El nuevo Makelele: N’Golo Kanté de la A a la Z

APROBACION. “N’Golo Kanté es, por lejos, el mejor jugador de la Premier League esta temporada”, lo alabó Sir Alex Ferguson mientras llevaba el paso triunfal en el Leicester. Arsène Wenger compartía el mismo punto de vista. Hace unas semanas, confesó que lo quiso llevar al Arsenal, en dos oportunidades: cuando estaba en Francia y también mientras jugaba para los Foxes. Wenger dejó entrever que Kanté decidió fichar por el Chelsea porque mejoró la propuesta económica del Arsenal.

BAJITO. Su 1,69 m no le facilitó las cosas durante su época como juvenil. Cuando empezó a probarse en centros de formación como el del Rennes, Sochaux y Lorient, era rechazado por su baja estatura. Tímido, modesto y tranquilo, sus primeros entrenadores admitieron que le llevaba 3 o 4 semanas adaptarse. Por eso, no tenía éxito en las pruebas de 1 o 2 días. “No elegí mi tamaño.Cuando juego, no creo ser más pequeño que otros. Hago lo mejor que puedo. Me adapto y peleo con lo que tengo”.

CARRERA. Entre los 10 y los 19 años jugó para el club amateur JS Suresnes.  En 2011 le abrieron las puertas en el Boulogne. De allí saltó al Caen, que estaba en la Ligue 2. Disputó los 38 partidos durante su primera temporada y logró el ascenso. Dos años más tarde, firmó con el Leicester. Su rendimiento en la mitad de la cancha fue clave para que el equipo saliera campeón de la Premier. En julio pasado, el Chelsea compró su pase por 32 millones de libras.

DESCUBRIMIENTO. Steve Walsh, el scout que promovió a Mahrez y Vardy, fue quien le permitió iniciar su carrera en Inglaterra. Para ese entonces, Kanté estaba en el Caen y tenía un porcentaje defensivo más que destacable: 4,8 tackles por partido y 2,9 intercepciones.. Neutralizaba más rivales que cualquier otro jugador en toda Francia. Estuvo cerca de pasar al Olympique de Marsella, pero, finalmente, se sumó al Leicester, que lo pagó apenas 5.6 millones de libras.

ESTADISTICAS. Para los amantes de las hojas de cálculo, cada partido de Kanté deja un montón de datos. En el partido ante Liverpool, trabó 16 veces y ganó 14. Desde hacía dos años que nadie iba al piso esa cantidad de veces en un partido. En la web de la Premier, Kanté se anota en todas: tercero como tackleador con 86, quinto en número de pases (1472) y séptimo en toques (1847). Fue el mayor tackleador (175) y el mejor recuperador de pelotas (157) del Leicester campeón.

FRANCIA. Sus padres son de Mali y se mudaron a Francia, donde él nació. Se crió junto a sus 8 hermanos (4 hombres y 4 mujeres) en el barrio Les Gerániums, de Rueil Malmaison, un suburbio parisino. Didier Deschamps lo convocó a la selección de Francia tres meses antes de la Euro. Debutó como titular el día de su cumpleaños, ante Rusia y marcó un gol. “Es un mediocampista moderno, gana pelotas, es bueno en la transición y siempre tiene soluciones”, lo describió el DT.

GIGANTE. Su rol en el esquema de Claudio Ranieri fue elemental para que el Leicester saliera campeón. Fue un pulpo en el mediocampo, bloqueando y recuperando pelotas, una clave para los eléctricos contraataques de Mahrez y Vardy. “La gente cree que jugamos con dos en el medio y yo digo que no. Drinkwater juega en el medio y Kanté en todos lados”, afirmó Steve Walsh. Y Ranieri opinó que el Chelsea se llevó a Kanté porque había jugado “por dos jugadores en cada partido”.

HECATOMBE. El Leicester no volvió a ser el mismo tras su salida. Ranieri reconoció en julio pasado que habían perdido un jugador primordial. “La temporada anterior habíamos perdido a Esteban Cambiasso y todos lloraban. Ahora lloramos porque perdimos a Kanté, pero no hay que preocuparse, el fútbol del Leicester seguirá”, auguró el DT. Pero los hinchas del Leicester parecen seguir llorando la salida de Kanté, al que consideran “el jugador que debía quedarse en el equipo”.

