(sin categoría)

Juntaron Fuerzas

La unión de Ferrocarril Urquiza con el Deportivo UAI llevó al equipo a Primera C en una sola temporada, a pesar de que había empezado con temor por el descenso. Una experiencia novedosa y, por ahora, efectiva.

Por Redacción EG ·

11 de agosto de 2010
Nota publicada en la edición julio 2010 de la revista El Gráfico

Imagen LA ULTIMA VEZ de UAI Urquiza en la D. Antes del partido que marcó la despedida de la categoría, la arenga de rigor.
LA ULTIMA VEZ de UAI Urquiza en la D. Antes del partido que marcó la despedida de la categoría, la arenga de rigor.
“LA CAMPAÑA de UAI Urquiza tuvo una ventaja. Se apoyó en una base profesional. Son detalles que marcan diferencias siempre, sobre todo en una categoría en la que resulta complicado el sentido del profesionalismo”. Cristian Aldirico, entrenador del último campeón de la Primera D del fútbol argentino, la categoría cenicienta, deja en claro alguno de los secretos de un ascenso histórico para el club, que es el resultado de una alquimia novedosa en la estructura deportiva en general.

La pequeña historia del Club Deportivo UAI Urquiza, que se despidió de la Primera D como campeón en una arremetida que quedará como heroica para sus hinchas, tiene sus ribetes diferentes, aunque deberá soportar el típico peso de antecedentes menos felices, incluso escandalosos, en el marco de los negocios del fútbol.

En el plano deportivo, sus hinchas se habrán emocionado más de una vez. Ferrocarril Urquiza nunca había llegado a estar, siquiera, en la cima de la tabla de un torneo oficial de AFA en 61 años de historia. La primera vez fue en la fecha 16 del último torneo, luego del triunfo ante Victoriano Arenas. Pero sólo duró una semana. El equipo siempre corrió desde atrás, sobre todo en el inicio, cuando allá por la fecha 11º se ubicaba 12º con apenas 12 puntos. Sin embargo, en la fecha 29º volvió a tomar la punta y entonces sí, no se bajó más.

Imagen EN LA TRIBUNA sigue dominando el celeste y blanco de FFCC Urquiza, mientras se suma el bordó.
EN LA TRIBUNA sigue dominando el celeste y blanco de FFCC Urquiza, mientras se suma el bordó.
La historia reciente indicaba que en la temporada 2008-2009 llegó a perder quince partidos consecutivos y que no quedó desafiliado únicamente porque Puerto Nuevo sólo totalizó 14 puntos en toda la temporada, uno menos que Urquiza. Un contraste notable con la vuelta olímpica sin intrusos de este año, la suelta de globos, los casi 700 hinchas que deliraron en las tribunas de la cancha de Villa Lynch, en los festejos por el ascenso. 

Sin embargo, en el primer año de la unión entre el ex Club Deportivo Universidad Abierta Interamericana (una de las principales instituciones académicas privadas del país) y el ex Club Atlético, Cultural y Social Ferrocarril Urquiza, habrá que poner en marquesinas el festejo de un grupo de jugadores y de hinchas que ascendió de categoría como hecho inédito para los resabios del “Furgón”, denominación popular que recibía el club fundado el 21 de mayo de 1950 y presidido históricamente por Carmelo Santoro. Ahora, el esforzado amateurismo de carencias se asoció con la experiencia en gestión deportiva de un club perteneciente a una universidad con múltiples disciplinas deportivas.

No sólo la incorporación del color bordó de la universidad (cuyos carteles publicitarios pueden verse en calles y rutas en el país) al tradicional celeste de Ferrocarril Urquiza debe contar como revolución. También el cambio de paso de un equipo que arrancó el torneo con el peor promedio de la categoría, que agitaba fantasmas de la séptima desafiliación (la última fue en la temporada 1998-1999), y que hubiera significado otra larga e insoportable temporada sin competencia oficial.

De aquella pretensión inicial de subir en la tabla de los promedios, el club pasó a ilusionarse con la clasificación a un reducido por el segundo ascenso. Y luego soñó –y concretó– el ascenso directo a la Primera C como campeón. Todo de la mano de un equipo conducido por Aldirico, que apostó por el buen juego colectivo en una categoría en la que los toques y la pelota al piso son excepciones. “Es mi manera de trabajar. Si tengo que apuntar referentes, me quedo con Claudio Borghi, con Diego Cocca o con el mismo Angel Cappa. Siento el fútbol de esa manera”, apunta el entrenador cuando se le pide que se defina como DT.

