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Moto GP: siempre al límite

Del 25 al 27 de abril todo el show del Mundial de motociclismo se concentrará en Termas de Río Hondo, lo que significa el regreso después de 15 años de la máxima categoría del deporte de dos ruedas a la Argentina. Vendrán los españoles Márquez, Lorenzo, Pedrosa y el multicampeón Valentino Rossi. Se estima que en recta las motos alcanzarán 330 km/h.

Por Redacción EG ·

12 de mayo de 2014
  Nota publicada en la edición de Abril de 2014 de El Gráfico

Imagen DESTREZA pura del actual campeón Marc Márquez al acostar prácticamente su Honda n° 93.
DESTREZA pura del actual campeón Marc Márquez al acostar prácticamente su Honda n° 93.
Sin dudas esta no será una temporada más para los fanáticos argentinos del motociclismo, porque, después de 15 años, nuestro país volverá a ser escenario de una fecha en el calendario del Mundial de MotoGP, Moto2 y Moto3. La cita será durante la última semana de abril, con entrenamientos el viernes 25, clasificación el sábado 26 y carrera el domingo 27, en el admirable circuito internacional de Termas de Río Hondo, en la provincia de Santiago del Estero.

Luego de la fecha inaugural el 23 de marzo en Qatar y de la competencia del 13 de este mes en el Circuito de las Américas, en Austin, Texas, llegará el ansiado turno para la carrera en la Argentina, tercera de las 18 que integran el calendario FIM MotoGP World Championship. El acuerdo es por 3 años, con lo cual nuestro país tendría garantizada su plaza hasta el 2016.

El circuito de Río Hondo, inaugurado en 2008 y remozado en 2012, recibió la homologación de la FIM (Federación Internacional de Motociclismo) para ingresar en el Mundial gracias a sus condiciones de seguridad, modernización y escenario adecuado para que las estrellas del motociclismo puedan desplegar todo su talento. Con una longitud de 4806 metros y un ancho de 16 metros, cuenta con 9 curvas a la derecha y 5 a la izquierda. En las 25 vueltas de competencia se recorrerán 120,2 kilómetros. Su recta más larga tiene 1076 metros y está preparado para recibir 70.000 espectadores, con 33.000 metros cuadrados destinados a boxes y estacionamiento para 25.000 automóviles.

Pero para interpretar mejor lo que significa la presencia del MotoGP en la Argentina, valen las orientaciones que nos pueden brindar dos referentes del motociclismo argentino como Sebastián Porto, subcampeón mundial de 250cc en 2004, y Benedicto Chiche Caldarella, ganador del GP de Argentina por el Mundial de 1962 en 500cc al comando de una Matchless.

“Parecía impensada y cada vez más lejana la posibilidad de que volviera el MotoGP a la Argentina, ya que el Mundial no nos visitaba desde aquella carrera del 99. Como amante de este deporte me produce orgullo, pero es una lástima que no haya ningún argentino compitiendo. Si Dios quiere, yo participaré como invitado en Moto2, y llevar una vez más los colores de la Argentina en un evento de semejante magnitud me hace pensar que será un fin de semana realmente emocionante”, expresó Porto.

“La expectativa –agregó el rafaelino– es muy buena, porque el motociclismo ha crecido mucho en estos últimos años. Hay fanáticos que conocen bastante y otros que, sin entender demasiado, también quieren saber de qué se trata este gran circo. Y eso se refleja en la cantidad de entradas vendidas con anticipación. Va a concurrir mucho público sudamericano, porque es el único Gran Premio en toda la región. Esta es la F1 de las dos ruedas y me atrevería a decir que casi es mejor, porque hay más espectáculo en pista. Y la posibilidad de ver en acción a esos grandes nombres que uno suele ver por la tele llama la atención. Para mí será un volver a vivir, ya que me reencontraré en Termas con varios de los rivales que tuve en pista”.

Porto fue un testigo privilegiado de la notable campaña de Valentino Rossi. “Tengo muy buenos recuerdos de Valentino. Sin dudas que él ha sido el referente más importante que ha tenido el motociclismo en la última década y media. No sólo por todo lo que ganó, sino también por su carisma y forma de ser. En cualquier lugar del mundo se lo trata como a un ídolo y tuve la suerte de compartir dos años en pista con él, con almuerzos y cenas en los que éramos compañeros. Hemos tenido una pequeña y linda amistad. Y el recuerdo inolvidable fue aquella carrera del 99, la última que se corrió en la Argentina, cuando él salió tercero y yo cuarto con una moto estándar, que no estaba al nivel de las oficiales. Me faltó una vuelta, o dos, para luchar por un puesto en el podio, pero igualmente el haber corrido de igual a igual con un grande como él no se me borrará nunca”.

“Y sobre Marc Márquez –continuó Porto- es otro fenómeno de igual magnitud que Valentino. Yo siempre digo que prima el talento, son esos deportistas que tienen un plus distinto al resto. Son pilotos que surgen de tanto en tanto. Márquez ya se consagró en las tres categorías e inclusive salió campeón en su debut en el MotoGP, algo que ni el propio Rossi había logrado. Valentino es el Maradona del motociclismo y Márquez el Messi. Los dos son extraordinarios pilotos, uno con 21 años y el otro con 35. Es una suerte que podamos disfrutar de los dos en pista”.