INTERNACIONAL. “Es imposible dejar pasar a un jugador de tal calidad. Ya hablamos con sus representantes”, declaró Alan Giresse, el DT de la selección de Mali, que pretendía convencer a Kanté de representar al país africano. Ya había hecho el intento en 2015 su predecesor, Henryk Ksaperczak, cuando N’Golo fue invitado a jugar la Copa de Africa.  También lo habían tentado durante su primera temporada en el Caen, pero dijo que no se sentía listo. Finalmente, eligió a Francia.

JUEGO. Dos años atrás, Conte no sabía ni quién era Kanté. No seguía al Caen y no tenía registro del francés. Hoy, es una figura influyente en su 3-4-3, en el que Kanté tiene una participación un poco menos dinámica que la que tenía en el Leicester. “Soy honesto, antes no lo conocía. Pero ahora sí. Es un mediocampista completo, no solo uno defensivo. Puede jugar de área a área, tiene una buena técnica, una resistencia increíble y una gran personalidad. Me encanta cuando va a presionar” , opinó el DT.

KOSCIELNY. En una nota con FourFourTwo, su compañero de la selección, Laurent Koscielny, lo elogió. “Kanté demostró ser uno de los mejores mediocampistas de la liga. Es muy quieto y calmado, está en su pequeño mundo, pero en la cancha les pone presión a los rivales”, afirmó el jugador del Arsenal, que lo padeció en carne propia en el 3-1 del Chelsea: Kanté corrió a recuperar una pelota e hizo un rápido cambio de frente que dejó al 6 del Arsenal casi sin reacción. Una fiera.

LEICESTER. Recién llegado al Leicester, un empleado del club lo vio dando vueltas por el campo de entrenamiento e inocentemente, al ver su cara de nene, le preguntó si estaba esperando que su papá o su mamá lo pasara a buscar. Steve Walsh tuvo que convencer a Ranieri de darle una oportunidad, ya que el italiano creía que Kanté no iba a poder cumplir con las exigencias físicas de la Premier. En su primera temporada, el pequeño N’Golo le probó todo lo contrario.

MINI. La prensa inglesa se volvió loca el año pasado cuando descubrió el auto que usaba Kanté para trasladarse a los entrenamientos. Lo consideraron “el jugador más centrado del mundo” por manejar un Mini Cooper Hatch blanco. Claro, sus compañeros del Leicester conducían Bentleys y otros autos deportivos. “No soy una persona que ame los autos. Mi Mini fue bueno para aprender a manejar con la izquierda. Todavía lo tengo”, contó el francés.

NUMEROS. En la temporada 2011/12 se sumó al Boulogne, pero apenas jugaba en la Reserva. Cuando debutó, su equipo ya estaba descendido. Estuvo dos años en el club, en los que se destacó: France Football lo eligió el mejor jugador de la categoría. Aunque era el futbolista más importante del club, tenía un contrato amateur. Por si lo del fútbol no prosperaba, se puso a estudiar y obtuvo un diploma en contabilidad. Lo buscaron el Lille y Valenciennes, pero el Caen se les anticipó.

OSTENTACION. En su primer año con el Caen, logró el ascenso a la Ligue 1. En su segundo año era indispensable para el equipo. Ganaba poco dinero, pero jamás se quejaba. A Kanté no le sobraba la plata, vivía en una residencia para jóvenes y comía poco. Por eso iba a entrenarse ¡en monopatín! Cuando su mamá se enteró de que su hijo  iba a pie o en monopatín a las prácticas, le pidió que se comprara un auto. N'Golo le hizo caso y consiguió un Megane usado.

PREMIOS. Sus ex compañeros Riyad Mahrez y Jamie Vardy se llevaron los laureles por el milagro del Leicester. El argelino recibió el premio PFA al Mejor Jugador del Año, mientras que el inglés fue distinguido como el Mejor Jugador de la 2015/16 y también por la FWA (Asociación de Escritores de Fútbol). Kanté no se quedó con las manos vacías: fue reconocido como el mejor del año en el premio de los jugadores, votado por sus colegas.

QUERER. A los 10 años, cuando recién empezó a jugar, Kanté (abajo a la izquierda) tenía en mente ser como Maradona o Ronaldo. No se veía como volante. Tampoco era bueno llevando la pelota y la zurda la tenía de palo. Antes de las vacaciones, el técnico le dio como tarea mejorar sus jueguitos. Tenía que hacer 50 con cada pierna y con la cabeza. A los dos meses, ya hacía 100 con la izquierda, con la derecha y con la cabeza.

