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Semifinal superclásica: capítulo I

River y Boca vuelven a enfrentarse por la Copa Libertadores, tal como sucedió en esta década el año pasado y en 2015. El Millonario recibe al Xeneize en lo que será la primera semifinal en un estadio a reventar.

Por Redacción EG ·

01 de octubre de 2019

Los últimos años estuvieron marcados por las series en tornes internacionales entre River y Boca como nunca antes en la historia, también se dio la segunda definición por un título entre los dos equipos más convocantes del país, fue la final de la Supercopa Argentina que se disputó en Mendoza el 14 de marzo de 2018. Nadie imaginaba lo que sucedería meses más tarde, cuando el partido más importante del continente debió mudarse a Madrid.

Pero el de hoy es un capítulo nuevo, algunos instalan la posibilidad de una ¨revancha¨ por lo sucedido el año pasado en diciembre, pero no es justo utilizar ese término para la serie que comienza hoy en el estadio Monumental y finalizará en La Bombonera el 22 de octubre.

¿Por qué no es una revancha? Porque lo que se juega no es lo mismo, porque el plantel de Boca que perdió aquella recordada final de Copa Libertadores en Madrid no es el mismo, muchos de esos jugadores emigraron del Xeneize y porque el director técnico tampoco es el mismo. Pero que no sea una revancha no significa que este no sea un partido sumamente importante para ambos equipos.

River quiere seguir con su senda de éxitos internacionales –los mismos que le fueron esquivos a lo largo de su rica historia- mientras que Boca quiere volver a jugar una final de Copa, las últimas fueron las de 2018 y 2012 (frente a Corinthians) y quiere alcanzar su séptima Copa Libertadores y así igualar a Independiente como máximos ganadores de esta competición. Los dos equipos se juegan mucho, y el desgaste tanto físico como psicológico seguramente aparezca una vez finalizada esta llave. Pero va a ser importante que el vencedor se pueda recuperar rápido, ya que deberá estar en las mejores condiciones para la final a disputarse en Santiago de Chile el sábado 23 de noviembre frente al ganador de la otra semifinal que la disputarán Gremio y Flamengo.

A partir de las 21.30 la pelota comenzará a rodar, las especulaciones sobre las formaciones van a quedar de lado y ya se sabrá cuáles van a ser los veintidós jugadores que saldrán a la cancha. En Boca hay más incertidumbre que en River. Las dudas pasan por saber si Eduardo Salvio podrá ser de la partida, lo mismo que Mauro Zárate y Ramón Ábila, estos tres jugadores estuvieron lesionados recientemente y no se sabe cómo llegarán al partido de hoy. La posible formación, con alguna incógnita sería: Andrada en el arco, la clásica línea de cuatro con Weigandt, Lisandro López, Izquierdoz y Emmanuel Mas. La mitad de la cancha tiene su doble cinco asegurado, Capaldo y Marcone serán los encargados de contener los avances de River. Aléxis Mac Allister será de la partida y la duda surge entre Zárate, Reynoso y Villa, uno de esos tres ocupará el lugar vacante en el mediocampo. El delantero no está definido, pero de no ser Ábila, el elegido podría ser Franco Soldano.

River tiene todo más claro, la duda pasa por saber si Nicolás De La Cruz llegará al 100% y quien será el segundo marcador central, pero los posibles once son: Armani, Montiel, Martínez Quarta, Pinola o Paulo Díaz y Milton Casco. El mediocampo, Enzo Pérez, Exequiel Palacios, Ignacio Fernández y De La Cruz, si el uruguayo no juega, quien lo haría sería Jorge Carrascal. La delantera está clara, Matías Suárez y Rafael Santos Borré.

¿Quiénes deberán cuidarse de una tarjeta amarilla? Para pdoer jugar el partido de vuelta en La Bombonera, hay tres jugadores de Boca que no deberán ser amonestados, estos son Ábila, Capaldo y Weigandt, mientras que por parte de River, el único que llega al límite es Nicolás De La Cruz. El árbitro del partido será el brasilero Raphael Claus, de 40 años.

El operativo de seguridad cuenta con 1500 efectivos policiales encargados de custodiar todo lo que suceda en las inmediaciones del Monumental, cabe destacar que la barra brava de River atraviesa una feroz interna y los ojos estarán posados allí, también el ingreso de la delegación de Boca que ingresará por Lidoro Quinteros.

Esta noche comienzan los primeros noventa minutos de una semifinal apasionante, donde se escribirá otro capítulo en la fascinante historia del Superclásico.

 

Por Lautaro Toschi.

Foto de portada: Alejandro Del Bosco.