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River no fue contundente en el primer tiempo y empató con San Pablo

El conjunto de Gallardo igualó 1 a 1 contra el de Bauza, por el Grupo 1 de la Copa Libertadores. D'Alessandro jugó más de 30 minutos y demostró que será clave para el funcionamiento del equipo.

Por Redacción EG ·

10 de marzo de 2016
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River empató 1 a 1 con San Pablo en el Monumental, en su segundo partido por la Copa Libertadores. Empezó perdiendo con un golazo de la figura del partido, Ganso, y lo empató con un gol en contra de Thiago Mendes.

“Nos está faltando definición. Nos cuesta para sostenernos, la realidad es que no tenemos contundencia”, manifestó Marcelo Gallardo en la conferencia de prensa. Y fue así. River, que tuvo tres situaciones claras en los primeros ocho minutos, no supo definir el encuentro.

Dos claras de Alario y una cabezazo de Mercado, que pegó en el travesaño, fueron las ocasiones. San Pablo, en cambio fue al Monumental a apostar al contraataque, aunque sin embargo mostró una de sus mejores cualidades: la pelota parada. El equipo de Bauza tiene un gran ejecutante como lo es Carlinhos y grandes cabeceadores como el uruguayo Lugano y Maicon.

Así llegó la apertura del marcador: Carlinhos lanzó el tiro libre al área, despejó Mammana y el ex Santos, Ganso, antes de que la pelota tocara el césped, le rompió el arco a Barovero con un zurdazo. “Sabíamos que River sin Maidana no iba a tener esa solidez que tiene siempre”, reveló después el Patón en la sala de prensa.

Imagen CALLERI lucha con Ponzio. El ex Boca fue el más silbado en el Monumental. FOTO: Olé.
CALLERI lucha con Ponzio. El ex Boca fue el más silbado en el Monumental. FOTO: Olé.


San Pablo cumplió a rajatabla la idea táctica que su entrenador dispuso para este partido. Pero claro, un error puede costar todo lo planeado. A los 32 minutos, Driussi tiró un tiro de esquina desde la izquierda y el arquero Denis –reemplazante del histórico Rogerio Ceni- protagonizó un blooper de aquellos: en vez de agarrar la pelota en el aire, metió los puños y la pelota rebotó en Mendes para que entrara suavecita al arco.

En el segundo tiempo, River con el ingreso de D’Alessandro buscó manejar la pelota y crear un poco más de juego. Lo hizo, pero no fue suficiente. Y el Cabezón, que estuvo quejoso con sus  compañeros porque no se la daban, demostró que será vital para este equipo. ¿Por qué? Porque tiene una visión diferente y sigue manteniendo el sello de su exquisita zurda.

River con este empate se ubica en la segunda posición del Grupo 1 con cuatro puntos, por debajo de The Strongest, que cosechó seis puntos. El equipo de Gallardo deberá mejorar en la definición. Pero también puede quedarse tranquilo porque D’Alessandro sigue vigente, y eso, es un golazo.