Idolos de la Selección: Alberto Tarantini
El Conejo, lateral con marca y proyección, se convirtió en referente para sus sucesores. Hizo un gol y alcanzó la gloria en el Mundial 78.
Por Redacción EG ·
05 de mayo de 2014
En su caso, la frase “es un jugador de Selección” fue cien por ciento real. Porque Alberto Tarantini, en 1978, no pertenecía a ningún club, sino que era jugador de la AFA. En esa condición, defendió la camiseta argentina durante aquel año incluso en el Mundial que lo coronó campeón del mundo. El Conejo marcó una época e hizo recordar otra: lateral de permanente salida, atrevido y sin problemas de perfil, pasaba al ataque como Silvio Marzolini y, a la vez, dejó huellas para los que heredaron su puesto. Convirtió uno de los goles del histórico 6-0 a Perú, en Rosario, que valió la clasificación para la final mundialista ante Holanda. Su personalidad lo transformó en ídolo adentro y afuera del campo de juego. Aún se recuerda el “abrazo del alma” que compartió con el Pato Fillol y un hincha sin brazos, al finalizar la final del Mundial 78. Por su juego aéreo y su anticipo, Menotti también lo llevó a España 82. Jugó en Boca, en Talleres, en River… Con los años fue dejando su ida y vuelta por las bandas para ser un inteligente y correcto marcador central.
Carnet de ídolo
Nombre y apellido: ALBERTO CESAR TARANTINI.
Nació: 3/12/1955 en Ezeiza, Buenos Aires.
Jugó: 58 partidos entre 1974 y 1982.
Goles: 1.
Mundiales: 1978 y 1982.
Títulos: 1 (Mundial 1978).
