Las Entrevistas de El Gráfico

1992. "Si nosotros no hablamos... ¿Quién va a hablar?"

La publicación reunió a Gatti, Alonso y Bochini en un potrero. Junto a un arco y con una pelota, volvieron a su pasión y analizaron el fútbol del momento con el ojo crítico que los caracterizó siempre.

Por Redacción EG ·

15 de agosto de 2019

Alonso, Bochini, Gatti... El Beto, el Bocha, el Loco... ídolos totales, los tres, los últimos que tuvo el fútbol argentino. Hablar de ellos es como decir, naturalmente, sin otro prólogo, River, Independiente, Boca... No importa que alguna vez el Beto se haya ido a Francia o que en otra oportunidad haya vestido la camiseta de Vélez. Siempre volvió a River y siempre fue de River. No interesa que Hugo Gatti se iniciara en Atlanta, que defendiera el arco de River, luego el de Gimnasia —generando en la hinchada tripera un amor que aún hoy perdura— y después el de Unión, hasta que un día se produjo el encuentro inevitable que le había fijado el destino, llegó a Boca para quedarse en el alma de la número doce. Lo de Bochini fue más simple, más directo: de Zárate a Independiente, y de ahí a la consagración fulminante, a la indiscutible adhesión de su tribuna, a la grandeza que le dan los títulos conquistados. Un mediodía EL GRAFICO los reunió para comer un bife, tomar una copa y hablar de fútbol, sencillamente eso. ¿Quiénes pueden hacerlo con más vivencias que ellos tres? Del fútbol que se juega hoy. Del que ellos jugaban. Del que quisieran ver. Y el diálogo puede empezar en cualquier lugar de la cancha.

¿MURIÓ EL NÚMERO DIEZ?

ALONSO:Para mí han desaparecido los que manejan los equipos. Antes era tan importante el diez como el ocho. Cuando lo marcaban mucho a uno, aparecía el otro. En River cuando me tomaban a mí, surgía el Negro Jota Jota. El caso del Bocha lo mismo...

— ¿Y ahora?

ALONSO:Y si no hay diez, no existen conductores ni cerebros. El gran problema viene de las divisiones inferiores. El fútbol está quebrado porque ya en las inferiores van a los resultados. No intentan sacar jugadores.

BOCHINI: —Lo peor es que todos buscan resultados, no quieren perder... Vos podés buscarlos intentando ganar, pero acá la prioridad es que no te hagan goles. Ahora se dice: "Me defiendo con siete u ocho, no me hacen un gol y por ahí la emboco de contragolpe".

ALONSO: —Insisto que el problema está en las inferiores. Newell's es el que mejor trabaja y sacó la diferencia. Hay otro problema terrible: se meten mucho los padres. Se cuelgan del alambrado, presionan al pibe que al final no sabe si escuchar al viejo o al técnico.

GATTI: —Los confunden, no para jugar sino para ganar guita.

ALONSO: — ¿Sabés qué pasa? Antes nuestros viejos nos llevaban para que nosotros nos salváramos, hoy los padres se quieren salvar con el hijo.

GATTI: —Pero para que nos divirtiéramos también. La idea de antes era verte jugar en Boca o River; si después venía la plata, mejor... ALONSO: —Todos creen tener un Maradona en la casa.

—Ustedes tres hicieron la carrera en la Argentina. Hoy, antes de debutar en primera, los pibes esperan que un empresario los transfiera al fútbol italiano. ¿Los intermediarios tienen algo que ver en este desmejoramiento?

ALONSO: —Y claro que tienen que ver, todos son culpables. Desde el dirigente hasta el futbolista.

GATTI: —Porque ahora el jugador es un conformista total.

ALONSO: —Claro. Lo mandan a jugar de cualquier cosa y va, no habla.

GATTI: —No tienen carácter, nada. No aman su profesión, no hay fuego.

 

 

Imagen ALONSO: “En las divisiones inferiores hay pibes que la pisan, pero después en primera ya no la tocan más.”
ALONSO: “En las divisiones inferiores hay pibes que la pisan, pero después en primera ya no la tocan más.”
 

LA PERSONALIDAD Y El ÍDOLO

El fútbol ya copó la mesa, está instalado con todo el fuego. Así lo vivieron cuando estaban en actividad. Así lo siguen sintiendo. Con insobornable fidelidad a sus convicciones.

