(sin categoría)

Argentina ya está en el Mundial: 5-2 a Paraguay con fiesta en ataque y dudas en el fondo

Con la goleada en Asunción, la Selección se transformó en el primer equipo de la eliminatoria sudamericana en confirmar su participación en Brasil 2014. Messi hizo dos (de penal), y Agüero -figura-, Di María y Maxi Rodríguez, uno. Floja participación del arquero y los defensores.

Por Redacción EG ·

11 de septiembre de 2013
Imagen MESSI hizo dos goles, ambos de penal, y se transformó en el goleador de las Eliminatorias.
MESSI hizo dos goles, ambos de penal, y se transformó en el goleador de las Eliminatorias.
¿Mata o muere? No, esta Argentina mata o mata. La diferencia entre la contundencia ofensiva y la fragilidad defensiva es tanta, pero tanta, que incluso en partidos con demasiados errores en el fondo, como el de esta noche en Asunción, daría la impresión de que es difícil que la Selección no termine imponiéndose por amplio margen.

Imagen LA SELECCIÓN se fue victoriosa de Asunción y clasificó al Mundial con dos fechas por jugarse.
LA SELECCIÓN se fue victoriosa de Asunción y clasificó al Mundial con dos fechas por jugarse.
Un equipo que genera situaciones de gol con la misma naturalidad con la que uno respira, sin dudas tiene una ventaja en el equilibrado mundo del fútbol actual. Que los cuatro de arriba (hoy sin Higuain y con Palacio) se sienten cómodos, es indudable. Que atacan bien pero sobre todo contraatacan mejor, también. Y para esto último apenas basta una distracción en alguna pelota suelta, o una salida no del todo prolija, para terminar la jugada con tiro al arco a favor. Así, cualquier escenario se facilita.

Es más factible que el equipo de Sabella encuentre el gol antes que el juego. Así, el funcionamiento puede darse el lujo de llegar en forma diferida, cuando el resultado ya está a favor, como fue el caso de hoy. Desde jugadas aisladas, Argentina ya se había puesto en ventaja (genial el Kun en una contra letal, penal que Messi cobró con tranquilidad) y además desperdiciado otras dos chances clarísimas.

Mientras pasaban los minutos, el andamiaje defensivo fue quedando en evidencia como el punto frágil del equipo, una vez más. Una defensa que se fue resquebrajando de a poco, más por errores individuales que por distracciones o mal funcionamiento, también vale decirlo. Así llegó el empate transitorio de Paraguay, en un anticipo a Coloccini y una preocupante reacción de Sergio Romero.

Después, a medida que Gago tomó el control del partido, y se juntó con Leo, aparecieron los mejores minutos argentinos, siempre coronados por situaciones de gol y un Agüero inspiradísimo que junto a su socio Leo, volvieron a ser figuras, acompañados por el trabajo silencioso de Palacio y las llegadas de Di María. Fue una defensa paraguaya que distó mucho de la tradicional disciplina defensiva guaraní, también es cierto. Pero nada quita las sensaciones. Así, Argentina mata o mata.

Temas