La Selección
Correa, el sostén futbolístico de un equipo en formación
El delantero del Atlético de Madrid fue la figura del triunfo ante Argelia, el 2 a 1 que le permite a la selección olímpica depender de sí misma para avanzar a cuartos de final. Angelito, con la 10 en la espalda, aportó juego y gol. Argentina lo necesitaba para revertir la mala imagen que había dejado en el debut.
Por Redacción EG ·
07 de agosto de 2016
El 10, la esperanza, la figura del partido. Angel Correa no desentona. Después del flojo inicio de la selección olímpica con derrota ante Portugal, el delantero del Atlético de Madrid se cargó el equipo al hombre y fue la figura de la segunda presentación del equipo de Olarticoechea.
"El miércoles nos jugamos todo", dijo Correa, al término del partido ante Argelia, triunfo 2 a 1 que le da le permite a la Argentina depender de sí mismo para avanzar a cuartos de final. Dentro de tres días enfrenta a Honduras, el último partido de la zona, que define sus chances de avanzar a cuartos de final.
"En el primer partido perdí muchas pelotas. Hoy jugué más tranquilo. Todo el equipo jugó más tranquilo y ahora soñamos con la clasificación", expresó el rosarino.
Otro de los que convirtió fue Jonathan Calleri. El exdelantero de Boca clavó el segundo. Sin embargo, desperdició unas cuantas, y claras, situaciones de gol que hubieran servido para liquidar el partido algunos minutos antes: "Tengo que estar más tranquilo a la hora de definir".
El gol de Angelito
"El miércoles nos jugamos todo", dijo Correa, al término del partido ante Argelia, triunfo 2 a 1 que le da le permite a la Argentina depender de sí mismo para avanzar a cuartos de final. Dentro de tres días enfrenta a Honduras, el último partido de la zona, que define sus chances de avanzar a cuartos de final.
"En el primer partido perdí muchas pelotas. Hoy jugué más tranquilo. Todo el equipo jugó más tranquilo y ahora soñamos con la clasificación", expresó el rosarino.
Otro de los que convirtió fue Jonathan Calleri. El exdelantero de Boca clavó el segundo. Sin embargo, desperdició unas cuantas, y claras, situaciones de gol que hubieran servido para liquidar el partido algunos minutos antes: "Tengo que estar más tranquilo a la hora de definir".
