(sin categoría)

Malí, la última esperanza

Mientras el país se desangra por un conflicto interno de gran trascendencia internacional, su selección de fútbol logró el tercer puesto en la Copa de Africa. Una actuación que conmovió a un pueblo herido y le dio una tregua a la guerra. Resumen del ensayo fotográfico que apareció en la revista.

Por Redacción EG ·

18 de marzo de 2013
 Nota publicada en la edición de marzo de 2013 de El Gráfico

Imagen MIRADA ATENTA. Un hombre sigue Malí-Ghana entre una pila de televisores sin funcionar en la ciudad de Segou, dique de la resistencia ante los rebeldes islamistas.
MIRADA ATENTA. Un hombre sigue Malí-Ghana entre una pila de televisores sin funcionar en la ciudad de Segou, dique de la resistencia ante los rebeldes islamistas.
La rebelión tuareg –un pueblo nómade sin territorio– comenzó el año pasado en el norte de Malí, pleno desierto del Sahara, y captó inmediatamente el interés de facciones del grupo terrorista Al-Qaeda, que batallaron contra el ejército de Malí y lograron el control de ciudades clave. Sumergido en la inestabilidad, el país sufrió un golpe de Estado. Pero una vez conseguido el dominio del territorio de Azawad, los insurgentes expulsaron a los tuaregs y fundaron un estado fundamentalista islámico no reconocido internacionalmente.

Imagen EL PRESIDENTE debió pedir la intervención y el envío de tropas de Francia, a través del Consejo de las Naciones Unidas.
EL PRESIDENTE debió pedir la intervención y el envío de tropas de Francia, a través del Consejo de las Naciones Unidas.
Desde entonces, el avance de los radicales islamistas sobre el sur fue permanente y obligó al presidente de Malí –una nación con 90% de población islámica– a pedir la intervención y el envío de tropas de Francia, a través del Consejo de las Naciones Unidas. En ese contexto, la selección de fútbol de Malí se presentó en la CAN 2013, disputada en Sudáfrica.

Imagen TERCER puesto, el obtenido por la selección de Malí, luego de caer en semifinales contra Nigeria y recuperarse ante Ghana.
TERCER puesto, el obtenido por la selección de Malí, luego de caer en semifinales contra Nigeria y recuperarse ante Ghana.
Comandada por el ex volante del Barcelona Seydou Keita (autor del gol de la victoria ante Níger), la selección de Malí quedó segunda en el Grupo B, con algo de sufrimiento en el partido definitorio contra la República del Congo.

En los cuartos de final, eliminó por penales a Sudáfrica en Durban. Luego cayó en semifinales contra Nigeria 4-1. Pero se recuperó en el partido por el tercer puesto y venció 3-1 a Ghana, con el que había perdido en la fase previa.

Imagen LA COPA se vivió en las calles y significó un motivo de festejo para el pueblo.
LA COPA se vivió en las calles y significó un motivo de festejo para el pueblo.
La copa se vivió en las calles y significó un motivo de festejo para un pueblo que sufre una crisis humanitaria y se mantiene al borde de la guerra civil, con atentados y enfrentamientos armados que, al menos por unos días, se sometieron a una tregua no escrita: la ley del fútbol.

Fotos: AFP