—Bocha, ¿vos sufriste como técnico esa diferente manera de vivir el fútbol?

BOCHINI: —Perder siempre fue un problema bárbaro. Ahora veo jugadores que piensan distinto. Un viernes perdimos, habíamos sido un desastre, yo quería irme a mi casa y encerrarme, y algunos jugadores estaban haciendo planes porque a la noche iban a salir a pasear o bailar.

— ¿Por qué no hay más ídolos? ¿Será que no hay identificación con una camiseta? Hoy en día pasar de River a Boca es lo más normal...

ALONSO: —Se juntan una serie de cosas. No hay un jugador que le llegue rápido a la gente, que tenga personalidad, que tire un caño sin ningún tipo de problemas aunque esté jugando frente a 70.000 personas. Que no tenga que mirar al banco para ver si lo autorizan a tirarlo o no.

GATTI: —El de ídolo es un don inexplicable...

ALONSO: —Ídolo te hace un poco la gente.

GATTI: —Te perdonan cosas.

ALONSO: —Hay elementos que son fundamentales. Ganar un partido en los momentos difíciles, en las finales. También significa jugar de la misma manera, tanto de local como de visitante.

BOCHINI: —Antes había más competencia con otros jugadores. Te tenías que exigir... Ahora no, jugás dos o tres partidos bien y ya sos estrella.

GATTI: —Y están en la tapa de EL GRAFICO. ¿Cómo puede ser que salga cualquiera?

BOCHINI: —Antes tenías que jugar todos los partidos bien durante un año para salir en la tapa de EL GRAFICO.

GATTI: —Tiene que ser, como las de antes. No puede ser que un técnico salga en la tapa...

— ¿Por Bielsa?

GATTI: —Claro, tenía que haber salido Scoponi o los jugadores que se ganaron el campeonato.

 

"TERMINEMOS CON LOS TÉCNICOS"

Gatti mete la frase justa para encender el fuego de la polémica. Ahora incursionó en el tema fundamental de estos tiempos: los directores técnicos.

ALONSO: —Ojo, Loco, que ahora se piensa que el técnico es el 70% del equipo.

GATTI: —Porque el jugador le da lugar al técnico, no tiene personalidad. Para mí es una falta de respeto poner a Bielsa en la tapa.

—Ahora la gloria es más efímera, se llega más rápido, pero se cae más rápido también...

GATTI: —Mirá lo que le pasó a Higuaín, siete meses atrás estaba para jugar en la Selección Argentina, y ahora está jugando en Banfield. En un momento era intocable en River y después lo dejaron libre. Hay una confusión total, no puede ser que mueras de repente.

— ¿Y la Selección? ¿Hoy se accede mucho más fácil?

ALONSO: —Al ser un fútbol más físico, hoy puede jugar cualquiera. El que más o menos pueda pisar la pelota ya está en la Selección. Hay un espacio vacío que no lo está ocupando nadie.

— ¿Influye la falta de maestros?

GATTI: —Claro, no hay espejos. Yo tenía a Carrizo, Errea, Yashin en Europa.

ALONSO: —Escuchame, en nuestra posición hablábamos de Ermindo Onega, Willington, mamita querida...

—Dentro de poco ya va a haber jugadores que no los vieron jugar a ustedes...

ALONSO: —Antes los pibes tenían en quién reflejarse. Hoy la camiseta 10 se la pone cualquiera y es un picapiedra. Es una cosa de locos...

—Un técnico actual dijo que el diez era un estereotipo.

GATTI: —Esos son los técnicos que creen que ellos ganan los partidos.

ALONSO: —Así está el fútbol...

BOCHINI: —Por eso cambiaron las reglas para que el fútbol sea mejor y vaya más gente a la cancha. Porque ahora los partidos son malos.

ALONSO: —Yo estoy del otro lado del mostrador y sigo pensando que lo más importante es el jugador.

GATTI: —A los futbolistas que dicen que el técnico es el 70%, vos los tenés que echar de un voleo.

 

Imagen BOCHINI: “Antes había más competencia con otros jugadores. Te tenías que exigir... Ahora no, jugás dos o tres partidos bien y ya sos estrella.”
BOCHINI: “Antes había más competencia con otros jugadores. Te tenías que exigir... Ahora no, jugás dos o tres partidos bien y ya sos estrella.”
 

"NO HAY CRÍTICA NI AUTOCRÍTICA"

ALONSO: —Me gustaría saber qué opina la gente de estos partidos tan malos.

