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El día que Roger Federer y Rafael Nadal hicieron historia juntos

Se cumplieron 15 años de la famosa Batalla de las Superficies, un duelo que quedara grabado para siempre entre el suizo y el español.

Por Redacción EG ·

03 de mayo de 2022

ROGER FEDERER Y RAFAEL NADAL, en mayo de 2007, protagonizaron un duelo que quedaría para siempre grabado en los libros de historia del tenis. Fue una exhibición en Mallorca, el 2 de mayo de aquel año, fecha de la que se cumplieron 15 años. Ese partido, ese suceso indeleble, se denominó la Batalla de las Superficies, un duelo que ganaría el español y que se jugó en una cancha de dos mitades: una de polvo de ladrillo y otra de césped.

En aquel momento Federer era el número uno del mundo, sitio que ocupaba desde la temporada 2004, y Nadal era el número dos, por detrás suyo en el ranking ATP. El partido fue tan particular que nunca se había jugado antes ni se repetiría después. 

El histórico duelo se llevó a cabo en el Palma Arena de Mallorca, ante cerca de siete mil personas, en una cancha construída de manera especial para aquella exhibición sin precedentes. Los cambios de lado resultarían incluso más importantes que en los partidos habituales: cada jugador tenía que moverse y adaptarse según el pique, el peso y la velocidad de la pelota tras cada modificación de lado, que implicaba también el cambio de zapatillas.

 

Imagen El inolvidable marco que englobó la Batalla de las superficies.
El inolvidable marco que englobó la Batalla de las superficies.
 

El partido tuvo como ganador a Nadal, quien se impuso 7-5, 4-6 y 7-6 (10) en el choque imaginado por el publicista argentino Pablo del Campo, presidente de la agencia Del Campo Nazca Saatchi & Saatchi.

La intención era repetirlo a partir de la creación de una marca, algo que de todas maneras nunca volvió a surgir como una posibilidad: el partido fue único.

Federer tenía 25 años y Nadal contaba 20 junios. Nadie imaginaba por entonces lo que decantaría cada trayectoria en la historia del tenis: el español hoy tiene el récord de más titulos de Grand Slam, con 21 coronas, y el suizo comparte el segundo puesto con Novak Djokovic, con 20 trofeos.

En aquel mayo de 2007, semanas antes de Roland Garros, Federer no tenía rivales fuera del polvo de ladrillo: desde Wimbledon 2003 había ganado nada menos que diez títulos de Grand Slam, la mitad de los que sumaría en toda su carrera.

Además arrastraba una seguidilla de 42 victorias en fila sobre pasto, con los últimos cuatro títulos consecutivos en Wimbledon, entre 2003 y 2006. También ganaría la edición de ese año, en julio, tras vencer al propio Nadal en cuatro parciales. El hilo de triunfos del suizo en césped llegaría a 65, número que frenaría Rafa en la histórica y recordada final de Wimbledon de 2008.

Nadal, por otro lado, había ganado dos títulos de Slam, ambos en Roland Garros 2005 y 2006. También acumulaba una marca en su propia superficie: sumaba, entonces, 72 triunfos al hilo en polvo de ladrillo, una racha que llegaría a 81 y que cortaría el propio Federer semanas después en la final del Masters Series de Hamburgo.