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Gerardo Martino fue presentado oficialmente como nuevo entrenador de la Selección argentina
El técnico rosarino dio una conferencia de prensa en la que se mostró dispuesto a continuar la línea de Sabella. Además, quiere hacerse cargo de las juveniles y ya dio su primera lista para el amistoso del 3 de septiembre contra Alemania: irán los mismos 23 del Mundial.
Por Redacción EG ·
14 de agosto de 2014
Gerardo Martino textual
“El Sub 20 es un ámbito en el que me gustaría decidir y opinar. Así nos pusimos de acuerdo con la dirigencia de la AFA, y vamos a estar cerca de todo lo que tiene que ver con la Selección mayor para que podamos disponer de la mejor manera”.
“A veces cuesta entenderlo, pero es importante para un entrenador de la Selección tener a su cargo todo lo que rodea al equipo. Un Juego Olímpico, por ejemplo, tiene futbolistas de la mayor. Lo mismo un Sub 20, que tiene futbolistas que también pueden jugar en la mayor”.
“No queremos venir y cambiar todo de un día para el otro. Nuestro objetivo es mantener una línea de trabajo que ya fue iniciada por Sabella. Lo que hizo fue maravilloso, y no sólo por los resultados”.
“En el primer partido vamos a mantener a los jugadores que estaban en el ciclo anterior. Como un premio hacia lo que hicieron estos futbolistas, y además por una cuestión de tiempo. Los que estuvieron en la Copa del Mundo de Brasil estarán contra Alemania en el próximo amistoso (a jugarse el 3 de septiembre)”.
“Para mí es un orgullo muy grande ocupar este puesto, quizás el más grande de mi carrera”.
“En mi Selección no hay nadie prohibido, y todos los jugadores tendrán las puertas abiertas”.
“Ya saben que a lo largo de mi carrera mis equipos no han jugado siempre de la misma manera. Me gusto mucho lo de Newell’s, después el Barcelona… Será un placer llevar adelante ese modelo en la Selección”.
“A mi regreso de Barcelona, decidí parar un tiempo, evidentemente la selección argentina es un trabajo que no es común a todos. Implica un compromiso laboral, sentimental, es el lugar anhelado por todos aquellos que alguna vez empezamos a entrenar. Ameritaba un análisis diferente de mi parte”.
“Mi paso por Barcelona fue un buen entrenamiento, una situación que desconocía. Me fui acostumbrando”.
“Tengo la ventaja de haber vivido con ellos (con Mascherano y Messi). Leo tendrá el rol del mejor del mundo y la responsabilidad que conlleva eso para él. En Mascherano ustedes descubrieron ahora un liderazgo que para mí hace mucho tiempo existe. Vemos cosas mucho tiempo antes, no necesitamos un Mundial. Lo de Javier viene desde que Bielsa lo convocó cuando no había debutado en la primera de River”.
De menor a mayor: La trayectoria del Tata como entrenador
Martino se formó como técnico en el ascenso, dirigiendo a Almirante Brown de Arrecifes en la B Nacional durante la temporada 98/99. El equipo verdinegro, un ilustre desconocido que ahora milita en la liga arrecifeña de fútbol, fue la escuela de un entrenador que ya por entonces mezclaba la practicidad de sus decisiones con la obsesión por el trabajo diario.
El siguiente paso fue en Platense, durante la campaña 99/00. El equipo de Vicente López había perdido la categoría un año antes e intentaba regresar lo más rápido posible a Primera División. Acto seguido desembarcó en Instituto de Córdoba y formó un equipo que jugaba bien al fútbol, que era protagonista y que se quedó a las puertas del ascenso en la Promoción 2001 contra Argentinos Juniors.
El destino de Martino tras el trunco ascenso con Instituto es Paraguay. Allí dirige a Libertad y a Cerro Porteño, y salvo una breve interrupción en la que comanda, sin demasiada suerte, a Colón de Santa Fe en 2005, se mantiene con éxito en la Liga paraguaya logrando cuatro títulos locales, los que le valieron el llamado de la Selección guaraní.
Dirigió a Paraguay entre 2006 y 2011, clasificando al equipo al Mundial de Sudáfrica 2010 (cayó en cuartos ante España, futura campeona) y siendo subcampeón de la Copa América de Argentina 2011. Luego vuelve a Argentina para dirigir al equipo de su vida, al gran amor de su etapa de futbolista, Newell’s Old Boys. A la Lepra la salva del descenso, logra un título y edifica un equipo que conjuga a la perfección la belleza con la efectividad. Todo ello llega a los oídos de los dirigentes del Barcelona, que lo contratan para reemplazar a Tito Vilanova.
La suerte del Tata durante su aventura catalana fue dispar. Empezó ganando la Supercopa española ante el Atlético de Madrid de Diego Simeone pero luego se desvanece en la Liga y cae en cuartos de final de Champions League. Su ciclo como blaugrana terminó al final de la temporada 13/14.
