Onside

Hoy te convertís en héroe #4: Horacio Carbonari contra el Mineiro

El 19 de diciembre de 1995, el Petaco entraba en la historia grande de Rosario Central.

Por Redacción EG ·

16 de junio de 2015
Imagen
El cachetazo de la semana anterior había sido durísimo. En el estadio Mineirao de Belo Horizonte, por la primera final de la Copa Conmebol, Atlético Mineiro había despachado a Rosario Central con un 4-0 que tenía un fuerte aroma a sentencia. El equipo de ese viejo sabio que fue Angel Tulio Zof tenía 90 minutos para revertir su suerte en un Gigante de Arroyito que reventaba de hinchas dispuestos a poner su granito de arena para consumar la hazaña. Pero… ¿podría concretarla? A juzgar por el primer tiempo, sí. Porque una pincelada del Polillita Da Silva, un tiro libre de Carbonari y un zurdazo de Cardetti sellaron el 3-0 de esa etapa. Quedaban 45 minutos para meter dos goles o, al menos, uno para llegar a los penales. Los minutos se fueron consumiendo sin piedad. Central era más, apretaba en todos los sectores, agobiaba al Mineiro, pero no convertía. Y en el minuto 88, cuando la ilusión se licuaba, voló un centro del Negro Palma y apareció el cabezazo letal del Petaco Carbonari para perforar el ángulo derecho del arco de Taffarel, colgarse del alambrado y establecer el 4-4 en el global. Un resultado que abría la chance de la definición por penales, instancia en la que Carbonari convirtió el suyo para abrochar el 4-3 que consagró a Central como el primer equipo del interior que obtenía un título internacional en la era profesional. Fue la noche dorada de Carbonari, héroe para la eternidad del pueblo canalla. La noche en la que el actual entrenador de Central, Chacho Coudet, se quedó sentado en la mitad de la cancha hasta las seis de la mañana junto a Vitamina Sánchez y Federico Lussenhoff, para cumplir una promesa que habían hecho en el vestuario del Mineirao, luego del 0-4 que parecía una sentencia… 

Nota publicada en la edición de mayo de 2015 de El Gráfico