BOCHINI: —La gente va a seguir yendo siempre a las canchas, pero ya no sale y dice "qué lindo partido vi".

ALONSO: —Pero ocurre algo más grave: no hay jugadores que tengan autocrítica. Cuando yo era un desastre, lo reconocía. Y trataba de mejorar para el próximo partido, me preparaba, veía cómo me habían marcado. Esas preocupaciones eran del jugador, no del técnico.

GATTI: — ¿Te atacaba el periodismo si jugabas mal?

ALONSO: —Sí, síiiii...

GATTI: — Otro mal del periodismo. No hacés nada y te ponen 10 puntos. Nadie critica, viejo... Hoy los arqueros se meten los goles y no dicen nada. Hablo de los arqueros porque es mi puesto. Yo me metía un gol y salía escrachado, lo mismo el Pato Fillol...

—La visión del fútbol actual, ¿es totalmente pesimista o se puede rescatar algo?

BOCHINI: — Las canchas están lindas, los pantaloncitos, las camisetas...

ALONSO: — Tampoco es para tanto. Pero faltan conductores de adolescentes. Aparece el problema de la AFA, que mandan en divisiones inferiores a un solo linesman, y los pibes de hoy son muy bichos, cuando el árbitro se dio vuelta te metieron una trompada, porque los mismos técnicos los mandan.

— ¿Influye lo que dicen algunos jugadores y técnicos, eso de que lo único importante es ganar...?

BOCHINI: —Víctor Hugo dice que el mejor partido es el que sale 0-0, como en el ajedrez.

ALONSO: — Eso me hace acordar cuando Dino Sani eligió un gol en contra como el mejor de la fecha.

BOCHINI: — No puede ser, porque en un partido bien ju-gado hay goles. Si en un tiro libre el tipo la pone en un ángulo como hacía el Beto o Maradona, el arquero no la puede sacar. Si vos definís bien, el arquero no llega.

ALONSO: — Encima hoy se matan a patadas, dejame, y los referís hacen que no ven.

GATTI: — Los ve todo el país, se matan...

ALONSO: — Somos todos responsables: los técnicos, los referís, el periodismo, los jugadores... Tiene que haber una revolución, y va a cambiar en la medida en que los ex jugadores se metan en el periodismo, en la directiva y como managers.

GATTI: — Que el fútbol maneje el fútbol, te entiendo.

BOCHINI: — Sí, lo que pasa es que hay buenos jugadores que están dirigiendo en el fútbol. Existen tipos como el Beto, como yo; pero también hay otros como Aimar, por ejemplo.

ALONSO: — Sí, pero por eso no te podés callar la boca.

BOCHINI: — Ya sé, Bielsa no sé qué clase de jugador fue.

GATTI: — ¿Fue jugador? bueno... mi hermano también en el campo era un fenómeno.

BOCHINI: — Ojo, porque Bilardo también fue jugador, yo lo vi. Y el juego de él ya sabemos cuál es... ALONSO: — Lo que vos fuiste como jugador, después queda reflejado en la conducción de un equipo.

— ¿Existe el fútbol moderno y el antiguo?

GATTI: —El Indio Solari ya era marcador volante, lo puso Renato Cesarini, ¿se acuerdan?

BOCHINI: —Todas las tácticas pueden servir, pero depende de los jugadores. Yo he salido campeón con una táctica o con otra, pero había jugadores. Si se le da una táctica a alguien que no tenga calidad, no la puede cumplir.

ALONSO: —Lo importante es que hay material. En las divisiones inferiores hay pibes que la pisan, pero después en primera ya no la tocan más. ¿Por qué? Por una indicación del técnico, perdieron el partido y al pibe lo limitaron.

GATTI: — El ejemplo es Newell's. Dentro de esta mediocridad, para mí es el ejemplo. Griffa la tiene clara.

ALONSO: — Por eso le hacen un contrato de quince, veinte años...

GATTI: —Podría haber agarrado la primera de Boca o River, pero no se confundió, sabe lo que quiere...

 

Imagen GATTI: “Ojo que los técnicos saben poco de arqueros, es su mayor déficit.”
GATTI: “Ojo que los técnicos saben poco de arqueros, es su mayor déficit.”
 

LA HORA DE BAJAR LA CAÑA

Ninguno de los tres esconde sus preferencias o sus disidencias, para tratar el tema que sea. Y hablando de jugadores tampoco se pondrán de acuerdo. Lo que viene es imperdible, bueno, como todo lo que dicen.

