Argentinos en el exterior

"Mi idea es irme en diciembre"

Javier Pinola, defensor de Nuremberg, confiesa que necesita un cambio de aire. En una charla con elgrafico.com.ar, habla de su salida de la Selección Argentina en la Copa América 2007 y de cómo es jugar en la segunda división de Alemania.

Por Redacción EG ·

11 de noviembre de 2008
Javier Pinola pide que lo llamen en media hora. La calle, cuenta, es un “quilombo” y no puede hablar. Y, con esa palabra, certifica su documento de argentino en Europa. El ex Racing, hoy en el Nuremberg de la segunda división alemana, habla de su paso por la Selección -donde tuvo que dejarle el lugar a Juan Román Riquelme en la Copa América 2007-, de su presente y, sobre todo, de su futuro. En diálogo con elgrafico.com.ar, revela que espera diciembre con ansias para cambiar de club y resurgir desde abajo.
-Imagino que ya adaptado a Alemania, ¿no?
-Sí, la verdad que sí. Estoy con mi señora y con mi nene. Además, en este último año hice muchos amigos. Eso me ayuda mucho. Podemos organizar tranquilos la semana y es lindo. Después, hay cosas a las que te tenés que adaptar. Pero no tenemos ningún problema y vivimos con la mejor predisposición.
-¿Cómo fue pasar de ganar la Copa de Alemania a la segunda división?
-Es difícil. El año pasado jugamos la Copa UEFA. Por ahí el plantel era muy reducido para el campeonato, la Copa de Alemania y la UEFA. Quizás era un plantel muy chico. Además, hubo muchos jugadores lesionados y las cosas no nos empezaron a ir bien. Se fue el técnico con el que habíamos ganado la copa y el que vino nos hizo bajar la intensidad de los entrenamientos y terminó siendo peor. La verdad, el equipo no jugaba a nada. Entonces, quedamos algunos jugadores y a otros los vendieron.
-¿Y cómo es la segunda división de Alemania?
-La segunda no es fácil. Los equipos se meten atrás. Encima nosotros no hacemos goles y ellos nos convierten al primer error. Es complicado. Las cosas no nos están saliendo bien.
-¿Tuviste la posibilidad de venir a River?
-Sí, tuve esa posibilidad. Acá también me quería el Bayern Leverkusen. Pero la plata que pedía el Nuremberg era un disparate. Hasta yo le dije a la gente de River que era una locura y, entonces, dieron marcha atrás. Mi intención era irme. Pero no me quedó otra. La idea, ahora, es en diciembre irme, pero para jugar en una Primera de Europa. Me quiero quedar acá por la seguridad, el orden, el respeto y la familia. En cierto modo uno se pone ansioso para salir de una vez.
-Sin embargo, los hinchas te quieren mucho. Hasta llegaron a juntar firmas en una página de Internet para que no te vayas.
-Esa fue la cara positiva. La gente me quiere. Fui al único que aplaudieron cuando nos fuimos al descenso. Entonces, el club pensó que no me podían vender. No lo podemos vender a él, dijeron. Y eso, en cierto punto, me perjudicó. Esa fue la parte negativa.
-Hoy, a más de un año, ¿cómo analizás tu salida de la Selección antes de la Copa América?
-Fue algo raro. Siempre dije que hasta el último momento nadie estaba seguro. Pero, el Coco Basile me dio su explicación y la entendí y la respete. La tuve que aceptar. Siempre le estoy muy agradecido al Coco porque me hizo debutar en la Selección. Uno siempre quiere jugar, pero la bronca fue sólo en ese momento. Siempre estuve tranquilo porque me brinde al máximo. Si no se dio, fue por algo. Ahora quiero salir del equipo y empezar de nuevo.
-¿Y a qué distancia estás hoy de la Selección Argentina?
-La verdad, no se me puede cruzar por la cabeza, para anda. Lo tengo clarísimo. En su momento pensé que en Alemania iba a ser difícil y me equivoqué. Pero estando en segunda es muy difícil.
-¿Y ahora, con la designación de Diego Maradona como técnico?
-Bien, sorprendido; mucha gente no creía que iba a ser Maradona. Diego fue el mejor futbolista de la historia. Ahora tiene que plasmar todos sus conocimientos. Y también está Bilardo, que sabe mucho.
-¿Dónde estás jugando en el Nuremberg?
-Estoy jugando de lateral izquierdo. Por eso, en cierto modo, me siento con bronca por estar en una segunda división. Lo primero que viene ahora es recuperar el nivel y, después, todos somos argentinos y tenemos las chances de estar.
-El puesto de lateral izquierdo está en crisis en Argentina...
-En un comienzo no quería jugar de lateral izquierdo. El Pato Fillol y después Guillermo Rivarola me terminaron convenciendo de que en esa posición no había muchos jugadores y, con mucha confianza, ahora puedo jugar tanto de central como de lateral.

Roberto Parrottino