De la A a la Z
Trotamundos del gol: John Guidetti, de la A a la Z
Con solo 23 años, el delantero sueco del Celta de Vigo ya jugó en 5 ligas europeas. Se crió en Kenia y mejoró su técnica jugando al fútbol descalzo. Estuvo a punto de retirarse por una infección. Carismático y divertido, muchos ya lo comparan con Ibrahimovic, aunque él sólo piensa en la música y en ponerse una florería.
Por Alejandra Altamirano Halle ·
26 de diciembre de 2015
BICICLETA. Cuando se reintegró a los entrenamientos, sintió entumecida la pierna derecha. “Subite a la bici fija”, le dijo el preparador físico. No hubo caso. Se cayó al intentar ponerse los pantalones. Algo andaba mal. Terminó en el hospital, donde detectaron que un trozo de pollo en mal estado le había causado una infección tan grave que los anticuerpos generados por su organismo le habían afectado el sistema nervioso. Su carrera estuvo frenada, y en riesgo, casi dos años.
CARRERA. Hizo inferiores en Kenia y también en Suecia. Sven Göran Eriksson lo contrató para Manchester City cuando tenía 15 años. Fue a préstamo al IF Brommapojkarna y al Burnley. Durante la temporada 2010/2011 estuvo cedido en Feyenoord, hasta el incidente con su pierna. Tras su recuperación, pasó por el Stoke City y el Celtic. En junio de este año, cuando venció su vínculo con el City, llegó al Celta de Vigo.
DANI. El rapero sueco Dani M. se sorprendió al escuchar quién lo llamaba. Era Guidetti, a quien ya conocía de algunos shows, y quería pedirle un favor. “Necesito que nos hagas una canción. Estamos en el Grupo de la Muerte, con Italia, Inglaterra y Portugal”. Así surgió “Nye Sverige” (Nueva Suecia), cuya letra incitaba a “matar al grupo de la Muerte”. Guidetti hizo escuchar la canción en el vestuario sueco por primera vez y fue un hit en la Euro Sub 21.
EURO. Fue el líder dentro y fuera de la cancha durante la Eurocopa Sub 21, que se jugó este año en República Checa y terminó ganando Suecia por primera vez. Con su carisma, Guidetti (Botín de Bronce, 2 goles) lideró los festejos en Estocolmo, que convocaron a 25.000 personas en Kungsträdgården, la celebración más multitudinaria de la historia deportiva sueca. Y se animó a todo: se tiñó el pelo de rosa, tomó el micrófono para cantar y animó a la multitud. Un líder de masas.
FLORES. Después de las dudas sobre la continuidad de su carrera por sus dos años de inactividad, sus amigos le recomendaron ponerse una florería cuando se retire, consejo que le gustó y promete llevar a cabo: “Se llamará Flores para los que dudan. Y le enviaré esas flores a los que no creyeron en mí. Esa gente no sabe cuánto me ha ayudado. Las flores serán mi pequeño agradecimiento”, esgrime sin rencores.
GOLEADA. Metió el cuarto gol en el histórico 4-1 del Celta al Barcelona por la Liga española, que además sirvió para robarle la punta al equipo de Luis Enrique: faltando 8 minutos, recibió un centro atrás por detrás de su marcador, la paró con la zurda y le dio una volea de derecha que sorprendió a Ter Stegen. Fue la mayor goleada que sufría el Barcelona desde 2008. “Una gran noche, los hinchas estuvieron geniales”, subió en su cuenta de Instagram.
HUMANITARIO. “No tienen ni ropa ni comida, pero cada día dan gracias al Señor por el regalo de la vida”, opinó sobre la vida espiritual de los desfavorecidos de Kenia, a los que ayuda con la fundación que lleva su nombre. El propósito de la John Guidetti Foundation es construir canchas de fútbol y escuelas para promover el deporte.
Una muestra de agradecimiento y de compromiso para un país que quiere mucho.
IMPALA. De chico jugó en las inferiores del Brommapojkarma, una de las canteras más importantes del fútbol sueco, hasta que se mudó a Kenia (ver K). Su padre, Mike, les pidió a los dirigentes que abrieran una filial en el país africano. Allí nació el Impala Bromma Boys, en el que se destacaba un rubiecito muy temperamental, entre todos los jugadores locales de diversas edades, ya que, como contó Guidetti, “no había muchos documentos”.
