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La próxima locura del Chino Ríos: ¿jugará en Argentina?

El chileno, ex numero uno del mundo, mantiene la ilusión de romper un récord después de varios años retirado.

Por Redacción EG ·

12 de abril de 2022

MARCELO RÍOS fue un talentoso que irrumpió en la era de dominio del binomio formado por Andre Agassi y Pete Sampras. En aquella era, en 1998, se convirtió en el primer número uno del mundo surgido en territorio latinoamericano.

Radicado en Sarasota, el mejor tenista chileno de la historia tiene 46 años, sufre problemas en la cadera y se retiró en 2004, casi dos décadas atrás. Mantiene, sin embargo, la ilusión de romper un récord increíble, lo que se transformaría en la próxima locura de su vida.

"Me rompí el labrum y me lo operé. Quedé bien, con un poco de dolor, y seguí entrenando, pero ya no tengo el cartílago y me está tocando hueso con hueso en la cadera. Me tengo que operar, pero no es la operación de (Andy) Murray, que tiene un tajo de la rodilla a la cadera. En la mía te abren diez centímetros y te ponen una cosa de titanio para reemplazar el cartílago, pero la recuperación es complicada. Fui a Chile y me pusieron ácido hialurónico, y llevo tres semanas sin dolor. Si no funciona después vienen las células madre y recién después viene la operación. Me pegó fuerte lo de la cadera, no podía dormir, corría con dolor, pero ahora me siento bien", contó el Chino, en diálogo con La Tercera.

Y continuó: "Encontré la solución y sé que aguanto y puedo entrenar un mes tranquilo para poder jugar. Estoy pensando en una locura que ya conversé con mi señora. Lo quiero hacer por mí, una satisfacción personal mía: quiero tratar de ser el más viejo en ganar un torneo profesional. Antes me ofrecieron wild cards para los ATP de Kitzbühel y Umag, pero tengo que ser realista. Quiero tratar de ganar un Challenger, el más chico que sea, o un Future".

Y explicó cómo estaría pensado ese objetivo: "Todo depende de cómo reaccione mi cuerpo. Quiero demostrarme a mí mismo que soy capaz de hacerlo. A lo mejor no lo logro pero cuando juego me siento bien. No quiero volver al circuito, sino que quiero ganar un torneo profesional, aunque sea el más chico. Ojalá fuera en Estados Unidos y en cemento, pero antes incluso me ofrecieron jugar en Argentina. Pienso entrenarme con todo. No quería contarlo, pero lo hago porque es entretenido y creo que puedo hacerlo. Ojalá no me cague la cadera". ¿Lo veremos en la Argentina?