— ¿A quién rescatan entre los que están jugando?

GATTI: —A mí me gustó mucho Scoponi. El arquero tiene que aparecer cuando el equipo gana. Si él ataja y el equipo no gana, no sirve...

BOCHINI: — Eso pasa con el arquero de Independiente. Anda bien cuando estamos octavos o novenos...

ALONSO: —Atención, Scoponi atajó en los momentos difíciles, cuando lo insultaban. Después de aquella Liguilla lo querían matar.

GATTI: —Scoponi es el mejor, Comizzo ha progresado mucho. ¿Islas? Y, es el jugador del pueblo, haga lo que haga está bien. Aunque cometa errores no se los ven.

BOCHINI: —Ataja para la gente.

ALONSO. —Qué querés, le meten catorce mano a mano y alguna tiene que tapar... Es claro, cuando no tenés defensa siempre va a ser figura el arquero.

BOCHINI: —A Islas la gente lo quiere y lo aplaude porque no tiene a otro. Yo podía destacarme entre Burruchaga, Trossero, Villaverde, Bertoni, pero también se puede sobresalir por el bajo nivel que hay...

ALONSO: —No confundamos, es buen arquero...

BOCHINI: —Para mí es más o menos. El día que Independiente tenga un equipazo, salga campeón y él salve algunos partidos importantes, entonces sí lo voy a reconocer. No es que le tenga bronca, porque si es bueno es bueno...

ALONSO: —Bocha, vos estás más allá del bien y el mal...

—Casi todos los técnicos hablan bien de Islas.

GATTI: —Ojo que los técnicos saben poco de arqueros, es su mayor déficit.

ALONSO: —Un delantero que me gusta es el Beto Acosta, juega solo contra el mundo. ¿Te imaginás lo que puede ser con Medina Bello?

BOCHINI: —Es de lo mejorcito que hay ahora...

GATTI: —Además, la pide siempre.

— ¿Y qué otros los impactaron?

GATTI: —Martino tiene categoría, Gamboa...

ALONSO: —A mí me gusta Llop, puede rendir en cualquier puesto. Lunari juega bien.

— ¿Y en River y Boca?

ALONSO: — El Pelado Díaz, fíjense lo que fue River antes y después de su llegada. El marcó la diferencia.  

GATTI: —Contra Estudiantes, Da Silva definió el partido en una jugada. Ellos, el Beto y el Bocha, ¿cuántas hacían de esas? ¡Hizo una! Y sale en todos lados: Da-Sil-va Ma-ra-vi-llo-so...

BOCHINI: —Antes hacías cinco y te pedían diez. Ahora hacés una y es un asombro. Las exigencias del público son cada vez menos. La gente está resignada...

ALONSO: —Está adormecida. La prueba la tenemos nosotros, a los de River nos está tocando muy de cerca. Llevamos nueve partidos sin ganarle a Boca y nadie dice nada.

BOCHINI: —Antes no bastaba con ganar. Nosotros le ganamos una final del mundo a Atlético Madrid (1-0), un partido dificilísimo, y nos fuimos silbados.

 

Imagen GATTI: “¿Te gustaría ser presidente de River? ” ALONSO: “Si la gente lo quiere, sí.” BOCHINI: “A mí me gustaría ser manager, porque ese cargo es más importante. Vos designás al técnico y a los jugadores según el estilo...”
GATTI: “¿Te gustaría ser presidente de River? ” ALONSO: “Si la gente lo quiere, sí.” BOCHINI: “A mí me gustaría ser manager, porque ese cargo es más importante. Vos designás al técnico y a los jugadores según el estilo...”
 

UNA DE CAL, UNA DE ARENA

ALONSO: — ¡Cómo nos van a matar después de esta charla! Pero ya estamos en el baile, sigamos. Nos pusimos contentos porque salimos segundos en el Mundial '90, con unos chichones en el travesaño, con un arquero figura por atajar todos los penales. No llegamos una vez al arco. Parece mentira... y lo aplaudimos...

BOCHINI: —Fuimos segundos ¿en qué clase de campeonato?

GATTI: —El mejor jugador fue Milla, tenía 38 años.

BOCHINI: —Y eso que estuvo parado dos años, en otra época no podía haber jugado.  

