Fútbol Internacional

“Bielsa me hizo un ‘bullying’"

Koikili dijo que el técnico argentino le apartó “de manera ilegal” y agregó: "El trato era muy duro, muy severo".

Por Redacción EG ·

25 de junio de 2017
Imagen
En una entrevista para el diario Mundo Deportivo, de Barcelona, el futbolista Koikili Lertxundi contó que la pasó muy mal en el athletic de Bilbao cuando Marcelo Bielsa fue el entrenador, al que acusó de que le hizo "bullying". 

"Cuando llegó Bielsa estaba ilusionado y de repente el primer día nos comunica a unos cuantos que no cuenta con nosotros y encima nos aparta. Nos da además el consejo de “lo mejor es que os piréis porque si no vais a pasarlo muy mal”. Mi duda entonces fue me voy o no me voy. Ahí sobre todo mi aita, una vez más, me aconsejó que me quedase. Sabía que no iba a jugar nada, como así fue, pero conseguí, a pesar de estar apartado, entrar en 17 o 18 convocatorias. Pude estar en el banquillo en Manchester, en Lisboa, en París", narró el futbolista de 36 años. 

Imagen
Pero no se quedó ahí Koi y acusó: "Estaba apartado de manera ilegal, que yo no lo sabía. O sea un ‘bullying’ en toda regla. Sufrir eso en el Athletic fue muy duro. Lo pasé muy mal, encima tocado de la rodilla. Lo pasé de puta pena. Pensé entonces si me voy, no voy a cumplir mi palabra. Tengo un compromiso con el Athletic, me ha costado 26 años llegar aquí; pero voy a ser fiel a mi palabra y aunque sea el fin de mi carrera deportiva, me quedo tranquilo conmigo mismo".

Imagen
Y agregó: "En una rueda de prensa salió pidiendo perdón; pero dentro lo pagó conmigo porque estuve dos meses integrado en la dinámica del grupo, pero como un cono. Esos dos meses fueron todavía más duros que los dos anteriores porque tener contacto con la persona que te está tratando así es jodido".

El periodista Iñaki Ugalde le consultó: "Lo que usted cuenta no encaja con la imagen que se tiene de Bielsa", a lo que el futbolista respondió: "Él tiene la concepción de que los valores humanos es hacia afuera, hacia la afición, no tanto a los medios porque les tiene miedo; pero internamente la exigencia y el trato era muy duro, muy severo. Podrán pensar ‘claro como tú no jugabas, dices esto’. No lo estoy diciendo por mí, lo estoy diciendo por el que jugaba y también estaba hasta los cojones".