1964. El Gran Premio de las radios
La competencia no solo estaba en la pista, las mejores transmisiones radiales de automovilismo de la década del 60 también tenían sus conflictos, con acusaciones de robo de información.
Por Redacción EG ·
30 de enero de 2020
Mientras se corría una de las etapas del Gran Premio 1963, Luis Elías Sojit, por Radio Argentina, hacía caer a las demás emisoras (según su relato) en una trampa "mortal". De común acuerdo con su colega y amigo tucumano Remigio Abregú lograron que una máquina del pelotón puntero desplace a otras tres en un tramo de menos de 100 kilómetros y se ponga al frente de la competencia. Abregú, desde Mina Capillitas, hacía conocer la primicia, dando inclusive el tiempo de paso y alguna característica de la máquina. En el estudio de la emisora, en Buenos Aires, Luis Elías celebraba la noticia con fuertes campanazos, chicharras, aplausos y gritos. Según el relato de Abregú la carrera cambiaba. No habían pasado dos minutos y el propio Luis Elías interrumpía a sus locutores para decir más o menos esto: "No, señores oyentes. Lo que dijo Abregú recién desde Mina Capillitas es falso. Solamente quiero demostrar que no se puede hacer una transmisión con 18 pesos; hay que gastarse 8 millones, como me gasto yo". Y prosiguió: "Yo lo siento mucho, pero más de tres radios mordieron el anzuelo, y también ellos dieron ese paso ficticio". Y antes de volver a hacer sonar la campana, Luis Elías insistía: "Las demás emisoras nos roban la formación porque quieren hacer la transmisión sin mandar gente afuera".
Esta anécdota refleja parcialmente la competencia, y los entretelones que pueden haber en la trastienda de las trasmisiones automovilísticas. Sobre todo la de los "Gran Premio", ya sea turismo mejorado o turismo de carretera. La carrera que corren las radios es acaso similar a la de los automovilistas en cuanto a la superación que procura cada una de las transmisiones.
Este gran premio que acaba de correrse fue transmitido por cinco emisoras: LR2 Argentina (en duplex con Belgrano la primera y última etapa), LR4 Splendid, LR6 Mitre, LS5 Rivadavia y LSIO Libertad. Entre las cinco radios se han logrado 28.016.000 pesos de publicidad, a razón de algo más de 210.000 pesos por anunciante, aun cuando de las 132 firmas hay que considerar que varias dieron frases a más de una emisora (Atma, Y.P.F., Ore Point, IKA, etc.).
Entre las cinco organizaciones trabajaron 803 personas, 16 aviones volaron sobre la ruta y 14 puestos móviles se desplazaron a lo largo del camino para relatar las largadas y llegadas de etapa. Haciendo un cálculo promedio entre los seis días de carrera y los suplementos adicionales en las emisiones nocturnas se puede establecer que las radios han ocupado 79 h. 20 minutos desde el día de la largada hasta el momento de la llegada.
EL "SHOW" DE LUIS ELIAS
El estudio de Radio Argentina, durante los días de carrera, se transforma en un constante desfile de gente que entra y sale. Una mesa de 15 metros con 5 micrófonos ampara a locutores, planilleros, relatores, comentaristas, cronometristas. En el medio de esa mesa, Luis Elías Sojit (54 años, casado, tres hijos, dos nietas, 30 años de oficio). La juventud de Julio Ricardo y Alfredo Curcu alivian la fatiga del veterano Luis Elías, que por primera vez en su carrera fracciona el tiempo de su conducción microfónica.
En la transmisión de LR2, según la acreditada palabra del popular conductor de "Coche a la vista", se han invertido 7.800.000 pesos, absorbidos por 33 avisadores con un margen de ganancia limitado. Luis Elías confiesa que su ganancia no llega al millón de pesos, pues para él lo fundamental es que trabaje mucha gente, "que cobra y bien", sacrificando el porcentaje de la utilidad que normalmente debería dejar.
De los cinco aviones que llevan la inscripción "Coche a la vista" sólo dos salen al aíre: uno que va con los punteros (Carlos Ferreyra) y otro denominado "de cola", que espera a los rezagados (Víctor Navas Prieto). Los demás dan información por línea privada y están dispuestos a salir en caso de emergencia. Luis Elías calcula que en su transmisión, preparada 90 días antes de la largada, han colaborado 215 personas, estando en el aire 92h. 20m., incluyendo las clásicas "Noches de Gala" en emisiones nocturnas. "La torre Mágica" (Capuano Tomey) es otro de los inventos del popular Luis Elías. Sirve para dar noticias, de los que no hay noticias", según el propio Tomey. El campanazo y la chicharra son métodos publicitarios que procuran el impacto. Finalmente, la organización "Coche a la vista" ha contado con la denominada "barredora Argenta", auspiciada por la casa Di Tella. Esta "barredora", dotada de un equipo transmisor, marchaba detrás del último coche en carrera y su función era ponerse en contacto, en caso de que algún rezagado le hiciera falta algo.
Javier González, encargado del "bufet" radio Argentina, confesó a EL GRAFICO que durante los días de carrera vendió algo más de mil pocillos de café y que en su caja ingresaron casi 33.000 pesos venta de "sandwichs", bebidas, etc.
LOS JOVENES VIEJOS
"Después de 16 años —nos decía Alberto Hugo Cando (38 años, casado, un hijo, 10 años de profesión)— radio Spléndid volvió a ceder su micrófono para la transmisión de un gran premio. El último —agregó— fue nada menos que Floravanti, en oportunidad de la carrera a Caracas."
Con el lema de: "Más carrera que avisos", Cando junto a Marino, Maidana, Podestá, Ramini, Palacios y un cotizado núcleo de locutores se lanzó a la aventura de transmitir por una emisora grande (la única este año) esta competencia.
