¡Habla memoria!

1990. Cuestión de pelotas

En Liniers se enfrentaban Vélez y San Lorenzo, el árbitro del partido era Juan Bava. Las pelotas se iban a la tribuna y los hinchas nos las devolvían, cuando ya no había más. El colegiado decidió suspender el partido.

Por Redacción EG ·

16 de enero de 2020

Vélez y San Lorenzo no sólo no conseguían embocarla en el arco sino que estaban muy lejos. Las dos primeras pelotas que se escaparon fueron a la popular del Cuervo y jamás volvieron. La tercera aterrizó en la platea velezana y, para no ser menos, decidieron no devolverla. Cuando a los 40' del PT, el arquero local, Miguel Salinas, desvió un disparo de Víctor Hugo Ferreyra y la cuarta pelota superó el alambrado y fue a la tribuna de San Lorenzo, pocos imaginaron que sería la última acción de la tarde. Así fue nomás. Juan Bava, un árbitro de pocas pulgas, hizo gestiones para que los jugadores del Ciclón le pidieran los balones a su gente, pero como no pasó nada, esperó ocho minutos y dio por terminado el partido. Con el tiempo, Bava admitió que fue un error haberlo suspendido.

 

Imagen Juan Bava, el árbitro del encuentro.
Juan Bava, el árbitro del encuentro.
 

 

El Gráfico (1990).