JUGADORAZO. A los 19, durante su préstamo con el Feyenoord marcó 20 goles en 23 partidos, en los que incluyó hat tricks ante Ajax, Vitesse y Twente. Ronald Koeman lo describió como un fenómeno. “Hubo hinchas que se tatuaron mi nombre. En cada partido de local, había 50.000 personas de pie en De Kuip, gritando ‘Super Guidetti’. Me hacían reverencias. Y hasta un rap que decía ‘Mira a Messi, nosotros tenemos a Guidetti’. Fue el mejor año de mi vida”, recuerda sobre la Eredivisie.
KENIA. Cuando él tenía 3 años, su papá aceptó el cargo de director en una escuela sueca de Nairobi. Al tiempo, la familia volvió a Estocolmo. Cuando John cumplió los 10, los Guidetti volvieron a radicarse en la capital keniata. Primero jugó para el Impala, después pasó por el Mathare United y luego recaló en la academia Lig Ndogo. Aprendió a jugar descalzo con los Black Stars de Kibera, un barrio muy pobre de Nairobi. “La gente no me cree pero es el mejor lugar en el mundo”.
LOCO. ¿Quién dijo que Guidetti estaba “un poco loco”? El argentino Augusto Fernández tuvo que describir a su nuevo compañero en el Celta y lo primero que le vino a la mente fue decir, entre risas, que estaba un poco pirado. “John tiene una gran energía. Un buen movimiento en el campo, es muy dinámico y una personalidad encantadora. Estoy seguro de que nos va a ayudar mucho en la ofensiva”, opinó el capitán.
MANCINI. Cuando el italiano se dio cuenta de que el Manchester City todavía no había renovado el contrato de Guidetti en 2011, casi se infarta. Es que el sueco ya tenía un precontrato con el FC Twente. Intervinieron abogados y finalmente firmó con el City por tres años más, pero increíblemente, lo cedieron al Feyenoord a un día del cierre del libro de pases. “Tengo mucho respeto por Mancini. Le gustaba como jugador”, opinó John, sin rencores por no haber tenido más oportunidades.
NOVIA. Estuvo a los besos con su novia Sanne, tras ganar la final de la Euro Sub 21, rubia que cautivó al público masculino. Se conocen desde la infancia y ella lo ha acompañado en cada ciudad donde le tocó jugar. En 2012, se rumoreó que Guidetti tenía un romance con la actriz Mischa Barton, porque compartieron una serie de eventos sociales en Estocolmo, incluida una alfombra roja donde desfilaron y posaron juntos. Pero no pasó de eso.
OFENSIVO. En una entrevista por TV cantó una canción que le dedicaban los fans del Celtic. “Oh, John Guidetti pone la pelota en la red, él es el Super Sueco, y los hunos están muertos, caminando en el mundo maravilloso de Guidetti”. La frase “the huns are deid (esa es la palabra escocesa que usan en lugar de dead) es una burla a la quiebra del Glasgow Rangers. El comité de disciplina escocés lo citó y lo culpó de hacer un comentario de “naturaleza ofensiva”.
POLIGLOTA. Habla sueco, inglés y también algo de español por sus clases en la escuela secundaria. Tiene grandes amigos chilenos que le enseñaron a defenderse con el idioma y hasta escucha música en castellano. “Mi padre es mitad italiano, un cuarto brasileño y otro cuarto sueco. Mi madre es 100% sueca, es una chica del campo con las vacas y todo eso”, bromeó sobre sus raíces multiculturales en un show de TV noruego.
¿QUIENES? La rivalidad entre Suecia y Dinamarca tiene siglos. Antes del partido entre ambas selecciones, por la Euro Sub 21, el técnico de Dinamarca había dicho que si llegaban a ganar, Suecia les iba a tener que devolver el territorio robado. Después del 4-1 para Suecia, Guidetti contestó: “Que dejen de hablar de nosotros, ¿quiénes se creen que son? Los goleamos, fueron el peor equipo que enfrentamos. Que se vayan a casa”.
