El día que Guillermo Vilas se emocionó en Australia
En 2009 el Poeta volvió al Kooyong, el club en el que se había consagrado en el Abierto de Australia tanto en 1978 como en 1979.
Por Redacción EG ·
23 de agosto de 2022
GUILLERMO VILAS registró todo tipo de logros a lo largo de su carrera como tenista. Ganó 62 títulos del Grand Prix, el Campeonato de Maestros y cuatro trofeos de Grand Slam: Roland Garros 1977, el US Open 1977 y el Abierto de Australia en 1978 y 1979.
Los últimos dos no fueron en Melbourne Park, donde se juega el primer Grand Slam en el presente, sino en Kooyong, el lugar en el que se disputaba sobre las canchas de césped.
En el año 2009, treinta años luego de aquellas dos conquistas grandes, Vilas regresó por primera vez a Kooyong y recorrió el estadio y las canchas en las que se había consagrado. Ya no eran de césped, sino de cemento, y se emocionó.
"Yo nací ansiando ganar en este lugar. Me gustaría tocar la red un poco... Qué barbaro", le dijo a Miguel Simon mientras grababan la nota para ESPN Recuerda, instantes antes de quebrarse: "Nunca me emociono en una cámara... Nunca había entrado".
Para el periodista también fue un momento especial. Así lo recordó en una nota con La Nación: "Fue una experiencia casi religiosa. Guillermo nunca fue fácil de penetrar emocionalmente; hablaba mucho pero a la vez ponía un freno en ciertos aspectos. Y ese día se soltó. Al final se acercó al court donde se había consagrado: juntó el pulgar y el índice de una mano, los pasó por el borde de la red recorriendo todo el ancho de la cancha, y se largó a llorar. Recordó que el padre, que no viajaba nunca, había estado con él en ese torneo".
