De la A a la Z

De la A a la Z, Kevin de Bruyne, atrápame si puedes

A los 25, el belga es uno de los volantes más talentosos del mundo y, siempre a toda velocidad, la rompe casi todos los fines de semana en el Manchester City. Pep Guardiola lo consideró uno de los mejores jugadores con los que le tocó trabajar y hasta se animó a compararlo con Messi. Una revancha para alguien que fue descartado por Mourinho en el Chelsea y debió pasar el invierno en Alemania, antes de regresar recargado a la Premier.

Por Alejandra Altamirano Halle ·

31 de enero de 2017
Imagen
ASISTENCIAS. Considerado uno de los mejores volantes del mundo, es el rey de los pases gol de la Premier. En una de sus primeras entrevistas en el City, le pregutaron si prefería marcar o asistir y no titubeó: “Assist”, dijo casi tan rápido como mete un pase justo entre líneas o elude a un rival con gambetas. Su adelantada visión del juego lo hace iniciar las jugadas casi sin marca y con muchos espacios, y resulta igual de peligroso tanto para el ataque como para la contra.

BURUNDI. Nació en Drongen, en la región flamenca de Bélgica. Apenas se destapó como talento, se corrió el rumor de que su madre Anne, era de Ealing (a las afueras de Londres), y eso le daría chances de jugar en la selección de Inglaterra. La realidad es que su mamá nació en Burundi, mientras el abuelo de Kevin trabajaba para una empresa de petróleo. Anne también vivió en Costa de Marfil, antes de mudarse a Ealing, donde todavía viven los tíos del jugador.

CARRERA. A los 6, empezó a jugar en el KVV Drongen. Dos años después, pasó al KAA Gent. Debutó en el Genk, salió campeón y el Chelsea  lo fichó en el último día del mercado de pases del invierno de 2012. Cuando llegó en el verano, lo cedieron al Werder Bremen. De regreso, Jose Mourinho no lo mandaba ni al banco. Se fue al Wolfsburgo dos temporadas y pegó el salto de calidad que lo catapultó al Manchester City que pagó 55 millones de libras por él.

DEBUT. En 2008, cuando jugaba en las inferiores del Genk, fue promovido al primer equipo. Debutó en la derrota 3-0 ante el Charleroi, el 9 de mayo de 2009. Y recién fue clave en la temporada siguiente, en la que el equipo peleaba por no descender. Marcó su primer gol en el triunfo 1-0 ante el Standard Liège. En total terminó con 5 goles y 16 asistencias en 32 partidos de liga de la temporada 2010/11, en la que el Genk se consagró campeón de Bélgica por tercera vez en su historia.

ESTADISTICAS. Mourinho nunca le dio rodaje en el Chelsea. Fue titular en 5 partidos y entró 4 veces como suplente. De Bruyne contó a The Independent su momento de confrontación con el DT. “Nos mostró las estadísticas de seis jugadores: asistencias, goles, porcentaje de pases, gambetas. Quería probar que no había rendido al nivel de los otros. Le contesté: ‘Perdón, pero no es lógico. Jugué muchos menos partidos que los demás. ¿Cómo me puede comparar con ellos’. No era justo”.

FORZADO. Como Schürrle, Mata, Lukaku, Bertrand y otros jugadores que no fueron tenidos en cuenta por Mourinho, buscó una salida forzosa. El club quería un préstamo, pero él buscaba irse definitivamente. Pasó al Wolfsburgo, al que fue vendido por 18 millones de libras. Su llegada fue determinante. Hizo 10 goles y un récord de 20 asistencias en la Bundesliga 2014/15. Por su rendimiento, fue elegido el jugador del año en Alemania en la encuesta de la revista Kicker.

GUARDIOLA. “De Bruyne es uno de los mejores futbolistas que he entrenado. Messi es una  cosa aparte. Pero después de Messi, está De Bruyne”, lo comparó Guardiola. Los elogios son mutuos. “Me llevó tiempo entender lo que quería Pep técnicamente. Es grandioso ver cómo haciendo lo que pide se abren los espacios y se puede dominar el partido. En Inglaterra no se puede hacer los 90 minutos, pero lo intentamos”, contó De Bruyne a Sky sobre nuevo rol en el equipo de Pep.

HECKING. Dieter Hecking fue el DT que le devolvió la confianza. Así, De Bruyne fue la pieza fundamental del Wolfsburgo que logró dos títulos. Primero, la DFB Pokal del 2015, en la que marcó un gol en el triunfo 3-1 ante el Borussia Dortmund. Después, la Supercopa ante el Bayern Munich. El DT tenía la intención de mantenerlo en el equipo, pero la oferta tentadora del City lo separó de su jugador estrella y terminó extrañándolo. En octubre, el DT fue destituido.