RATA. Eden Hazard destacó el impacto que causó la llegada de Kanté al Chelsea.“Nos da confianza. Queremos gambetear y pasar al rival. Y si no lo logramos, o perdemos la pelota, sabemos que él está atrás para recuperar. Es un jugador fantástico. Es como una rata, va a todos lados y tiene una gran mentalidad”, aunque la comparación con un roedor lo dejó un poco perplejo, Kanté respondió con una sonrisa a los comentarios y dijo que intentaba “dejar a todos contentos”.

SUCESOR. La comparación de Kanté con Claude Makelele fue instantánea. “Me gusta N’Golo, pero si será mejor que yo, no lo sé. Necesita tiempo para aprender la posición y saber más del juego”, opinó el ex jugador del Chelsea (2003-2008). Pero aunque las semejanzas son notorias, el que no está del todo convencido de las comparaciones es el propio Kanté: “A Makelele no lo vi jugar mucho. El volante que a mí me gustaba era Lassana Diarra”, admitió.

TACKLEADOR. En la época escolar empezó a nadar y a practicar atletismo, básquet, fútbol y rugby,  deporte en la que podría haber prosperado. “Había hecho un tackle en un torneo y mi profesor me avisó que un scout del club donde estábamos jugando le había dicho que tenía buen espíritu y condiciones para ser rugbier”, cuenta. Ese mismo profesor les sugirió a los papás de N’Golo que hiciera más deporte. A los 10 años, Kanté eligió el fútbol y se sumó al JS Suresnes.

UNITED. “Fue increíble que Mourinho me llamara. Escuché sus argumentos sobre por qué debería pasar al Manchester United, pero en ese momento dudaba entre seguir en el Leicester o irme al Chelsea. Mis negociaciones con ellos ya habían comenzado bien y, cuando hablamos, tuve un buen presentimiento con Conte”, explicó Kanté en septiembre pasado. José Mourinho, al igual que Wenger, no lograron seducirlo. Tampoco el Paris Saint-Germain: presentó una oferta, pero no alcanzó.

VELOCIDAD. Su capacidad para correr sin demostrar cansancio alguno y su gran velocidad son sus grandes cualidades. Claudio Ranieri quedó sorprendido en su primer entrenamiento. Bromeó diciendo que parecía que “Kanté llevaba pilas escondidas en sus pantalones”. Tal era el sacrificio de Kanté, que el DT le pedía que dejara de correr para no desgastarse. Un día le dijo: “Sos tan rápido que vas a hacer un cruce y lo vas a terminar cabeceando”.

WOJTYNA. Kanté se presentó a una prueba en el JS Suresnes junto a otros 100 chicos, pero se destacó y no por lo técnico. “No paraba de correr”, recordó Piotr Wojtyna (foto), su primer DT. Cuando N’Golo tenía 16, se lo recomendó al DT de Primera. “Al principio, lo ponía en el banco para que no quedara demolido físicamente. Después de unos partidos, era titular. Aprendía cosas nuevas en 2 semanas, otros jugadores no lo logran en toda su vida”, contó Tomasz Bzymek.

XHAKA. Arsenal se quedó sin Kanté, pero compró a Xhaka Granit por 30 millones de libras. El francés –que tiene un rol más defensivo que el volante suizo– es una garantía para recuperar cada pelota y usarla de forma tan rápida como efectiva. Mientras que Granit, con mayor llegada y más poder de creación, es bastante inestable. No se asentó y es bastante torpe para el quite, lo que lo lleva a cometer faltas innecesarias (es el más expulsado en Europa). Con Kanté no pasaba...

¿YO? Nemanja Matic confesó haber puesto en duda su continuidad en el Chelsea cuando llegó Kanté. Tras haber sido clave en el título de liga 2014/15, el serbio tuvo rendimientos muy irregulares a lo largo de la temporada siguiente. La contratación de Kanté parecía una amenaza. “Hablé con Conte y decidimos que lo mejor para el club y para mí era quedarme”, contó Matic, quien logró recuperar el nivel y la confianza y hoy hace tándem con Kanté, a quien considera mejor que Makelele.

ZOUMA. Su compañero Kurt Zouma admitió que en el Chelsea se aprovechan de la bondad de Kanté. “Ganó 14 de 16 barridas ante el Liverpool. El siguiente mejor del partido, tres. Al día siguiente, en la sesión de video, solo aparecía él. Y los chicos le dijeron, ‘Lo estamos haciendo a propósito. Perdemos la pelota para que hagas el quite y la recuperes otra vez. Nos impresiona su rendimiento. Fue increíble en cada partido de esta temporada”, contó el belga.

Por Alejandra Altamirano Halle

Nota publicada en la edición de marzo de 2017 de El Gráfico