Auto in

Juan Angel Rosso: la ruta europea

El Colo es oriundo de Villa Carlos Paz e hijo de Víctor Rosso, destacado piloto de la década del 80 y principios de los 90 y actual director general del Renault Lo Jack Team de Súper TC2000. A los 20 años, hace realidad su sueño de correr en el exterior, en su primera temporada en la Fórmula Ford Británica.

Por Redacción EG ·

09 de julio de 2013
 Nota publicada en la edición de julio de 2013 de El Gráfico

Imagen SE REPITE la historia en la familia Rosso. Tal como lo había hecho papá Víctor en la Fórmula 3 de los años 80, ahora su hijo Juan acelera a fondo en la Fórmula Ford Británica.
SE REPITE la historia en la familia Rosso. Tal como lo había hecho papá Víctor en la Fórmula 3 de los años 80, ahora su hijo Juan acelera a fondo en la Fórmula Ford Británica.
“Después de haber ganado mi primera carrera en Fórmula Renault Plus en el Cabalén, surgió esta idea de probar suerte en el exterior. Es una aventura bastante parecida a la que hizo mi viejo a esta misma edad, pero no surgió por eso, sino que se dio la posibilidad y nos pusimos a trabajar en este proyecto, que es más que nada un sueño, porque correr en los circuitos europeos es increíble, con un automovilismo tan avanzado que me permite aprender permanentemente. Seguir los pasos de mi viejo es un orgullo muy grande, pero no hago el intento por eso, sino para saber hasta dónde puedo desarrollar mi propio camino. Desde ya que gracias a mi familia, sobre todo por el apoyo de mi viejo y de mi abuelo, es que estoy corriendo en Europa”.

-Tu caso es llamativo, porque arrancaste de grande…
-Sí, arranqué tarde, comparado con lo chico que empiezan otros pilotos. En realidad me inicié a fines de 2011, participé toda la temporada de 2012 en Fórmula Renault Plus y ya en el 2013 vine a probar suerte en la Fórmula Ford Británica. Si hubiese sido por mí, habría arrancado antes, pero en mi casa no querían que corra, hasta que a los 17 años me dejaron competir. Mi viejo me pedía que yo estuviese seguro de lo que quería, que no lo hiciese porque él había sido piloto y estaba relacionado con el automovilismo, que mi decisión no pasara por lo que hizo él. Así que cuando les dije que era mi pasión y estaba dispuesto a dedicarme entero para convertirme en piloto, me brindaron su apoyo y entendieron que no se trataba de un capricho por sólo seguir los pasos de mi papá.

-Antes de comenzar a correr, ¿cómo era tu relación con el automovilismo?
-Iba a todas las carreras de Súper TC2000. Siempre con las ganas de correr, pero sólo eran ganas. Ahorré un año completo y me compré un simulador con volante y pedalera, conseguí una jaula y con mi abuelo armamos todo. Siempre fui de acompañarlo a mi viejo a todos lados, hasta que se dio la posibilidad, en el 2011, de empezar a manejar el show-car, en ese momento de Honda, para llevar a los sponsors en las carreras. Y después en el 2012 hice lo mismo, pero con una coupé Mégane. Eso fue lo más cercano que pude estar de las carreras.

-¿Tuviste que hacer un rápido aprendizaje para dar el salto de calidad?
-Sí, aunque todavía me falta mucho por asimilar. Pero no me queda otra que aprender todo rápidamente para no quedar tan atrás con los otros chicos que vienen corriendo desde hace tiempo. Por suerte, tengo mucha gente confiable alrededor para que me aconsejen bien y, sobre todo, para que me corrijan los errores que puedo llegar a cometer. Eso ya me pasó anteriormente en la Fórmula Renault Plus, en la que, cuando cometía una falla, ellos me lo hacían notar y ya no la volvía a repetir. Por supuesto, que el salto de calidad vendrá acompañado con la madurez que uno pueda llegar a lograr como piloto.

