Boateng, víctima de Messi y de todas las burlas

En menos de una semana, se disparó la búsqueda de Jerome Boateng en Google y la primera página del buscador al escribir su nombre modificó la fisonomía. Cinco de los primeros diez resultados se refieren a su caída en el segundo gol de Messi. En Wikipedia, por unos minutos, apareció entre sus apodos “Cadera loca”. Los memes no tardaron en circular por las redes sociales y fue Trending Topic en Twitter cuando terminó el partido.

Este sábado, el juez de línea del Barcelona-Real Sociedad tropezó, cayó al piso y un diario español tituló que “hizo un Boateng”. No sólo su apellido se convirtió en sustantivo, sino que diferentes goles de estos días recordaron el fantástico gol de Messi y la caída de su marcador. Ocurrió con Ibrahimovic para el PSG, Brienza para el Cesena y Rubén Castro para el Betis. La humillación futbolística en el siglo XXI es virtual y descorazonada.


Otra perspectiva del golazo de Messi pic.twitter.com/wqphESHPwE
— RotoChop (@RotoChop_) Mayo 6, 2015


Boateng es el líder de la defensa que suele parar Guardiola. Entre los cuatro equipos punteros de las mejores ligas del mundo (Barcelona, Chelsea, Juventus), el Bayern Munich es el que menos goles recibió por el torneo local. En el partido de ida de cuartos de final, Pep pateó el tablero y puso en el banco a Dante. El brasileño no venía teniendo buenas actuaciones y la gota que rebalsó el vaso fue un grosero error en la salida que permitió uno de los tres goles del Porto. Para el partido de vuelta, Boateng compartió zaga con Badstuber y además de ganar, hizo uno de los seis goles. Por Champions, también le había anotado al Shakhtar y al Manchester City.

Tiene 26 años, estuvo en los siete partidos del último Mundial para Alemania y antes del miércoles había jugado tres veces contra Messi y le había ganado siempre. Pero una sola maniobra de Lionel alcanzó para ridiculizarlo con la caída como peso muerto de sus noventa kilos adentro del área. “Todo el mundo se estrelló en un duelo frente a un jugador como Messi, el mejor del mundo. No se puede hacer esto y dejar a un defensor solo en el uno contra uno”, dijo. Peor quedó su compañero Neuer, víctima secundaria, quien antes del encuentro aclaró con énfasis que Messi no era el mejor del mundo.

El fin de semana, el Augsburgo sorprendió al Bayern en su estadio y le prolongó la mala racha. Por primera vez en más de treinta años, sumó tres caídas al hilo. El autor del único gol del partido fue Raúl Bobadilla, un argentino nacionalizado paraguayo quien charló con Dante del caso Boateng. Según le contó el central brasilero, hasta sus propios compañeros lo cargaban por el episodio.

Los memes lo imaginaron cayendo a un pozo, tirándose por un tobogán o recibiendo un disparo. “Los que te odian difunden tus fracasos, pero susurran tus éxitos”, escribió JB en su Instagram ilustrado con una imagen de El Padrino. Su amigo Mario Balotelli usó la misma red social para subir una foto de él con la Copa del Mundo: “Muchas personas molestan, pero se deben haber olvidado que hace unos meses ganó esto. Sigue así mi hermano”, escribió. En los comentarios de la publicación,  la opinión está dividida entre los que lo apoyan y quienes le escriben “Messi” o palabras que lo persiguen como si estuviera en una pesadilla.

Su hermano Kevin-Prince, a quien enfrentó dos veces en Mundiales, tampoco la pasa bien. El Schalke 04, que lo había pagado 15 millones de euros, le rescindió el contrato por indisciplina. Al parecer, mucho más que con el arco, la afinidad del ghanés es con los boliches. Y si de bailar se trata, una canción made in Córdoba ya dio la vuelta al mundo en su versión reggaetón y con su pegadizo estribillo que dice “Cómo menea la cadera Boateng”. Porque todo lo que toca Messi lo convierte en oro, y todo lo que amaga… lo ridiculiza.