TMA: Todo menos Argentina

Clint Dempsey, la principal amenaza de la Selección

La figura de Estados Unidos, que este martes intentará llegar a la final de la Copa América cuando enfrente a la Argentina, es el segundo máximo goleador de la historia de su selección.

Por Redacción EG ·

20 de junio de 2016
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El fútbol (o el “soccer”) está viviendo una resurrección en Estados Unidos. 22 años después del Mundial que marcó récord de asistencia y recaudación y en la temporada en la que se cumplen dos décadas del estreno de la MLS, el enésimo intento de liga que finalmente prosperó en el país del béisbol y el football americano, la selección local, dirigida por el alemán Jurgen Klinsmann, está instalada en semifinales esperando rival para seguir haciendo historia. En el gran nivel que muestra el equipo mucho, o casi todo, tiene que ver con Clint Dempsey, el mediapunta todoterreno que tiene apellido y mirada de pugilista y que aporta toda la sapiencia obtenida en el fútbol inglés.

Formado en la academia Dallas Texans y con un peregrinaje universitario en Furman Paladins, hizo su debut en la MLS en New England Revolutions. Allí permaneció dos campañas entre 2004 y 2006 y ese mismo año partió a la Premier League para jugar en Fulham. En las islas se diplomó de futbolista y absorbió la influencia de esos mediocampistas todoterreno, capaces de recorrer la cancha en tiempo record, de pisar el área y bajar a defender. De los Gerard, los Lampard y los Kevin Nolan. Luego estuvo una temporada en Tottenham y decidió regresar a la liga estadounidense como Jugador Franquicia de Seattle Sounders FC. En 2014, durante el receso de la MLS, tuvo un breve regreso al Fulham.

En la selección debutó en 2004. Casi siempre con 8 como dorsal, disputó los mundiales 2006, 2010 y 2014, a donde fue capitán. Tras el retiro de Landon Donovan quedó como figura y referencia indiscutida del “soccer” en Estados Unidos. Ahora, con sus buenas actuaciones en la Copa América del Centenario (fue vital en la primera ronda y le dio la clasificación contra Ecuador) los estadounidenses están volviendo a encantarse con el fútbol. La asistencia mejoró significativamente y, de a poco, empiezan a entender que es un deporte que les corresponde también a ellos, y no sólo a los latinos. El resto, dependerá de la suerte de la selección en la copa.