La jornada está aquí

River y Boca quedaron igualados

El Superclásico de la Superliga terminó 0 a 0, por más que River haya tenido la iniciativa y Boca lo haya esperado, ninguno de los dos pudo romper el cero y ahora ya miran las semifinales de la Libertadores, donde se volverán a ver las caras.

Por Redacción EG ·

01 de septiembre de 2019

El marco fue estupendo, el Monumental albergó más de 70 mil personas que fueron no sólo a ver uno de los eventos deportivos más valorados a nivel mundial, sino que estaba el condimento de volver a verle la cara a su máximo rival luego del ya célebre partido disputado en Madrid, donde River le ganó la final de la Copa Libertadores a Boca. Si bien los hinchas habían organizado unos mosaicos donde se iban a plasmar las dos finales que el Millonario le ganó al Xeneize el año pasado, la seguridad lo prohibió. De igual manera, los hinchas mediante cantos, banderas y globos negros, vivieron su fiesta.

 

Imagen El recibimiento de River.
El recibimiento de River.
 

Alfaro sorprendió con el 11 inicial al no poner a Carlos Tévez, la dupla ofensiva que eligió para intentar vulnerar la valla de Armani fue Franco Soldano y Jan Hurtado. Con las ausencias de Zárate y Ábila por lesión, la lógica indicaba que el Apache iba a entrar desde el arranque.

 

Imagen Jan Hurtado enfrenta a Paulo Díaz.
Jan Hurtado enfrenta a Paulo Díaz.
 

Desde el punto de vista futbolístico, el local fue quien tomó la iniciativa desde el primer minuto, tal como es costumbre, el River de Gallardo realiza un gran desgaste físico, la presión alta, intentar salir jugando, no abusar del pelotazo son algunas de las características de este equipo. Boca, por su parte, paró un esquema para no sufrir en la mitad de la cancha. Pobló el medio con Marcone, De Rossi y Capaldo, intentando controlar en la medida de lo posible a Nacho Fernández, De La Cruz y Palacios, que son los jugadores que más lastiman con sus pases filtrados y en cierta medida lo logró.

Ya con algunos minutos jugados, se comenzaron a notar más claramente la diferencia entre los dos equipos, Boca priorizó el orden y poder tener alguna contra, ya que los defensores centrales de River –Paulo Díaz y Martínez Quarta- jugaban casi en la mitad de la cancha, pero nunca ningún jugador Xeneize pudo quedar mano a mano con Armani. Por su parte, River tenía la pelota, la movía de un lado para el otro, sus laterales se proyectaban, pero chocaban ante una defensa de Boca que no regalaba espacios, aun así el Millonario tuvo algunas situaciones para convertir, pero no del todo claras, un remate violento de De La Cruz que controló bien Andrada y luego el resto fueron aproximaciones que no tuvieron gran peligro.

Lo más destacado del primer tiempo fue el juego brusco e intenso, Boca tuvo cuatro amonestados, mientras que River solo uno.

 

Superclásico intenso
 

El segundo tiempo comenzó con River algo más impreciso, aunque todavía con el control de la pelota, pero se fallaba en la zona final, de igual manera tuvo las situaciones para abrir el marcador, por medio de Lucas Martínez Quarta, que tuvo para definir y la pelota se fue muy alta y también Rafael Santos Borré pudo romper el cero cuando a la altura del punto del penal tuvo todo para definir y su remate fue muy débil a las manos del arquero mendocino.

Un detalle no menor que muestra lo que fue el planteo de Boca en el Monumental y de las intenciones que tuvo fue que a los 18 minutos del segundo tiempo el árbitro del partido –Fernando Rapallini- le mostró la tarjeta amarilla a Esteban Andrada porque ya desde el primer tiempo venía demorando mucho cada vez que tenía que realizar un saque de arco.

Ya en el tramo final del partido, se produjeron los ingresos de Ferreira, Suárez y Scocco en River, de los tres, el ex Belgrano de Córdoba fue quien más contacto tuvo con la pelota y realizó algunos movimientos interesantes. En Boca ingresaron Villa, Reynoso y Carlos Tévez, quien fue el que causó más peligro en el arco rival, a través de un tiro libre que Armani sacó por encima del travesaño.

De esta manera se terminó el Superclásico de la Superliga, ahora se vienen dos más, por las semifinales de la Copa Libertadores, sin dudas con una mayor importancia que el de hoy.  

 

Por Lautaro Toschi.

 

 

El Superclásico terminó en un aburrido 0 a 0