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Valijas a Mar del Plata para la definición de la Liga Nacional

Pese a los 39 puntos de triples de Peñarol, Obras ganó 86-84 en su casa y prolongó la serie que quedó 3 a 2 a favor del marplatense. Un cuarto final vibrante.

Por Redacción EG ·

29 de mayo de 2012
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Otro partido de la serie final de la Liga Nacional de Básquet para el infarto. Es que juegan, sin duda, los mejores equipos de la Argentina: Peñarol basó su accionar, como siempre, en la eficacia en el tiro de tres puntos (metió 13) y Obras logró contrarrestar tanto poderío ofensivo con el muy buen partido de Osimani (20 puntos) y Espinosa (18).

El primer cuarto fue para la visita 20 a 16 con los triples de Campazzo (4/10 en el partido). Faltando 5.40 para terminar el segundo cuarto, Obras logró pasar al frente luego de mucho tiempo (27-26). No se jugaba bien y abundaron pérdidas y errores, incluso fricciones que llevaron a cargar a los elencos con infracciones (Safar, Osimani, Field). En la mitad de este segundo cuarto, a Leiva ya le había cometido siete faltas, pero su ineficacia en los libres no le permitió despegarse a Peñarol. Al contrario, a poco menos de dos minutos para el entretiempo Obras logró sacar diez de ventaja que no consiguió conservar y descansó con solo seis arriba: 41-35. En el local se destacaban los suplentes sobre los titulares: habían aportado 23 puntos contra 18.

Vueltos de los vestuarios, retornaron los triples en el marplatense: dos de Leo Gutiérrez le dieron cuatro de ventaja a su equipo (46-50) faltando seis minutos. Osimani quedó condicionado con la cuarta falta personal y los quintetos empezaron a cambiar tiro a tiro. Juan Gutiérrez con un triple mandó al último descanso a Obra perdiendo por un punto (55-56).

El último cuarto fue sensacional, cargado de adrenalina. Un triple de Washam puso al local al frente por dos y abrió el camino para un parcial llamativo de 18 a 0, roto cuando Leo Gutiérrez logró un triple con falta que se transformó en cuatro puntos e inició la resurrección visitante. Faltaban 6.48 y la hinchada local daba por sentado un cierre con baile ya que el “tachero” vencía por 14 (70-56). A partir de esa cuádruple anotación, el equipo de Sergio Hernández ametralló el canasto porteño: tres triples de Safar en poco más de un minuto más un doble inmediato del “Turco” lo acercaron a Peñarol a solo dos puntos (75-73). Luego de un libre convertido por Juan Gutiérrez empató Mata con otro triple. Llegaría entonces el turno de los cortes con falta, donde la visita perdió por las bajas de Safar y Leo Gutiérrez, y se lució Osimani con cinco puntos fundamentales que hicieron inútil el gran triple de Campazzo a tres segundo del final que selló el marcador en un inolvidable 86-84. El mango del sartén lo sigue teniendo Peñarol solo que se le achicó la distancia a la hornalla: gana 3 a 2. El jueves, otra función de gala: “la última en La Feliz” dice Obras. “La última, a secas” piensa Peñarol.

Néstor Saavedra