La innovación de Splendid consistió en el aporte de una modernísima máquina electrónica, que al instante daba a conocer promedio de la carrera, posición, hombres que avanzan, parciales en promedios y tiempos netos. Esto, según Cando, no es un invento. Ya en otras oportunidades se habla probado, pero por falta de entendimiento no se había logrado que esa formidable máquina dé los resultados que dio en esta carrera.
"Vértigo en Splendid" costó 4.766.000 pesos (paradójicamente una de las más baratas, según el testimonio de los demás empresarios). En su transmisión trabajaron 170 personas establecidas en un proceso previo de 5 meses, para ocupar 72 horas, incluyendo los suplementos nocturnos.
Cuando calcula que la ganancia no supera el 10 por ciento del costo mencionado, a pesar de sus 17 calificados avisadores.
Una manera de demostrar que las transmisiones cumplen el verdadero sentido social está dado en este ejemplo: el avión H.I.J. (había dos transmitiendo) recogió a Nasif Estéfano momentos después de su accidente de la segunda etapa. Juan Carlos Rouselot (relator de ese avión) se puso de acuerdo con el piloto, Jorge Mugica, y el operador, Tristán Alberti, para llevar en la máquina a Nasif a un sanatorio de San Juan, donde recibió rápida atención médica.
Un detalle importante es éste: cuando EL GRAFICO estuvo en los estudios de Splendid para recoger estos datos vio cómo un núcleo numeroso de jóvenes se ponía alrededor de la mesa de trabajo. La escena, nos dijeron, se repite diariamente, acaso porque Cando y su equipo de gente joven coincida en su amena transmisión con las pretensiones de la época.
EL SOLITARIO D'AGOSTINO
Cuando estuvimos en Radio Mitre observamos una diferencia con las demás radios: la transmisión parecía, por su silencio, un programa cultural. Solamente Eduardo Emilio D'Agostino (45 años, casado, sin hijos, 17 años en el micrófono) emitía su conocida y prestigiosa voz al aire. Lo acompañaban dos planilleros, dos locutores y el longilíneo Arturo Guerrero (gerente técnico de la emisora) detrás del vidrio que separa la cabina del estudio.
El veterano D'Agostino, que estuvo 70 horas transmitiendo, nos dijo que invirtió 5.250.000 pesos para ganar entre un 10 y un 12 por ciento, con solamente 15 avisadores. Según él. 250 personas colaboraron con emisoras Mitre, incluyendo sus tres aviones (1 de emergencia) y sus seis unidades terrestres, "las más poderosas del país", dijo orgullosamente.
Al igual que los demás, D'Agostino también realizó transmisiones nocturnas y solo se lamentó de que le robaran la información...
TODOS PARA UNO...
Radio Rivadavia, según la confesión de su conductor Andrés Rouco (46 años, casado, dos hijas, 25 de relator), "no tiene figuras". "Somos —añadió— un grupo de gente que pretendemos hacer las cosas bien y con organización. Lo que se dice uno para todos y todos para uno".
El grupo que trabajó para "Carburando en deportes" se estima en 120 personas. De los 6.500.000 pesos que costó la carrera, Rouco y González Longhi (su socio) creen haber ganado algo así como 3.000.000, o sea aproximadamente el 30 por ciento de lo facturado.
Rouco no sabe si será por la racha o el "cuarto de hora", pero confiese que su programa es el más escuchado. (Lo mismo nos dijeron, sin excepciones los demás.) Lo cierto del caso es que al ver la mesa de trabajo da la sensación exacta del grupo parejo que su conductor definió, como premisa fundamental.
La vigorosa voz de Navarro (agregado al equipo), la solvencia de Calabrese y el particularísimo tono de Rouco hicieron que Radio Rivadavia lograra una transmisión pretendidamente organizada. Sus tres aviones y los 4 puestos móviles tuvieron la suerte, este año, de salir sin dificultades.
"EMOCION EN LAS RUTAS"
Con este título Radio Libertad fue la única emisora empresaria que transmitió el gran premio. La conducción le fue confiada a Luisito Scaraffía y Tito Rebagliatti.
En su auditorio subterráneo de la galería Güemes, Radio Libertad se mantuvo 81 horas en el aíre.
Conversando para EL GRAFICO, Lui Scaraffía (38 años, casado, 2 hijas, 1 años de trabajo periodístico) nos dijo q a la radio la transmisión le costaba más o menos 4.500.000 pesos. Por otra fue te autorizada supimos que esa emisora facturó 8.700.000 pesos. Teniendo cuenta que trabajaron nada más que 4 personas, con 3 aviones y 4 móviles, como que LS10 hizo un buen negocio.
Por otra parte el nervioso Scaraffia d un ejemplo de la manera en que Libertad colaboró con los corredores: como de 3 aviones uno regresaba diariamente para dejar el material fílmico del Canal 9, lo familiares y amigos de los corredor concurrían en gran números a los estudios para hacer llegar a los hombres en carrera desde gotas nasales, repuestos y dinero hasta ropas y cartas.
Y otro detalle: durante la carrera cada hombre que está en los estudios fuma entre 30 y 40 cigarrillos, toma igual número de pocillos de café y se alimenta "sandwichs".
DETRAS DE LOS MICROFONOS
Estando con ellos la imagen es ésta: caras con sueño, cuerpos cansados, gargantas gastadas. Lo importante es hablar. Hablar siempre. Informar sobre el primero y el último. Solucionar los problemas de los demás. No hay excepciones. Unos lo harán mejor que otros, pero eso es subjetivo. El relator automovilístico no admite perder: para él lo mejor es lo de él. Para él todos los demás le roban información. Para él lo importante es el oyente. Puede que esto sea lo más auténtico...
El Gráfico (1964).
