Media hora alcanzaría para explicar el triunfo de Boca, porque esa media hora le alcanzó a Benedetto para marcar tres goles (golazos), darle la asistencia a Centurión para el 4-1 y reconciliarse con la gente.
El primero, de taco; el segundo, de media distancia; y el tercero tras un gran centro atràs.
Luego Boca se dedicó a manejar los tiempos y el resultado, a gozar de la diferencia y esperar las reacciones de Quilmes, que fueron nulas.
Gran triunfo de Boca para encaminar la recuperación en el torneo y pensar en la Copa Argentina, el ùnico posible pasaje que le queda para disputar la Copa Libertadores que año pròximo.
LOS GOLES