IDENTICOS. Kevin y su novia Michèle Lacroix fueron padres en marzo de este año de su primer hijo: Mason Milian. Desde las redes sociales, De Bruyne muestra detalles del crecimiento del bebé, que es igualito a él cuando era chico. Desde su bautismo hasta su primera lección de natación, su hijo atrapa miles de “me gusta” en las cuentas de Instagram de sus padres, que se casarán pronto. El 8 de diciembre Kevin anunció que le pidió casamiento en París y ella dijo sí.

JUVENTUD. A los 14 años dejó Drongen, la ciudad donde nació, para irse a vivir solo a Genk. Allí tenía una especie de familia sustituta que se ocupaba de cuidarlo durante la semana, pero igual se sentía solo. “A los 14 aprendí a manejarme por mi cuenta. Y a darme cuenta de que en la vida las cosas no llegan gratis”, cuenta. Con esa determinación, cumplió su sueño de ser futbolista, el mismo que le había quedado trunco a su papá, un ex jugador a nivel regional que hoy le lleva sus finanzas.

KDB. Sus siglas le dan nombre a una competición juvenil Sub 15 que tendrá una segunda edición a fines de mayo de 2017, la KDB Cup. El Benfica fue el ganador de la primera, al vencer 5 a 1 al Austria Wien. El tercer puesto se lo quedó el Brugge. El equipo portugués defenderá el título ante el Arsenal, Chelsea, Barcelona, Paris Saint-Germain, Olympique de Marsella y AZ Alkmaar. Además, participarán cuatro equipos belgas: Gent, Genk, Brugge y el Anderlecht.

LAMENTOS. En cada posteo que hace en las redes sociales, los hinchas del Chelsea le piden que vuelva al club y se afligen por su alejamiento. El último en hacer público su lamento fue el actual DT de los Blues, Antonio Conte. “Creo que es realmente un gran jugador, es una pena que ahora esté jugando para otro equipo. Es un futbolista fantástico. Le deseo lo mejor... pero después de nuestro partido”, declaró antes del triunfo del Chelsea 3-1 ante el City.

MUJER. Kevin De Bruyne estuvo peleado durante un tiempo con el arquero Thibaut Courtois. El volante contó en su libro Keep It Simple que su compañero de la selección belga había tenido un romance con su ex novia Caroline Lijnen. “El me había sido infiel con una de mis mejores amigas. Viajé a Madrid y en una noche Courtois me dio lo que Kevin no me dio en tres años”, reveló la mujer y aclaró que el arquero le había cocinado, algo que el volante jamás había hecho.

NADADOR. Frederik Deburghgraeve, campeón olímpico de natación en los 100 metros pecho en los Juegos de Atlanta 1996, no recibió muy bien la transferencia de De Bruyne al City. “Por una media jornada, Kevin De Bruyne ganará la misma prima que recibí por mi título olímpico. En dos días, ganará lo que yo he ganado en toda mi carrera”, publicó el nadador belga de 42 años, que explicó que su medalla le reportó 12.500 euros netos y le pareció graciosa la comparación.

OCTAVO. La revista FourFourTwo lo eligió como el octavo mejor jugador del mundo en la selección de los 100 mejores futbolistas del 2016. ¿Los motivos? Su capacidad para influir en el ataque, la cantidad de asistencias que aportó al Manchester City, la diferencia que marcó en el equipo su ausencia por una lesión que lo tuvo dos meses afuera de competición, y cómo su confianza fue clave para separar al City “de la mediocridad a la grandeza”.

PELLEGRINI. “Thank you Manuel”, tuiteó para despedir al ex técnico del Manchester City, Manuel Pellegrini, cuando dirigió su último partido a mediados de mayo, en el empate 1-1 ante Swansea. “Aunque De Bruyne puede ser no muy expresivo, te impresiona con su análisis del juego. Juega bien, marca goles, es versátil, puede jugar en tres o cuatro posiciones y es muy bueno técnicamente”, lo elogió el DT chileno.

QUINCE. Su primera aparición en un diario belga fue por ser un alumno puntual. Su escuela y un club de fútbol local daban entradas valuadas en 15 euros a los estudiantes que llegaran a clases a tiempo durante 6 semanas. “Nunca llego tarde. Cuando los choferes hicieron paro el miércoles, vine en bicicleta. Es molesto cuando los chicos entran tarde porque te desconcentran”, decía al diario Kevin, de sexto grado.