GATTI: —Pero, ojo, que igual fue el mejor... Si Camerún le ganaba a Inglaterra y jugaba la final, a nosotros nos metía cinco fácil.

— ¿Y qué rescatan de los técnicos?

ALONSO: —En cuanto a filosofía de juego, me gusta el trabajo que está haciendo Alfio Basile en la Selección.  

GATTI: —Sabe elegir jugadores...

ALONSO: —Ese es el mayor mérito de los técnicos....

GATTI: —Era la gran virtud de Angelito Labruna.

ALONSO: —Otro que tenía eso era el Bambino Veira.

BOCHINI: —A mí lo que me gusta de la Selección es que cada uno juega en su puesto, el cuatro de cuatro. Creo que no sirve llamar a un jugador cuatro años antes, hay que ir formando el equipo con los que están pasando el mejor momento.

— ¿Se ha perdido un poco ese misterio de la Selección?

ALONSO: —Basta, por favor, con ese verso de que a Bauza hay que mandarle a Pascutini para que entrene en México. Basta, no sigamos más con esa mentira. Garré era el número tres y terminó jugando Olarticoechea que nos salvó las papas.

BOCHINI: —Bilardo decía que un jugador debía tener 70 partidos internacionales para estar en un Mundial y al final la rompió el Negro Enrique, que jamás había jugado ni un mísero partido en la Libertadores. Ese equipo tenía una movilidad bárbara y estaba muy bien preparado, fue un gran campeón.

—Hugo, ¿el Toto Lorenzo coincidiría ideológicamente con estos técnicos que se dicen modernos?

GATTI: —No, nunca le escuché decir al Loco Lorenzo "yo gané un partido".

ALONSO: —El Loco elegía acertadamente y sabía a quién tenía que cuidar. Yo lo tuve en Vélez.

GATTI: —Comparar a Lorenzo con Bilardo es una falta de respeto.

—Uno de los técnicos que no cambiaron su discurso, que aparentemente se mantuvieron fieles a su línea, fue Pastoriza, y últimamente no ganó nada.

ALONSO: —Lo que pasa es que los técnicos van perdiendo la fuerza a través de los años, y no laburan lo que tendrían que laburar. Porque hoy hay que trabajar.

BOCHINI: —Hay que ver también qué equipos dirigió Pastoriza cuando ganó títulos y qué dirige ahora.

GATTI: —Es elogiable lo del Pato, él escogió una línea y no se ha movido.

—Los jugadores de aquel Boca de Pastoriza dijeron una vez que habían perdido el campeonato porque fueron a atacar todos los partidos.

GATTI: —Los jugadores que dijeron eso son unos c...

ALONSO: —Entonces fue un problema de fe.

—Todavía no hablaron de los árbitros.

BOCHINI: —El nivel bajó muchísimo.

ALONSO: —Uno bueno era Ricardo Calabria, un fenómeno.

BOCHINI: —Castrilli, por ejemplo, es un vigilante. No es un referí. Lo peor es que a los árbitros buenos no los ponen a dirigir.

 

 

Imagen GATTI: “ahora el jugador es un conformista total.”
GATTI: “ahora el jugador es un conformista total.”
 


"HAY DIRIGENTES HORRENDOS"

—Si tienen toda la plata para comprar jugadores, ¿a quiénes elegirían?

ALONSO: —Nos sentamos y estamos hasta las siete de la tarde. Es difícil, nos costó nombrar a uno, te imaginás...

BOCHINI: —Si a vos te dan todos los jugadores que pedís y te va mal, entonces es culpa tuya; pero si te dan lo que pueden es más difícil. Me pasó con Fren, más de eso no daba... Después vino Pavoni, Nito Veiga y al final tuvieron que gastar 3 millones de dólares.

ALONSO: —Es una falta de respeto. ¿Cómo puede ser que a Bochini no le compren esos jugadores y después venga otro y gasten tanta plata?

—Beto, Bocha. ¿Qué fue lo peor que les pasó como técnico?

ALONSO: —Los dirigentes que hay, entra cualquiera. Estábamos hablando de jugadores, pero hay una escasez de dirigentes terrible...

BOCHINI: —En Independiente los dirigentes están confundidos, es un desastre. Algunos quieren como técnico a Nito Veiga, que es mi línea, a otros les gusta Pachamé. La dirigencia debe tener un estilo de fútbol, desde las divisiones inferiores hasta la primera.

