(sin categoría)

Idolos de la Selección: Antonio Sastre

Polifuncional por necesidad y por elección, el Cuila maravilló en cualquier puesto y fue clave en el Sudamericano del 37.

Por Redacción EG ·

30 de abril de 2014
Imagen
 “Entreala derecho”. “Entreala izquierdo”. “Half derecho”. Las crónicas no mienten: Sastre jugaba en cualquier puesto. Lo más llamativo es que lo hacía bien en todos. Es difícil determinar su verdadera posición, porque se destacaba en cualquiera. Fue el primer gran polifuncional que tuvo el fútbol argentino, y uno de los más completos. Hubo otros antes, en la época amateur, pero ninguno como él: sabía armar juego, sabía gambetear, sabía definir y sabía marcar.

También cumplió los roles de centromedio, centrodelantero y puntero derecho. En Independiente, sin ir más lejos, integró ataques con De la Mata y Erico. En la Selección, entre otros cracks, con el Charro Moreno, el Chueco García y Masantonio. En el Sudamericano de 1937 le pidieron que fuera una especie de marcador lateral derecho: deslumbró y Argentina se quedó con el título. El Cuila, como le decían, también obtuvo el torneo continental de 1941. Casi al final de su carrera emigró hacia Brasil, para desempeñarse en São Paulo: allí todavía lo recuerdan como “el Maestro” y han hecho un monumento en su honor.

Carnet de ídolo



Nombre y apellido: ANTONIO SASTRE
Nació: 27/4/1911 en Buenos Aires
Jugó: 34 partidos entre 1933 y 1941
Goles: 6
Mundiales: no jugó.
Títulos: 2 (Sudamericanos 1937 y 1941)