Imagen LA FORMULA Ford Británica es una categoría formativa, en la que Juan Rosso (auto 26) compite para el Jamun Racing, junto con su comprovinciano Nicolás Maranzana.
LA FORMULA Ford Británica es una categoría formativa, en la que Juan Rosso (auto 26) compite para el Jamun Racing, junto con su comprovinciano Nicolás Maranzana.
-Y con respecto al apoyo de Sergio Rinland, que tanto conoce del automovilismo en Europa…
-Sergio ha sido fundamental en toda esta historia, porque con el apoyo de su familia, su esposa ,Analía, y su hija, Jessica, me hicieron sentir un gran respaldo, porque ellos son quienes nos organizan todo a Nicolás Maranzana y a mí, que somos los únicos argentinos en la categoría. La convivencia es permanente y el grupo es muy unido. Nos llevan a todos lados y la verdad es que nos hacen sentir acompañados. Ellos vienen de una gran experiencia con Eric Lichtenstein, que brilló el año pasado en la Fórmula Ford Británica y ahora está en la GP3. Sergio se brinda entero por nosotros, pero a la vez nos exige y quiere que nosotros cumplamos con todo. El 16 de junio yo cumplí los 20 y Nico, el 20 (también de junio), los 18.

-¿Qué diferencia advertís entre los fórmulas que manejaste en la Argentina y en Inglaterra?
-Para ser sincero, la diferencia es total, porque la Fórmula Plus no tiene relación peso-potencia y tiene carga aerodinámica. Es decir que la poca potencia que tiene, más carga aerodinámica, no lo hace sencillo. Pero comparado con estos autos es otro tipo de manejo, porque en la Fórmula Ford se maneja de manera más agresiva y delicada a la vez, porque al tener el turbo y no tener carga en las curvas rápidas es difícil de llevar y se va de costado el auto. Cuando salís con el turbo de las curvas lentas o trabadas, te empuja mucho y hay que ser suave con el acelerador para anticipar al turbo y que no se vaya de cola. Es un auto complicado para manejar, pero yo pienso que te prepara para manejar autos sin carga, porque no tiene difusor y sí alerones que funcionan poco y nada.

-En la escalerita de aprendizaje, ¿viene bien comenzar con estos autos?
-Sí, porque se trata de una categoría formativa, aunque son los de mayor potencia entre los fórmulas de Inglaterra. Los Fórmula Renault son 2.0 de 180 caballos, pero con carga aerodinámica, en cambio los Fórmula Ford son 1.6 turbo de 200 caballos y chasis tubular, con monocascos de fibra de carbono. Y se corre en circuitos de renombre como Brands Hatch, Donington Park, Oulton Park, Rockingham y en el mismísimo Silverstone.

-¿En el inicio de la temporada sufriste una lesión?
-Sí, fue en una prueba en Rockingham con el equipo Jamun Racing. Este país tiene un clima muy raro, amaneció con la pista húmeda y para que no se congele le pusieron algo que la dejó muy jabonosa. Y justo nos habían dado para asentar las pastillas de freno y yo salí con gomas lisas. Después de dos vueltas intenté frenar y se ve que las pastillas no respondieron. Busqué salvar la trompa y las alas, que son bastante caras económicamente. Y si bien logré salvarlas, al pegar el volantazo me quebré un dedo de la mano izquierda. Me mandé una macana grande, pero por suerte la recuperación fue bastante rápida y después sumé cuatro podios, todos en segundo puesto.

De joven, Victor Rosso (foto) probó suerte como piloto en la década del 80 en Inglaterra, Alemania y Japón, y cuando regresó al país se lució en TC2000. Con el tiempo, se convirtió en director del consagrado equipo Honda. Hoy encabeza el Renault Lo Jack Team de Súper TC2000. “Mi abuelo siempre fue un apasionado del automovilismo, en tanto mi hermano Víctor corrió 9 carreras en la Fórmula Plus. Yo había empezado a estudiar ingeniería, pero como me costaba mucho la dejé. Entonces me fui a trabajar con mi abuelo al campo en Marcos Juárez. Cultivábamos soja y ayudaba a arreglar las cosechadoras y manejaba el tractor. De estar en medio del campo salté a competir en Europa, como lo había hecho mi viejo”, reflexionó el cordobés Juan Angel Rosso.

Por Walter Nápoli