RAPERO. Muy suelto, rapea sin titubear. Lo hizo en vivo en el evento de una marca deportiva junto al jugador Virgil Van Dijk. Y, acostumbrado a las rimas, lideró los festejos de Suecia en la Euro al grito de una rima muy pegadiza. “Vi är svenska fans allihopa”, lo que se traduce a ‘Todos somos hinchas de Suecia’. También se anima a los temas románticos y cantó una canción de Mariah Carey para un saludo navideño del Manchester City.
SOÑADOR. “En Suecia no está permitido decir cosas buenas sobre uno mismo. Cuando me preguntaban cuál era mi sueño, decía: ‘Quiero ser el mejor del mundo’. Pero en Suecia no está aceptado. ‘¿Quién se cree que es?’, dicen. ¿Pero quién me puede decir que no puedo soñar? Si pudiera desear cualquier cosa, ese sería mi mayor deseo. No quiero una pileta rellena con golosinas, quiero ser el mejor futbolista del mundo”, declaró.
TOTO. El argentino Eduardo Berizzo, su técnico en el Celta, recibió elogios de su parte. “Su filosofía es fantástica. Ha dedicado mucho tiempo y energía en mí. El quiere jugar bien. Le gusta el fútbol ofensivo. Tenemos un contacto muy directo con él”, opinó sobre el Toto, quien todavía no le da lugar como titular, por el buen momento de Nolito. “Disfruto de cada segundo que juego en el Celta y me gustaría jugar más", pide Guidetti.
UNICO. Hay formas y formas de entrar en calor antes del partido. La de Guidetti incluye los ejercicios que hacen todos los jugadores, pero le agrega un plus: para relajarse, realiza una secuencia de baile, que incluye movimientos de cadera, brazos y hacer mímica de la canción que escucha con sus auriculares. Aprovecha su feeling con la gente, y los anima a bailar desde la cancha. Todo un showman.
VIGO. “El Celta es como una pequeña familia. Cada día que pasa me pongo más y más contento con mi decisión de mudarme a Vigo. Esta será mi primera temporada en la liga más importante del mundo. Vine aquí porque quiero jugar al fútbol en un nivel muy alto. Espero poder ayudar”, dijo apenas llegó a Balaídos. Rechazó propuestas de China y Medio Oriente porque “no era el dinero lo que estaba buscando”, para llegar al club que, asegura, le calza “como un guante”.
¡WOW! Caminando por Estocolmo, un nene de 8 años vio venir a su ídolo, John Guidetti, y le pidió pelotear un rato. “Está por empezar la final de la Champions, pero jugamos después, ¿sí?”, dijo John. El nene volvió a la casa y aguantó despierto hasta el final del Barcelona 3 Juventus 1. A las 23:30, sus padres lo acompañaron a la canchita, pensando que no iba a haber nadie. Pero allí estaba Guidetti, esperándolo para jugar.
XAVI. Con 22 años y habiéndose destapado en el Celtic, a Guidetti ya lo querían varios clubes europeos. El gerente general Peter Lawwell intentó convencerlo de quedarse al mostrarle unas declaraciones de Xavi: “Entiendo por qué Henrik Larsson nunca quería irse del Celtic. Tiene el público más apasionado y sorprendente que haya visto en un estadio de fútbol”, había declarado el catalán. El sueño de ser el próximo Larsson se desvaneció cuando el Manchester City decidió repatriarlo.
YO-YO. Guidetti es fanático de la música, pero también tiene cantito propio: los hinchas del Celtic le inventaron uno, pero ninguno fue tan pegadizo como el de los suecos en la Euro Sub 21: “Yo yo, yo yo yo yo, yo yo yo yo, yo yo John Guidetti yo yo”. Llegaron a cantarlo 50 minutos por partido. Seguramente, también sonará fuerte en los Juegos Olímpicos de Rio, ya que Suecia clasificó gracias a la victoria de Guidetti y compañía.
ZLATAN. Las comparaciones con Ibrahimovic son inevitables. Son suecos, delanteros, locuaces y tienen alta autoestima. Hoy comparten la delantera del seleccionado de Suecia, y Guidetti está encantado. “Dios mío, él es muy bueno en lo que hace. Zlatan atrae a la gente. Es fácil jugar con él. Tiene mucha experiencia, quiero absorber todo lo que pueda”, dijo John, que quizás no será el nuevo Zlatan, pero sí su sucesor.
Por Alejandra Altamirano Halle
Nota publicada en la edición de noviembre de 2015 de El Gráfico