Imagen THE DOCTOR, como se lo denomina a Valentino Rossi, a los 35 años será protagonista de Termas de Río Hondo.
THE DOCTOR, como se lo denomina a Valentino Rossi, a los 35 años será protagonista de Termas de Río Hondo.
Con respecto a su presente, Porto explicó: “Este será un año muy lindo para mí, porque después de 7 temporadas retirado del motociclismo grande, tengo la posibilidad de volver en un nivel tan bueno que hasta me sorprende. Vengo de consagrarme otra vez campeón argentino y a fines de 2013 fui a correr en el campeonato de España y logré hacer podio, que no es poca cosa. Trataré de disfrutar uno o dos años más como piloto y paralelamente desarrollar el proyecto de formar un grupo de trabajo con empresarios argentinos y españoles para ayudar a que crezca este deporte. Esa es la idea que tengo y ojalá la pueda plasmar”.

Durante 12 años ininterrumpidos, Porto compitió en el exterior. Por eso, su ojo clínico ayuda a interpretar si Termas de Río Hondo es el escenario ideal. “Este circuito cumplió con todas las normas de seguridad y aprobó los requerimientos de la Federación Internacional. En Termas se hicieron muy bien las cosas, tal como lo refleja que lo hayan homologado, y no tiene nada que envidiarles a los mejores circuitos del mundo. Por lo visto en los test, creo que alcanzarán en la recta los 330km/h. Los que nunca han podido ver motos en pista, más allá de lo que vieron por tele, van a quedar sorprendidos de lo que hacen estas motos y pilotos. Nunca más se olvidarán de lo que vieron, y seguramente se convertirán en nuevos fanáticos de este espectáculo”.

Para Chiche Caldarella, un histórico en estas lides, la alegría es desbordante. “Imaginate lo que significa para todos nosotros que se haya confirmado la fecha del Mundial. El año pasado nos cayó como un balde de agua fría cuando no se pudo hacer, pero el tiempo de espera sirvió para terminar algunas obras y ahora sí está todo listo. Estuve en las pruebas y todo salió muy bien e inclusive se probó extrañamente con llovizna. La idea era conocer bien el circuito y el tipo de pavimento y los muchachos se dieron el gusto de andar realmente fuerte”.

“Hoy –prosiguió Caldarella– las motos tienen mucha tecnología encima, y como las vuelcan es algo impresionante. Primero, en tan pocos metros la velocidad que levantan, y después la impresión que da cuando prácticamente salen de la moto. De la época mía el primero que se desprendía de la moto era Mike Hailwood y después empezamos a imitarlo, sacando la pierna para afuera, porque nos hacía de alerón. Pero todo ha cambiado mucho y hoy parecería como que quieren mirar la moto de costado, se descuelgan de tal manera que en el caso de Marc Márquez casi toca el suelo con el codo. Ellos se ven favorecidos por la tecnología de los chasis, las suspensiones, y especialmente por el compuesto de las gomas, que les permiten hacer esa maniobra en cada curva con una inclinación de 60º o más”.

“El ruido –continuó Caldarella– también cambió totalmente, porque los motores no tienen nada que ver con los que corríamos nosotros en las viejas épocas. Pero lo más llamativo es el avance de la tecnología y no podemos comparar nunca la década del 60 con la del 70 y esta con la del 80 y los 90. Y menos que menos con la actual. Ha sido una evolución constante en todo sentido. Si hasta a nosotros, que siempre estuvimos en el mundo de las motos, nos sorprenden las motos y los pilotos, porque ver cómo manejan estos chicos es realmente asombroso. Inclinan la moto y pasan con la rodilla por arriba de los pianos a tanta velocidad que es realmente impactante. Yo siempre me levanto a la hora que sea y no me pierdo una carrera en vivo. No me gusta ver las repeticiones. Analizo los circuitos y las decisiones que toman los pilotos en carrera. Me gusta descubrir las estrategias y cómo los pilotos se adaptan a esa planificación”.

Este año, precisamente, se cumplen 50 años de una gran campaña de Caldarella en el Mundial, cuando en el 64 ganó 3 grandes premios, precisamente en Imola, Vallelunga y San Remo. Y en Monza salió segundo, detrás de Mike Hailwood, con quien vivió una anécdota inolvidable en Daytona. “Sí, ese día ingresé en el folclore del motociclismo, porque después de haber peleado de igual a igual en carrera, se me trabó la selectora de cambios y tuve que abandonar. Entonces Hailwood, el triunfador, me fue a buscar al box y me invitó a dar la vuelta de honor junto con él en un auto descapotable. Y ese gesto se interpretó como que un campeón mundial valoró lo que lo había exigido vuelta tras vuelta mientras estuve en pista. Todavía me emociono al contarlo”.

Por Walter Napoli