Gillian Cooke, corredora de bobsleigh, estaba preparándose para comenzar su participación en la Copa del Mundo disputada en Saint-Moritz, Suiza, cuando sufrió un pequeño accidente con su traje de spandex.
Justo mientras terminaba de elongar y tomar impulso, el traje de la marca de las tres tiras no resistió el movimiento y dejó a la vista la cola de la competidora, que no se enteró de lo sucedido hasta terminar el recorrido de dicha competencia. ¿No sintió ni un poco de frío?