¡Habla memoria!

SANTAS REMONTADAS

De la serie de emociones y tristezas que puede regalarnos el fútbol, las "remontadas" ocupan un lugar central. Se trata de ganar o perder partidos imposibles, que están definidos pero no cerrados. Repasamos algunos de los cambios de ánimos futboleros más recordados de nuestro amado fútbol.

Por Pablo Bomarito ·

28 de agosto de 2020

Cría cuervos

Martes 28 de agosto de 2007. La noche dominaba el Bajo Flores. El San Lorenzo de Ramón Díaz encaraba el entretiempo perdiendo 3 a 1. Racing en una ráfaga de 28 minutos, se había puesto 3-0 con los goles de Aureliano Torres en contra de su valla, Erwin Avalos y Cristian Pellerano. Andrés Silvera había descontado, trayendo un poco de esperanza para el “Ciclón”. La infantil expulsión de Gustavo Campagnulo, a los 40 minutos del primer tiempo por mano fuera del área, obligó a Gustavo Costas -técnico “académico”- a decidir el ingreso de José Luis Martinez Gullota a la cancha en lugar de Facundo Sava, un cambio lógico. En el complemento, el partido no bajó su intensidad. Silvera volvió a descontar rápidamente y puso en carrera a los de Ramón. 

Imagen Hugo Romeo, el héroe que vino del banco.
Hugo Romeo, el héroe que vino del banco.

Un penal de Pellerano a Juan Carlos Menseguez le dio la chance del empate, pero el juvenil Martinez Gullota le ahogó el grito de gol al delantero. Bernardo Romeo, ingresado por Cristian Tula, puso el empate a cuatro minutos del final. Pero había más. En tiempo de descuento, el intratable Romeo volvió a aparecer y estableció el 4 a 3 para el local. Remontada consumada y a festejar.

Estudiantes le dio una lección

El 15 de mayo de 1932 el “Pincha” recibió a San Lorenzo, que a falta de 22 minutos para el final se imponía 3 a 0 con goles de José Fossa y Gabriel Magán en dos oportunidades. En una ráfaga de fútbol y coraje, Estudiantes lo dio vuelta. Dos tantos de Alberto Zozaya, Ulises Uslenghi y Manuel Ferreira lograron la primera gran remontada en la historia del profesionalismo.

Imagen Delantera de Estudiantes en 1932: Lauri, Scopelli, Zozaya, Nolo Ferreira y el Indio-Guaita
Delantera de Estudiantes en 1932: Lauri, Scopelli, Zozaya, Nolo Ferreira y el Indio-Guaita
 

Superclásica remontada

Boca y River nos han regalado partidos inolvidables, tanto en Argentina como en otros países.
El 23 de marzo de 1997 se enfrentaron por la sexta fecha del torneo Clausura en el Monumental. A los 29 minutos, los de Héctor Veira ya ganaban 3-0. Gabriel Cedrés y Sergio “Manteca” Martinez en dos oportunidades pronosticaban una tarde de sol. Faltando dos minutos para el entretiempo, Sergio Berti descontó para el local.
Al inicio del segundo tiempo, Ramón Diaz se agarraba la cabeza y veía como se le escapaba la posibilidad de milagro, tras la expulsión de Eduardo Berizzo.
Pero el partido tenía más sorpresas en la manga. Javier Castrilli expulsó a Sergio Martinez  y otra vez las cosas se emparejaron.

Imagen Celso Ayala en el momento de la gloria, el gol del empate.
Celso Ayala en el momento de la gloria, el gol del empate.
 
A los 75 minutos, Facundo Villalba dejó al “Millonario” al borde de la hazaña con su gol y a tres minutos del final, Celso Ayala de cabeza, consumó la igualdad. En el cierre, Gabriel Cedrés vio la roja, pero fue para la estadística. River y un empate con sabor a victoria.

El Xeneize no se rinde

Boca Juniors recibió en la Bombonera a Racing Club, el 29 de junio de 1975, por la fecha 28 del Campeonato Metropolitano.
Al término del primer tiempo las cosas no podian ser peores: Miguel Nicolau había errado un penal y Racing se floreaba 3-0 con goles de Hugo Gottardi y Alberto Mario Jorge en dos oportunidades.
En el segundo tiempo, el equipo de Rogelio Antonio Dominguez se despabiló y cambió la historia. A los 5 minutos llegó la revancha de Nicolau de penal. Darío Felman puso el 2-3 y Boca estaba nuevamente en la pelea. Todo parecía derrumbarse cuando Racing dispuso un penal que Jorge Buzzo desvió y selló sin saberlo la suerte del partido. Hugo Paulino Sanchez, a los 40 y 44 minutos del segundo tiempo dio vuelta el partido para la alegría del pueblo xeneize.

 

Imagen Boca y Racing 1975, otra gran remontada "Xeneize"
Boca y Racing 1975, otra gran remontada "Xeneize"
 

Un partido diabólico

Media biblioteca está a favor, media en contra en este partido. El domingo 11 de marzo de 2012, Boca Juniors recibió a Independiente por la quinta fecha del Clausura 2012.
Cristian Diaz, llegaba como nuevo técnico de un Independiente, que venía barranca abajo en el final de la era de Antonio Mohamed. El debut en la Bombonera fue un partido histórico.
A los 6 minutos del primer tiempo, el “Rojo” ganaba 2 a 0 con goles de Patricio Vidal y Osmar Ferreyra para sorpresa de propios y extraños. A los 12 minutos Facundo Roncaglia descontó a los 32 minutos, Ernesto Farias ponía el 3 a 1, pero Juan Román Riquelme volvió a achicar la brecha con un penal en el minuto final de la etapa. Pero había más.

Imagen Ernesto Farías, la figura excluyente de la remontada roja en la Bombonera.
Ernesto Farías, la figura excluyente de la remontada roja en la Bombonera.

En el segundo tiempo, nuevamente Roncaglia anotó el empate para Boca a las 12 minutos. A falta de un cuarto de hora para el final, Pablo Ledesma puso la cabeza para que el local pasase al frente 4 a 3. El asunto parecía liquidado, muchos comentarios ya se habían firmado contando la epopeya xeneize, pero el destino tenía otra final. Ernesto Farias, en los dos minutos finales, se despachó con dos tantos y le dio al “Rojo” el triunfo por 5-4.

BONUS TRACK: Libertadores 1991

Dejamos para el final, un partido fuera de concurso, pero entra dentro de la consigna. Por primera fase de la Copa Libertadores,  Boca Juniors recibió a River Plate en la Bombonera.
El equipo del uruguayo Oscar Tabarez perdia 3 a 1 a los 31 minutos del primer tiempo y la noche parecía complicada. Llegó la expulsión de Leonardo Astrada y River terminó el primer tiempo con diez hombres.

Imagen Diego Latorre en modo "diablo". Remontada histórica por Copa Libertadores.
Diego Latorre en modo "diablo". Remontada histórica por Copa Libertadores.
En el complemento Blas Giunta descontó y Victor Marchesini empató el encuentro. Lo mejor sucedió al final. La figura de ese Boca y de aquel cotejo, Diego Latorre, convirtió a tres minutos del epílogo para desatar la fiesta en La Boca con el 4-3 definitivo.

Lagrimas de alegrias y tristezas, abrazos llenos de felicidad y de consuelo. Así son las remontadas, justas o no, nunca dejan de emocionar.

 

Diseño y edición de fotografía
Matias Di Julio