Primera División
Los equipos del Sur, con 12 puntos sobre 12
En las últimas cuatro fechas, Banfield y Lanús ganaron todo. De las dudas del comienzo pasaron a quedar a 4 y a 3 de la punta, respectivamente. Las claves y el por qué de su éxito.
Por Redacción EG ·
12 de diciembre de 2016
El 30 de octubre Lanús empató de local contra Tigre y tocó fondo. Promediaba un triunfo en los últimos ocho partidos y esa mala racha lo había dejado afuera de la Copa Sudamericana y de la Copa Argentina. El campeón parecía haber perdido la fórmula del éxito.
Seis días después, lo dio vuelta en Junín y comenzó su buena racha que continúa hasta el día de hoy. Son cinco triunfos al hilo con el mencionado Sarmiento más Atlético Tucumán, Temperley, Gimnasia y Rosario Central como víctimas. No cambió demasiado, solo volvió a las fuentes. Consolidó su defensa con Gómez, Herrera, Velázquez y Pasquini, recuperó a Marcone, Sand y Acosta volvieron a ser imparables y suplantó al paraguayo Miguel Almirón por su compatriota Brian Montenegro.
Mucho tiene que ver en la idea el entrenador campeón Jorge Almirón, quien nunca pateó el tablero y supo reacomodar las piezas. Ahora Lanús sabe ceder el protagonismo sin ponerse colorado, confía en su poderío de ataque y hasta le hace lugar a las nuevas camadas.
En la vereda de enfrente, las llaves del triunfo las tiene Julio Falcioni, también último entrenador campeón. Con una fecha de delay, el Taladro se sumó a los triunfos en el Sur y no paró más. Su número es el cuatro: esos son sus triunfos consecutivos y los puntos que lo separan del puntero Boca.
Falcioni es otro de los que no claudica en la idea. Se apoya en su núcleo duro con los jugadores que ya son parte de su paladar y obtiene resultados: Bertolo, Erviti y Silva son las figuras del equipo. Su espalda y carácter le permitieron bajar al puntero en ese entonces, Estudiantes, y a Newell´s en Rosario. Su buen presente lo completó con Arsenal y Huracán, equipos que llegan de capa caída.
Los jóvenes Bettini, Soto, Cecchini y Remedi se empiezan a consolidar a fuerza de entender qué es lo que pide su pragmático entrenador. Con dos estilo opuestos, en el Sur todos están de fiesta, al menos hasta el 25 de febrero cuando se vean las caras y definan quién es el más poderoso del barrio.
Dos paradas difíciles tendrán ambos para terminar la primera ronda. Lanús recibe al escolta San Lorenzo y si le gana, lo superará en la tabla de posiciones. Banfield, en cambio, visita a Independiente que también llega de racha.
Mucho tiene que ver en la idea el entrenador campeón Jorge Almirón, quien nunca pateó el tablero y supo reacomodar las piezas. Ahora Lanús sabe ceder el protagonismo sin ponerse colorado, confía en su poderío de ataque y hasta le hace lugar a las nuevas camadas.
Verde esperanza
En la vereda de enfrente, las llaves del triunfo las tiene Julio Falcioni, también último entrenador campeón. Con una fecha de delay, el Taladro se sumó a los triunfos en el Sur y no paró más. Su número es el cuatro: esos son sus triunfos consecutivos y los puntos que lo separan del puntero Boca.
Los jóvenes Bettini, Soto, Cecchini y Remedi se empiezan a consolidar a fuerza de entender qué es lo que pide su pragmático entrenador. Con dos estilo opuestos, en el Sur todos están de fiesta, al menos hasta el 25 de febrero cuando se vean las caras y definan quién es el más poderoso del barrio.
Para cerrar el año
Dos paradas difíciles tendrán ambos para terminar la primera ronda. Lanús recibe al escolta San Lorenzo y si le gana, lo superará en la tabla de posiciones. Banfield, en cambio, visita a Independiente que también llega de racha.
