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FEDERER CAYÓ ANTE ANDÚJAR EN SU REGRESO AL POLVO DE LADRILLO

El suizo perdió 6-4, 4-6 y 6-4 en la primera ronda de Ginebra, en su país, en lo que fuera su primer torneo en canchas lentas después de 711 días. Llevaba dos meses sin actuar en el circuito.

Por Redacción EG ·

18 de mayo de 2021

ROGER FEDERER volvió al circuito después de dos meses y no pudo marcar la diferencia: en su debut en los octavos de final del ATP 250 de Ginebra, en su país, se despidió tras caer 6-4, 4-6 y 6-4 ante el español Pablo Andújar (75°), a quien no había enfrentado nunca en su carrera.

"Esperaba algo mejor de mí mismo. No pude marcar la diferencia en los momentos clave. Estoy decepcionado por los organizadores que estaban realmente felices de verme acá", se sinceró el suizo, quien no actuaba en el circuito desde marzo, cuando jugó dos partidos en el torneo de Doha, su primera aparición después de trece meses y dos operaciones en la rodilla derecha.

Actual número ocho del mundo, producto del congelamiento del ranking por la pandemia, Federer reapareció en un torneo sobre polvo de ladrillo después de 711 días. Su último partido en canchas lentas había sido en las semifinales de Roland Garros 2019, nada menos que ante Rafael Nadal, quien lo superó sin atenuantes por 6-3, 6-4 y 6-2.

El objetivo de Federer, que jugó sólo tres torneos desde enero de 2020 -Australia de ese año, Doha y Ginebra-, estaba puesto en acumular rodaje en polvo de ladrillo para llegar en condiciones competitivas a Wimbledon, el gran objetivo de su calendario. A punto de cumplir 40 años el próximo 8 de agosto, el suizo ahora jugará en Paris y luego saltará al césped con su armado habitual: jugará en Halle y en La Catedral. "Mi meta es la temporada de césped, no Roland Garros. Las próximas semanas serán importantes para volver a acostumbrarme al circuito. Los partidos son diferentes a los entrenamientos", dijo tras la caída.

"Ahora necesito unos diez partidos para saber dónde estoy. Todavía existen muchas dudas sobre mi estado de forma", había advertido Federer en la previa de su vuelta en Ginebra, parada en la que esperaba encadenar al menos un puñado de presentaciones para encontrar ritmo. De todos modos, más allá de la derrota, exhibió una mejoría cuando promediaba el partido: había empezado sin buena movilidad de piernas pero pudo acomodarse, encontrar el timing y hasta dejar algunas de las gemas que suele mostrar cuando está en su mejor nivel.