(sin categoría)
A propósito de Maidana...
El argentino perdió ante Devon Alexander y estuvo lejos de anteriores actuaciones. Aquí, un repaso de su situación.
Por Carlos Irusta ·
29 de febrero de 2012
Marcos Maidana perdió ante Devon Alexander el sábado 25 en Saint Louis, Missouri, PERO... no perdió su campeonato mundial welter junior AMB, ya que combatió en una categoría diferente, la welter.
Marcos Maidana realizó una labor muy pobre frente a Alexander, PERO... igual dio espectáculo, aguantó y corajeó, lo que para la gente de la televisión siempre es un elemento a favor.
Marcos Maidana se mostró lento de manos y de piernas en un combate en donde su rival, justamente, exhibió alta velocidad, PERO... le queda la disculpa, que la categoría welter no le queda bien.
Lo que si debe quedar bien en claro de ahora en más, es que se impone un profundo replanteo en el equipo argentino. Maidana es un boxeador muy limitado y su gran argumento es el ataque permanente,
PERO... cuando lo contragolpean y se le escapan, le cuesta mucho trabajo cerrar los espacios para acorralar al adversario. Deberá cuidar mucho ese déficit, trabajando para caminar mejor el ring y saber perseguir al rival no en línea recta, sinó cortándole los caminos: ante boxeadores de choque como Víctor Ortiz y Erik Morales, el santafecino de Margarita recibió castigo pero también pudo conectar sus golpes que hacen daño. Resultado, Ortiz se fue del ring y El Terrible perdió por puntos.
Cuando, en cambio, se le mueven como Alexander, a Maidana le cuesta un gran trabajo superarlos.
No “descubramos” ahora al Chino. Es un pegador y como todo pegador, suele olvidarse el aspecto técnico para reemplazarlo con coraje y pegada.
PERO... Sólo que en este nivel, y como campeón mundial, cada pelea será todavía más dura y cada vez que tenga enfrente a un boxeador elusivo, deberá sudar la gota gorda para lograr una victoria que, el sábado 25, estuvo tan lejos como que casi perdió todos los asaltos.
Seguramente habrá algún cambio de técnico y alguna modificación en el equipo, para buscar: velocidad y combinaciones de manos (que no las hubo en la noche de Saint Louis) y un gran estado físico para tirar hasta el último minuto.
Lo otro –caminar mejor el ring, rotar la cintura, trabajar la defensa- parece un poco más lejano, PERO... tampoco le quitemos al argentino la posibilidad de trabajar y aprender.Hasta aquí, nuestro voto de confianza. El resto tiene que ponerlo él mismo.
Marcos Maidana realizó una labor muy pobre frente a Alexander, PERO... igual dio espectáculo, aguantó y corajeó, lo que para la gente de la televisión siempre es un elemento a favor.
Marcos Maidana se mostró lento de manos y de piernas en un combate en donde su rival, justamente, exhibió alta velocidad, PERO... le queda la disculpa, que la categoría welter no le queda bien.
Lo que si debe quedar bien en claro de ahora en más, es que se impone un profundo replanteo en el equipo argentino. Maidana es un boxeador muy limitado y su gran argumento es el ataque permanente,
PERO... cuando lo contragolpean y se le escapan, le cuesta mucho trabajo cerrar los espacios para acorralar al adversario. Deberá cuidar mucho ese déficit, trabajando para caminar mejor el ring y saber perseguir al rival no en línea recta, sinó cortándole los caminos: ante boxeadores de choque como Víctor Ortiz y Erik Morales, el santafecino de Margarita recibió castigo pero también pudo conectar sus golpes que hacen daño. Resultado, Ortiz se fue del ring y El Terrible perdió por puntos.
Cuando, en cambio, se le mueven como Alexander, a Maidana le cuesta un gran trabajo superarlos.
No “descubramos” ahora al Chino. Es un pegador y como todo pegador, suele olvidarse el aspecto técnico para reemplazarlo con coraje y pegada.
PERO... Sólo que en este nivel, y como campeón mundial, cada pelea será todavía más dura y cada vez que tenga enfrente a un boxeador elusivo, deberá sudar la gota gorda para lograr una victoria que, el sábado 25, estuvo tan lejos como que casi perdió todos los asaltos.
Seguramente habrá algún cambio de técnico y alguna modificación en el equipo, para buscar: velocidad y combinaciones de manos (que no las hubo en la noche de Saint Louis) y un gran estado físico para tirar hasta el último minuto.
Lo otro –caminar mejor el ring, rotar la cintura, trabajar la defensa- parece un poco más lejano, PERO... tampoco le quitemos al argentino la posibilidad de trabajar y aprender.Hasta aquí, nuestro voto de confianza. El resto tiene que ponerlo él mismo.