RAREZA. “Cuando De Bruyne avanza entre los jugadores, nadie lo puede parar porque los deja muertos. Ese es el sello de un gran jugador y él es eso. Es un ganador de partidos y lo hace él solo, es como un atleta. Es muy raro encontrar a alguien así”, lo elogió el ex jugador Mike Summerbee, que compartió equipo con Colin Bell, considerado el mejor jugador de la historia del Manchester City y muchas veces comparado con De Bruyne: “Tiene la misma tremenda energía”, resume Summerbee.

SELECCION. Tras pasar por la Sub 18, Sub 19 y Sub 21, De Bruyne llegó a la selección mayor, que desde entonces no para de crecer. Le tocó ir al banco ante Bulgaria, en un partido con apenas diez mil personas en la cancha, de las cuales ocho mil habían conseguido las entradas gratis. Ahora ve cómo los Red Devils llenan estadios, y los tickets se agotan a minutos de entrar a la venta. Desde su debut en 2010, suma 50 presencias y 13 goles. Jugó en Brasil 2014.

TATUAJES. A diferencia de su compañero de selección Radja Nainggolan, a quien le quedan pocos lugares sin tinta en su cuerpo, De Bruyne les dice que no a los tatuajes. Al difundirse su imagen en una prueba médica en la que estaba sin ropa, muchos usuarios de redes sociales le recomendaban darle un poco de color a su palidez, con sol o con tatuajes. Pero sus fanáticos destacan la decisión de no ser otro futbolista con más tatuajes de los que pueda contar.

UNICOS. Antes del Mundial 2014, participó junto a sus compañeros de Bélgica en una producción fotográfica en la que aparecen con sus cuerpos semidesnudos, para una muestra artística llamada Les Diables. En la foto, Christian Benteke (que no viajó a Brasil por una lesión), sostiene a De Bruyne sobre su espalda en una pose bastante extraña. La muy poco convencional sesión también tuvo a Eden Hazard señalando al cielo y Courtois estirado en el piso. Mucho arte y poco fútbol.

VALORES. Participó de una campaña para promocionar los Juegos de Verano de Special Olympics que se realizaron en Bélgica en 2014. Su imagen fue alterada con rasgos faciales asociados a las personas con síndrome de Down, con la pregunta “¿Merece De Bruyne tener menos seguidores ahora?”. De Bruyne les preguntó a sus seguidores si continuarían siendo sus fans si luciera así. La foto se viralizó. Además, colaboró con el lanzamiento de una línea de ropa para recaudar fondos.

WERDER BREMEN. Apenas llegó al Chelsea, que dirigía André Villas Boas, fue enviado a préstamo al Werder Bremen, donde jugó todos los partidos pero no siempre en la misma posición: pasó por seis puestos, incluso como centrodelantero. Fue elegido el mejor jugador joven de la Bundesliga. Lo querían el Borussia Dortmund y el Bayer Leverkusen. Lo tentó la primera opción, porque le gustaba el estilo del Dormund, pero volvió al Chelsea y no funcionó.

X-FACTOR. Luego de que marcara el gol del triunfo ante el Paris Saint-Germain, que le dio la clasificación a semifinales de la Champions League, el Mirror lo comparó con Messi y CR7. “Le da al City su factor X en el modo que Lionel Messi lo hace para el Barcelona y Cristiano Ronaldo para el Real Madrid”, lo elogiaron. Después, el Manchester City fue eliminado por el Real Madrid (0-0 en la ida y 1-0 en la vuelta). Así y todo, redondeó su mejor campaña en la historia de la Champions.

YAYA. “Genial tenerte de regreso, Yaya”, tuiteó De Bruyne el 19 de noviembre. Es que Touré había dejado de jugar en el City después del escándalo que generó su poco diplomático representante, Dimitri Seluk. El ruso acusó a Pep Guardiola de humillar al africano, por dejarlo afuera de la Champions League. El DT lo terminó colgando por meses, hasta que Seluk se disculpó en los medios, ya que Pep no le atendía el teléfono. Y en su regreso, marcó dos goles.

ZIDANE. En su primera entrevista para la televisión belga, que dio cuando ganó un campeonato infantil con el Genk, contó que era fanático de Michael Owen. Su tío, que todavía vive en Ealing, es hincha del Liverpool y fue quien lo hizo simpatizar por el delantero. Kevin pasó muchas vacaciones con sus tíos, que viven a 10 kilómetros de Stamford Bridge. Sin contar la admiración por Owen, su gran ídolo era otro rey de las asistencias: Zinedine Zidane.

Por Alejandra Altamirano Halle

Nota publicada en la edición de enero de 2017 de El Gráfico