando vueltas en esa posición son los del peruano Luis Advíncula (Rayo Vallecano), el uruguayo Damián Suárez (Getafe) y Fabricio Bustos (Independiente).