Entre algunos de los requisitos para concretar un juego vistoso, asociado y de toque, hay uno que no pasa inadvertido: un campo de juego apto para que la pelota corra por el césped sin dar la sensación de que tiene un conejo adentro. “A medida que fue avanzando el torneo, la cancha estaba cada vez mejor. Incluso una vez nos suspendieron el estadio (por incidentes a la salida de UAI Urquiza-San Martín de Burzaco) y nos mandaron a la cancha de Liniers, que también tiene un campo ideal para nuestro estilo”, repasa el entrenador.

Claro, hubiese sido complicado en otros años, cuando el Monumental de Villa Lynch funcionaba también como lugar de entrenamiento... aunque lloviera o tronara. Esta temporada el equipo se entrenó en Rancho Taxco, un predio deportivo que tiene convenio con la Universidad, cerca del aeropuerto de Ezeiza, para no desgastar el campo de juego durante la semana.
Así, con Aldirico como director de escuela, el equipo consiguió un boletín de calificaciones estupendo con 18 triunfos, 12 empates, 4 derrotas; 58 goles a favor y 23 en contra, para un total de 66 puntos. Y con Mariano Panno (ex jugador de Ferrocarril Urquiza en anteriores temporadas) como abanderado del gol, con 22 anotaciones; destacándose además en la competencia de todo el distrito escolar “D”. 

Imagen LA VUELTA OLIMPICA merecida del campeón, que se consagró a una fecha del final
LA VUELTA OLIMPICA merecida del campeón, que se consagró a una fecha del final
EDUCACION + DEPORTE
Nunca una universidad argentina había intervenido en el fútbol de AFA en forma directa. Sí lo había hecho en el vóley, por ejemplo, cuando la Universidad de Buenos Aires fue subcampeón de la Liga Argentina en la temporada 2001-2002, aunque luego desapareció de la actividad profesional. En México, por caso, existen los Pumas de la UNAM (Universidad Nacional Autónoma de México), el tercer equipo más ganador del país detrás del América y del Cruz Azul), manejado por un grupo de universitarios notables.

Otro ejemplo es el de Brasil, donde UNISUL (Universidad del Sur de Santa Catarina) y la ULBRA (Universidad Luterana de Brasil), utilizan el vóley (segundo deporte más popular en el país) como herramienta de marketing para multiplicar la matrícula con equipos muy poderosos. UNISUL, por ejemplo, fue campeón de la Superliga con Javier Weber como entrenador y con Marcos Milinkovic como su más importante refuerzo en la temporada 2003/2004.

El Club Deportivo UAI aportó además sus actividades federadas como el hóckey, el handball, futsal, fútbol femenino, gimnasia deportiva, rugby, vóley (consiguió el doble ascenso en el 2009 a la 1º División, en la que marcha puntero), y ahora proyecta, como UAI Urquiza, el crecimiento de su participación en cada especialidad.

“El camino tuvo sus resistencias”, reconoce Ricardo Pinela, secretario del club y secretario administrativo de la UAI. “Al principio había hinchas que no creían que esto podía llevarse a cabo. Había un descreimiento alrededor de todo lo que se proyectaba. Pero la unión de los clubes fue aprobada por unanimidad en la Asamblea de Socios”.

Imagen EL ACCESO al estadio es el que se usa para la estación del tren que une lacroze con Gral. Lemos.
EL ACCESO al estadio es el que se usa para la estación del tren que une lacroze con Gral. Lemos.
Las sospechas por otros antecedentes sacudieron los inicios de una historia que se empezó a gestar en agosto de 2008 con las primeras charlas y que tuvo su cierre legal en diciembre de 2009, cuando la Inspección General de Justicia oficializó una fusión que nada tenía que ver con una comercialización, gerenciamiento, o privatización.

Al día de hoy, las instituciones unidas en un solo club intercambiaron cargos ejecutivos en la Comisión Directiva: el actual presidente es Osvaldo Rolando, ex titular de Ferrocarril Urquiza, y el vice es Rodolfo De Vincenzi, ex vicepresidente del club UAI.

