Primera División

El fenómeno Lanús

Razones de un finalista que convence por juego y resultados.

Por Redacción EG ·

09 de mayo de 2016
 
Imagen
Los números hablan por sí solos. Faltando dos fechas para que termine el Torneo Transición, Lanús ya está clasificado a la final y a la Copa Libertadores 2017. En 14 fechas, 12 victorias, un empate y una derrota. 9 puntos de diferencia con el segundo puesto (Estudiantes). Invicto como local. Equipo más goleador (con 26 goles, junto a Racing y Godoy Cruz). Valla menos vencida (recibió solo 6 goles). Tiene al goleador del torneo (José Sand, con 13 goles). Las frías estadísticas ya son suficientes para notar que estamos ante un equipo especial.

  Pero lo que enamora de este Lanús son las formas. Despliega un fútbol vistoso, donde la premisa principal es el pase al compañero. Todos corren, todos presionan y, cuando la recuperan, todos juegan. Ataca con mucha gente y es contundente. La base de este proceso empezó con Guillermo Barros Schelotto. Con el mellizo llegaron muchos de los integrantes del plantel. Jorge Almirón, el actual entrenador, mantuvo el sistema (4-3-3), incorporó lo que necesitaba y pulió aspectos importantes en el funcionamiento, como la tenencia y la paciencia cuando se tiene la pelota.

 
Imagen
 Si bien casi todas las luces se las llevan Pepe Sand y Lautaro Acosta (dos de los sobrevivientes del Lanús campeón 2007, junto con Maxi Velázquez y Agustín Pelletieri), el equipo se hace fuerte desde su rombo defensivo: arquero, centrales y volante central. Fernando Monetti pasó un breve período de adaptación y ya está demostrando el gran nivel que tuvo en Gimnasia. Gustavo Gómez y Diego Braghieri aportan firmeza en la marca, salida prolija y buen juego aéreo. Iván Marcone es el dueño de la mitad de la cancha y un gran exponente de los número 5 con quite y buen juego.

  Los refuerzos que llegaron para este torneo encajaron de manera perfecta en el esquema de Almirón. Además de los mencionados Sand y Marcone, arribó José Luis Gómez. El mejor lateral derecho del torneo es una de las piezas de ataque más peligrosas del equipo. Su velocidad y convicción a la hora de proyectarse llamaron la atención del DT de la Selección. Gerardo Martino lo incluyó en la lista preliminar para los Juegos Olímpicos y tiene muchas chances de quedar en la nómina definitiva.

  Otra de las claves del granate son sus volantes internos. Todos con buen manejo y llegada al gol. Román Martínez y Miguel Almirón son los titulares, pero tienen suplentes de lujo que rinden cada vez que les toca entrar, como Víctor Ayala y Nicolás Aguirre. En el ataque, tanto Acosta como Sand necesitaron volver al sur para reencontrarse con su mejor nivel.

 
Imagen
 Pese a todo esto, ni los hinchas, ni los propios jugadores, están conformes. La alegría no será completa si no se corona con el título. Y el hecho de ya estar clasificado a la final con tanta anticipación, puede producir una relajación peligrosa. El trabajo de Almirón será fundamental para mantener al grupo enfocado en el objetivo, ya que enfrentará a un rival (San Lorenzo o Godoy Cruz) que llegará con el envión de la pelea por llegar al partido definitorio. Pero este no es el único problema: de confirmarse el 29 de mayo como fecha para la final, Lanús no podrá contar con Gómez, Almirón y Ayala, que estarán afectados a la selección paraguaya. Sin embargo, no deben sonar las alarmas en la Fortaleza. Este equipo sabe maquillar muy bien las ausencias. Si logra mantener el nivel mostrado en el torneo, es el gran candidato a proclamarse campeón del fútbol argentino.