En el comienzo del partido parecía que Central se iba a comer crudo a Defensa y Justicia. El trío ofensivo conformado por Lo Celso, Marco Ruben y Teo Gutiérrez se entendía a la perfección y la máquina sonaba mejor que el más delicado de los violines, sin embargo el Halcón impuso resistencia y el poderío se fue desinflando.
La impotencia de Central chocó con la férrea Defensa de los de Varela y también con su poca predisposición para atacar en casi todo el segundo tiempo, y el empate 0-0 fue irremediable.
Un debut poco atractivo para dos equipos que suelen jugar bien y demostrar que su objetivo principal es el arco rival. Sin embargo, hoy de tanto cuidar el propio olvidaron el ajeno.