Las Crónicas de El Gráfico

1973. Galván se comió la cancha

Pese a haber perdido con Huracán, los hinchas de Independiente ovacionan a un volante formoseño de 21 años. En su última página El Gráfico subrayaba la actitud inclaudicable de Rubén Galván.

Por Redacción EG ·

12 de febrero de 2019
Imagen Galván ganó 11 títulos con Independiente, entre los que se destacan 4 Libertadores y 1 Intercontinental.
Galván ganó 11 títulos con Independiente, entre los que se destacan 4 Libertadores y 1 Intercontinental.


Todos pensaban ver a Brindisi, a Babington, a Avallay. Todos se fueron asombrados por lo que hizo "ese morochito número cinco". Un físico que no dice nada, una enorme mata de pelo negro, unos pulmones que parecen dos enormes globos que no quedan nunca sin aire, un temperamento inclaudicable y una personalidad futbolística que crece a pasos agigantados. El Polaco Cap lo puso en primera contra River, allá per el 71. El pibe modesto que jugaba en los infantiles del Colonia San Antonio allá en sus pagos, pensó que tocaba el cielo con las manos. Había llegado desde un pueblito lejano de Formosa —Comandante Fontana—, cerca de la frontera con Paraguay, en 1968, y arrancó en la séptima roja. Vivía en una pensión. Su hermano lo convenció de que acá estaba el futuro, Rubén Galván no podrá jugar en la Libertadores, pero si sigue mostrando esos adelantos que le vemos partido a partido, lo esperan muchas jornadas de elogios y la seguridad económica que persiguen todos los chicos que se matan en la cancha por conseguirla. Lo más notable es que aparte de todo ese derroche que asombra, Galván tiene toque y manejo, algo que generalmente no concilia con el temperamento y el desborde físico. Y junto con todo ello, apenas 21 años que el domingo asombraron en Avellaneda.