El mismo De Vincenzi recuerda los inicios: “Tuvimos dificultades, como en todo proyecto nuevo que produce resistencias y acomodamientos. La conquista más importante fue haber logrado la confianza entre los dirigentes, el cuerpo técnico y los jugadores”. Con la visión complementaria que supone que el deporte y la educación favorecen el ascenso social (mucho más avalada en el mundo que en nuestro país), esta “asociación civil constituida con carácter permanente” es la actual propietaria, por ejemplo, de los jugadores y de todos los activos de los clubes que se unieron. Y también de sus deudas y juicios.

“A mí me sedujo la idea fundadora del proyecto que vincula la educación con el deporte –cuenta el DT Aldirico–. En esta categoría, en la que trabajé cuatro años (fue técnico de Deportivo Paraguayo, Tristán Suárez y Argentino de Quilmes), los jugadores no estudian pero además les cuesta mucho llegar a ser profesionales. UAI Urquiza ofreció la posibilidad de educar al jugador para que, fuera del fútbol, genere opciones de trabajo. Hoy ya tenemos seis jugadores que iniciaron estudios secundarios o terciarios”.

Todo esto se produjo en un plantel que, dada la tradición semiprofesional de la categoría, engloba a peones de albañil, vidrieros y hasta un repartidor de trofeos. Ahora sí, cuando hay exámenes, los turnos de entrenamiento se flexibilizan para los jugadores, que además tienen becas de estudio en cualquiera de las instituciones académicas y grados de enseñanza englobadas bajo el paraguas de la UAI.
Los jugadores (sólo 3 permanecieron de la campaña previa a la del ascenso, y para este año el plantel totalizó 28 futbolistas), que militan a consciencia en una dura categoría (no se permiten jugadores que hayan firmado alguna vez en su carrera un contrato en otro club), también contaron con planes de salud de la propia universidad, equipos médicos profesionales, kinesiólogos y becas académicas.

Imagen APARECE el campeón para jugar su último partido en la D, contra Cañuelas. Fue empate 1-1, para la estadística.
APARECE el campeón para jugar su último partido en la D, contra Cañuelas. Fue empate 1-1, para la estadística.
Haberse concentrado antes de cada partido en una importante cadena hotelera, o disponer de un micro escolar para cada uno de los viajes, pueden sumarse en el haber de la nueva realidad del club. Por supuesto que la UAI –que cuenta con una emisora de radio por internet (Conexión Abierta)– se encargó de transmitir todos los partidos del Furgón en la voz de Martín Ripari, un apasionado que creyó en el ascenso desde el inicio. Por estos días, además, el club ya aprobó el lanzamiento de su campaña para reclutar socios con la intención de superar los 500 que al día de hoy poseen ambas entidades unidas.
Nuevo modelo de gestión en el deporte. Un ascenso inédito. La historia del humilde devenido en millonario de alegrías que –el tiempo dirá– deberá sostenerse hacia adelante.

CASOS DIFERENTES
DURANTE diez años, el empresario vinculado a los medios César Mansilla fue el gerenciador de Fénix y se despidió a fines de abril. El club –que nació y creció en los barrios de Colegiales y Chacarita, en la Capital– se mudó a Pilar durante el gerenciamiento, a partir de la construcción de un estadio de muy buen nivel para las categorías más bajas del ascenso. La vinculación del club con Mansilla fue la ecuación clásica de un acuerdo comercial, que se respetó por diez años; en el medio, Fénix logró ascender de la D a la C, y produjo algunos impactos mediáticos a partir de la incorporación de jugadores como Alberto Acosta y Matías Almeyda, entre otros.

Sportivo Barracas, uno de los clubes más antiguos de Buenos Aires, también vivió una etapa de gerenciamiento en la que se convirtió en Barracas Bolívar, trasladó la localía a esa ciudad bonaerense y consiguió el ascenso a la C en 2004, aunque en la última temporada regresó a la Primera D. Además, luego del descenso estaba definiéndose si el equipo seguiría jugando en Bolívar porque existía la posibilidad de que se cerrara una unión con Sportivo Baradero para afrontar los siguientes torneos.

Por Martin de Rose / Informe: Ignacio Arias / Fotos: Emiliano Lasalvia