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Falucho cumple años
Santos Laciar, hoy comentarista de televisión, fue un extraordinario campeón y, por sobre todas las cosas, un profesional.
Por Carlos Irusta ·
31 de enero de 2012
Todo empezó de la siguiente manera. El chico estaba parado en la puerta del cine mirando los carteles. Fue entonces, cuando lo vio Roberto Puchetta: “Era bajito, fuerte, retacón... Viéndolo se me ocurrió que podía ser boxeador, así que me acerqué y le hice la pregunta. Yo, arriba del cine, tenía un gimnasio. Y el me dijo que sí, que cómo no...”
El chico en cuestión agregó: “Me llamo Santos Laciar, pero todos mis amigos y me familia me dicen Falucho, porque cuando nací era tan chiquito y negrito que a alguno se le ocurrió...”
Eso pasó en Huinca Renancó, en la provincia de Córdoba. Unos diez años después, el 28 de marzo de 1981, bajo el sol de Soweto, en Sudáfrica, Falucho festejaba su campeonato campeonato mundial de peso mosca, versión Asociación Mundial, logrado al ganarle a Peter Mathebula por KO en siete asaltos.
Fue, el de Sudáfrica, el primer título del mundo de su carrera. En total, obtuvo tres coronas, dos en la división de peso mosca y una en la categoría supermosca. Hasta ahora el único deportista en haberse llevado, en forma consecutiva, tres Olimpia de Oro.
Laciar vivió momentos de gloria en una época muy especial de nuestro boxeo. Estamos hablando de los 80, cuando además brillaron con luz muy propia, Sergio Víctor Palma y Gustavo Ballas. De hecho, aunque los tres llegaron a reinar al mismo tiempo, igual El Gráfico de esos años logró juntarlos para la clásica foto de producción....
Pero es tema es Santos Benigno Laciar, que aunque nacido en Huinca Renancó, es un símbolo de Carlos Paz, en donde vive desde hace años. Y lo suyo es gigantesco, no solamente por sus tres coronas mundiales, peleó con todos lados, de Dinamarca a Mérida, de Maracaibo a Copenhague, de Los Angeles a Miami, de Shizuoka, de Grenoble a Reims... en total, efectuó nada menos que 17 peleas por campeonatos del mundo. Ganó 14 y perdió 3. Se retiró en 1990 con una campaña de 79 peleas ganadas, 30 de ellas antes del límite, 10 empates, 10 derrotas y 2 sin decisión.
Viajamos con él por varios lugares del mundo, enviados por El Gráfico. Siempre fue serio, concentrado, callado, cumplidor de horarios y de rutinas.
Entrenado primero por Horacio Bustos, luego por David Tejero, conducido por Francisco “Cacho” Giordano y Tito Lectoure, llegó a lo que llegó por lo que fue: un profesional...
Laciar nos trae recuerdos imborrables, justamente ahora, este 31 de enero cuando cumple años: 53.
Lo acompañamos a Mérida, México, en mayo de 1982. Falucho tenía que pelear con Juanito Herrera por la corona que le habían robado en el Luna Park ante Luis Ibarra.
Pero había un ingrediente muy especial, porque nuestro país estaba en plena Guerra de Malvinas. Así, el equipo trataba de no ver los noticieros para que Laciar pudiera estar concentrado. Sin embargo, él y su amigo-sparring Mario Demarco, siempre se las ingeniaban para escaparse a la hora de las noticias...
Además de haberla cubierto para El Gráfico, me tocó transmitir ese combate por Canal 9. Laciar ganó por KOT en 13 a Herrera, quien estaba lesionado en el hombro y no pudo seguir peleando. De esa manera, Falucho se convirtió en el primer boxeador extranjero en salir airoso en Mérida.
Luego estalló:
-¡Esto es para los soldados de mi patria, esto es para ellos, para los soldados!
Fue, aquel, un momento especial y único. Santos Laciar, envuelto en la bandera argentina, fue más Falucho y más campeón que nunca.
El chico en cuestión agregó: “Me llamo Santos Laciar, pero todos mis amigos y me familia me dicen Falucho, porque cuando nací era tan chiquito y negrito que a alguno se le ocurrió...”
LACIAR festeja su primer título mundial.
Fue, el de Sudáfrica, el primer título del mundo de su carrera. En total, obtuvo tres coronas, dos en la división de peso mosca y una en la categoría supermosca. Hasta ahora el único deportista en haberse llevado, en forma consecutiva, tres Olimpia de Oro.
Laciar vivió momentos de gloria en una época muy especial de nuestro boxeo. Estamos hablando de los 80, cuando además brillaron con luz muy propia, Sergio Víctor Palma y Gustavo Ballas. De hecho, aunque los tres llegaron a reinar al mismo tiempo, igual El Gráfico de esos años logró juntarlos para la clásica foto de producción....
Pero es tema es Santos Benigno Laciar, que aunque nacido en Huinca Renancó, es un símbolo de Carlos Paz, en donde vive desde hace años. Y lo suyo es gigantesco, no solamente por sus tres coronas mundiales, peleó con todos lados, de Dinamarca a Mérida, de Maracaibo a Copenhague, de Los Angeles a Miami, de Shizuoka, de Grenoble a Reims... en total, efectuó nada menos que 17 peleas por campeonatos del mundo. Ganó 14 y perdió 3. Se retiró en 1990 con una campaña de 79 peleas ganadas, 30 de ellas antes del límite, 10 empates, 10 derrotas y 2 sin decisión.
Viajamos con él por varios lugares del mundo, enviados por El Gráfico. Siempre fue serio, concentrado, callado, cumplidor de horarios y de rutinas.
Entrenado primero por Horacio Bustos, luego por David Tejero, conducido por Francisco “Cacho” Giordano y Tito Lectoure, llegó a lo que llegó por lo que fue: un profesional...
Laciar nos trae recuerdos imborrables, justamente ahora, este 31 de enero cuando cumple años: 53.
Lo acompañamos a Mérida, México, en mayo de 1982. Falucho tenía que pelear con Juanito Herrera por la corona que le habían robado en el Luna Park ante Luis Ibarra.
Pero había un ingrediente muy especial, porque nuestro país estaba en plena Guerra de Malvinas. Así, el equipo trataba de no ver los noticieros para que Laciar pudiera estar concentrado. Sin embargo, él y su amigo-sparring Mario Demarco, siempre se las ingeniaban para escaparse a la hora de las noticias...
Además de haberla cubierto para El Gráfico, me tocó transmitir ese combate por Canal 9. Laciar ganó por KOT en 13 a Herrera, quien estaba lesionado en el hombro y no pudo seguir peleando. De esa manera, Falucho se convirtió en el primer boxeador extranjero en salir airoso en Mérida.
Luego estalló:
-¡Esto es para los soldados de mi patria, esto es para ellos, para los soldados!
Fue, aquel, un momento especial y único. Santos Laciar, envuelto en la bandera argentina, fue más Falucho y más campeón que nunca.