ALONSO: —Todos los dirigentes opinan. Yo creo que la Comisión de Fútbol tiene que estar presidida por un tipo que haya jugado. Lo de manager aquí es fundamental. Hay clubes que son 70% o 100% fútbol y están manejados por oficinistas.

BOCHINI: —Independiente hace tres años lo vendió a Reinoso en 200.000 dólares y ahora lo trajo a préstamo por 250.000 ¿Cómo es?

 

¿QUIÉNES DEBEN MANEJAR EL MOL?

Desde este look actual que define tan claramente sus personalidades, informal y despreocupado, Hugo, formalmente deportivo, el Bocha, trajeado como un ejecutivo, el Beto, analizaron el presente, ligaron el pasado, ese ayer que los vio triunfadores, admirados, ídolos.

ALONSO: —Sería lindo que nos pregunten cómo nos vemos en el futuro. Por ejemplo, al Bocha lo pondría de manager general. A nosotros el de arriba nos tiró para determinados clubes'. El Bocha es Independiente. Yo soy River y punto. Y Loco, vos sos Boca…

BOCHINI: —A mí me gustaría ser manager, porque ese cargo es más importante. Vos designás al técnico y a los jugadores según el estilo...

ALONSO: —Sos el nexo entre el dirigente y el entrenador.

BOCHINI: —Tengo una propuesta de la otra agrupación, ya me dijeron "si nosotros ganamos, vos ponés al técnico".

ALONSO: —Y la gente tiene que hacer fuerza para que vos vuelvas. Porque si no hablás vos, ¿quién va a hablar?

—Loco, ¿y vos?

GATTI: —Técnico no me gusta, lo de manager puede ser. Algo de esto habíamos hablado con los dirigentes de Boca, pero después me fallaron.

— ¿Tuviste mala experiencia con los dirigentes?

GATTI: —Por orden de aparición, conocí a los dos mejores: Antonio Liberti y el Puma Armando. Pero en general los dirigentes son horrendos...

—Paradójicamente, los tres han tenido problemas con la dirigencia actual de sus clubes. No con la gente, eso es evidente.

ALONSO: —A mí me interesa la gente. Los dirigentes que están de paso no me preocupan. Me molestó que una vez no me hayan dejado entrar a River, como me lo hizo Dávicce. Tenía la autorización para filmar en "mi casa" y me llamaron por teléfono para que no fuera, porque el día anterior a River lo habían eliminado de la Copa. Pensaron que iba a armar un alboroto, que la gente iba a pedirme que yo fuera el técnico. Y yo no busco nada, la gente va a decidir mi destino. Yo dejé el corazón ahí adentro, hasta a mis hijos les he dejado...

GATTI: — ¿Pero te gustaría ser presidente de River?

ALONSO: —Si la gente lo quiere, sí.

GATTI: —El fútbol es un acto de amor. Para jugar hay que sentirlo.

ALONSO: —Fíjense lo importante que es la motivación. Ramón Díaz marcó la diferencia en River y después se quedó. Pero es increíble, agacha la cabeza y te pone un pase perfecto.

GATTI: —Tiene ojos en la nuca. Son contados, como el Bocha o Potente... Ahora no hay más. ¡No aman lo que están haciendo! Mirá cómo estará el nivel del juego, que Tinelli le ganó el rating a Fútbol de Primera. Es que por lo menos veían algo, estaban los mejores jugadores... El gol del Beto fue mejor que el de Diego.

ALONSO: —Y no lo pasaron...

GATTI: —Ahí está lo grande de Diego, que se volvió loco para hacer un gol mejor que el tuyo. Eso vale. Yo le hice un gol al Pato y él quería hacerme uno a mí, eso es de grandes...

—El problema del Beto es que no se lo toma en serio.

GATTI: —No muestra nunca la sonrisa, cuando juega. Es su personalidad, él ama al fútbol y lo siente así. Pero la gente dice "por qué el Beto está siempre enojado...".

ALONSO: —Es que cuando jugamos nosotros la que sonríe es la pelota.

La sonrisa pícara del Bocha apoyó la frase del Beto. El Loco metió las manos en los bolsillos de su jean, festejando la idea. Los tres, íntimamente, siguen siendo jugadores. Por siempre. ¡Por suerte!

 

JUVENAL, CLAUDIO MARTINEZ y GONZALO ABASCAL

Fotos: FABIAN MAURI y ARCHIVO "EL GRAFICO"