Adolfo Cambiaso, animal competitivo
Confiesa que se obsesiona menos y que sus hijos aún no dimensionan que es el mejor polista del mundo. La perfección como fantasía. El triunfo como piedra basal y su nulo aprendizaje. La espectacularidad de La Dolfina, el estreno del segundo equipo del club en Palermo, y el retiro que le pisa los talones.
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