La revancha de Colombia

En enero de 2014, la lesión de Falcao le dolió a todo un país. No hay metáfora ni exageración: Colombia sintió que las chances mundialistas se desvanecían sin su ancho de espadas. Como primera reacción buscaron culpables a su infortunio. Soner Ertek, el desconocido defensor del Chasselay, quien participó en la jugada de la rotura de ligamentos, recibió amenazas e insultos desde el otro lado del Atlántico. No había tenido mala intención.

Casi como una negación de la realidad, en el país cafetero se aferraron a la esperanza de que de que el Tigre de Santa Marta apareciera a último momento. El 2 de junio en conferencia de prensa, el jugador acompañado del entrenador José Pekerman y otros compañeros, anunció que cualquier intento era imposible y que no estaría en Brasil 2014.

Pese a las dificultades, su selección hizo un gran Mundial. Arrasó en su grupo y eliminó al siempre complicado Uruguay en Octavos, pero tropezó en Cuartos de Final enfrentando nuevamente a un equipo sudamericano. No era cualquiera: nada más y nada menos que el local, Brasil. Aquel partido quedó marcado por el mal arbitraje y la sensación de que el pase a semis estuvo realmente cerca.

Las lágrimas de James Rodríguez le dolieron al mundo. El ex Banfield hizo el clic en el Mundial y se colgó el cartel de estrella. Él se fue al Real Madrid, el arquero Ospina saltó al Arsenal, Juan Cuadrado a la Fiorentina y Carlos Bacca volvió a salir campeón con Sevilla. No sólo brillaron en el Viejo Continente. Teo salió campeón con River, Edwin Cardona pasó de Atlético Nacional al Monterrey y Edwin Valencia reactivó su potencial en el Santos brasilero. El mundo se rindió ante el equipo revelación y las individualidades después del mágico junio de 2014 confirmaron su buen nivel. La etapa de madurez ya la pasó. Colombia tendrá un año más tarde, una prueba difícil pero para la que cuenta con millas de experiencia. Y con Falcao en cancha que no es poca cosa.

Desde el 2 de junio en el predio de Cardales, Pekerman ya tiene a sus 23 jugadores a disposición. No es poca cosa en un certamen que se caracteriza por el arribo a último momento de varios de los protagonistas. Además, a cinco días del debut vs. Venezuela, Santiago Arias, el lateral derecho del PSV Eindhoven, se recuperó de su lesión en el empeine. Con él, los 23 ya están a disposición del cuerpo técnico. “Cada entrenamiento es como una final”, dijo al diario El Tiempo Camilo Zuñiga, uno de los referentes, pero sin titularidad confirmada. Luego del primer partido, Brasil y Perú serán los rivales para completar el grupo C.

Ya no será la Cenicienta sino un equipo con pretensiones al nivel de los más importantes. La expectativa de su país viajó a Chile y las exigencias están puestas a la altura de las de Brasil y de Argentina. Para Colombia, la Copa América será su revancha.