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El final de una era: El Boca de Bianchi tuvo el desenlace menos pensado

El presidente Daniel Angelici decidió echarlo luego de la sucesión de derrotas. El técnico que volvió por la puerta grande se fue por la ventana. Ni siquiera lo dejaron dirigir contra Vélez. Ahora le buscan un sucesor de manera inminente; la dirigencia de Boca deberá pagar el costo político de su salida sumada a la de Juan Román Riquelme.

Por Redacción EG ·

28 de agosto de 2014
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El mal arranque en el semestre y el corolario de la derrota categórica ante Estudiantes en La Plata le dieron el tiro de gracia al tercer ciclo de Carlos Bianchi en Boca. El entrenador más exitoso en la historia del club asumió en el verano de 2013 y desde entonces sólo acumuló frustraciones. Hoy, tras una larga reunión entre el Virrey y el presidente Daniel Angelici, la dirigencia anunció el despido del técnico. 

El futuro de Boca, que en el último mercado de pases invirtió diez millones de dólares en refuerzos, es una incógnita. El presidente aseguró que a partir de mañana trabajarán para confirmar al nuevo técnico cuanto antes. 

"Carlos Bianchi quería trabajar hasta el domingo, si no tenía resultados se iba. Tenía fuerzas para dirigir, pero la Comisión Directiva decidió por unanimidad rescindir el contrato", explicó Angelici públicamente, y agregó: "Intentaremos traer un entrenador que pueda revertir los resultados futbolísticos". 

Las frases del presidente

"No sé como nos van a recibir (a los dirigentes) los hinchas de Boca". 

"Bianchi tendrá de por vida el agradecimiento de Boca. Estará siempre en la historia grande del club porque se lo merece". 

"Esperamos que el hincha de Boca entienda la decisión que tomamos. Nosotros nos podemos equivocar, pero siempre tratamos de tomar las decisiones que consideramos correctas porque el club está por encima de todo". 
 
"Nunca pensé en dar un paso al costado porque me apoyaron los socios. Voy a terminar mi mandato hasta el 14 de diciembre, cuando hay elecciones. Yo escucho a los socios, porque el club es de los socios, por eso puedo entender que a veces me puteen a mí, y aunque no me gusta, prefiero que me insulten a mí y no a los jugadores". 

"Estoy convencido de que tenemos el mejor plantel del fútbol argentino". 

"Es el día más difícil desde que estoy en el club". 

"No se puede vivir de plebiscitos, Carlos quería seguir y pensaba dar un paso al costado si le iba mal en el próximo partido, pero la Comisión Directiva decidió de unanimidad rescindir el contrato".