Las Entrevistas de El Gráfico

Luciana Aymar, en primera persona

Lucha asegura que no es muy romántica, nos cuenta acerca de sus viajes con las Leonas, las cosas que tuvo que sacrificar y sus proyectos.

Por Redacción EG ·

30 de enero de 2009

Nota publicada en la edición agosto de 2008 de la revista El Gráfico.

NO SOY MUY ROMANTICA, de esas a las que les gusta cenar con velas o cosas por el estilo, pero igual me agradan los buenos detalles.

A VECES NI VEO A MI NOVIO. No me da el tiempo para compartir ni con él, ni con mi familia. Casi no veo a nadie. Estoy viviendo en Caballito. Antes iba seguido a Rosario.  Al principio extrañaba más, iba todos los fines de semana. Ahora, si tengo un par de días libres, trato de descansar. 

VIAJAR NO ES PASEAR. Nuestros viajes son para competir. Es más, ni siquiera me acuerdo de cuando fui de vacaciones. Tres viajes en el año te quitan las ganas, porque vas del hotel a la cancha y de la cancha al hotel. Además, hay una presión distinta, que es la de la competencia. Cada día, cada minuto, sin querer, te presionás. Es una competencia sana que tiene el grupo.

ESTUVIMOS EN TANDIL con todas Las Leonas. Fueron tres días de supervivencia en medio del bosque. Hicimos diversas actividades grupales, como la búsqueda del tesoro, y luego veíamos cómo nos manejábamos nosotras y el grupo. Fue una idea de los entrenadores y estuvo muy bueno.

LA UNION GRUPAL es básica. Sobre todo porque en nuestro caso hay diferencias de generaciones. Todas las actividades preparadas en Tandil fueron muy positivas. Por ejemplo: había una laguna y cada equipo formaba una balsa, te daban los materiales y todo. Pero... antes de embarcar, te hacían cambiar las balsas y tenías que usar la del otro equipo para ver cómo reaccionaba cada grupo. Es apenas un ejemplo. Nos ayudó mucho a todas.

SER LA MARADONA del hockey, en realidad, es muy importante, no puedo negarlo. Se es líder naturalmente: yo lideré mucho con mi juego y mi responsabilidad, y llevar la bandera de número uno la voy a tener siempre en mi corazón. A mí me costó mucho el primer año, y fue una mochila muy grande. Hoy entiendo que tengo que llevar ese peso porque una ha sido tocada con la varita mágica y debe aceptarlo.

LA MUJER ES JODIDA a la hora de recibir mensajes. Para ella, a veces es más importante el medio que el mensaje en sí. El hombre lo entiende perfectamente, es más directo. En cambio, con la mujer hay que tener muchísimo más en cuenta la forma en que lo decís, hay que saber manejarla y elegir el momento y cómo decírselo. En eso es más jodida, porque es mucho más sensible. Al hombre lo podés putear e igual rescata el mensaje.

ME SENSIBILIZA el país, es lo que más me moviliza también. Me ponen mal los chicos de la calle: cómo duermen, el hambre que pasan; me pongo triste y no lo puedo manejar, una intenta ayudar, pero sabe que no lo puede cambiar. Acá lo manejan todo tres personas que están arriba y no se puede cambiar nada.

DOY MI AYUDA a través de Fundaciones en Rosario para chicos con problemas de nutrición; y lo sigo haciendo, aunque sabés que igual va a seguir habiendo chicos que duermen en la calle, tapados con papeles y cajones.

LA POBREZA SE NOTA EN EL INTERIOR. Cuando ves la entrada de Rosario, te querés morir.  Rosario es una ciudad divina, pero también es una de las ciudades más pobres de la Argentina. Yo hago y ayudo dentro de lo que puedo, aunque no sea suficiente.

SOMOS MUY EGOISTAS. Los que hacemos deporte de alto rendimiento, digo. Estamos muy presionados en todo momento. Confieso que me cuesta mantener una relación estable. Hace falta una pareja que te comprenda y contenga. Mi novio, Mario Guersi, es modelo, estudia abogacía y por su trabajo -que también a veces lo tiene de acá para allá- por suerte me comprende...

STARSKY Y HUTCH. Así se llaman dos perritos caniche que tengo y que son como mis hijos, los quiero mucho y de alguna manera me hacen compañía.

SOY HIPERKINETICA. Ando de acá para allá todo el tiempo; a veces me pongo a leer para tranquilizarme un poco, porque si no, no paro...

ME RECONOCEN a veces por la calle, pero en algunos casos les cuesta saber si soy realmente yo o no, porque generalmente me ven en las fotos vestida de deportista. A veces, algunos se animan y preguntan, pero en general puedo ir tranquila al cine; me miran pero sin invadirme.

COCINO MUY BASICO. En casa siempre comimos cosas sencillas, que sé yo: milanesas (al horno, no fritas), ese tipo de comidas. Me cuido mucho. No tengo problemas de peso, al contrario, a veces estoy abajo porque soy nerviosa, no puedo estar quieta.  

LAS LEONINAS tenemos una tendencia a ser el centro de atracción, de ser muy protectoras, siempre estamos haciendo algo, no tenemos la cultura del ocio. Así es el signo.

SACRIFIQUE MUCHAS COSAS. No tuve las mismas experiencias que mis amigas de toda la vida: la etapa de salir a bailar, de juntarse, de los viajes todas juntas. Mi vida fue totalmente diferente: no pude estar en muchos casamientos o cumpleaños de seres queridos. Pero siento también que es todo un privilegio hacer lo que a una le gusta y, encima, vivir de eso. Así que si volviera a nacer, haría lo mismo. Conocí el mundo, disfruté y disfruto de cada minuto.

SOMOS EL EQUIPO con mayor promedio de edad en el mundo. A las jugadoras les cuesta mucho irse, por todo lo que significa ser Leona. Hace 10 años que nos estamos entrenando juntas todos los días, pasamos más tiempo entre nosotras que con nuestras familias: ante todo somos amigas, hasta vamos de vacaciones juntas. 

LA MATERNIDAD no es mi prioridad hoy en día, está ahí, latente. Mi intención es jugar el Mundial del 2010 acá y luego retirarme. Cumplo 31 y tampoco quiero ser una mamá grande. Pero, por ahora, mi vida es el hockey.

PENSAR EN EL RETIRO ES DIFICIL. Hay que saber encarar el tema, una se tiene que ir preparando... Yo no puedo pensar todavía en eso, después del 2010 me retiro. Tengo que buscar cosas que me llenen, pero hoy solamente puedo pensar en esto, en el presente.

TENGO PROYECTOS, pero no están relacionados con el deporte, aunque igualmente seguiría involucrada. Me gustaría apoyar a la Confederación, cambiar algunas cosas... pero ni manager, ni entrenadora... mis proyectos van por otro lado, quiero hacer alguna cosa en tele...

EL CIRCO FUE UN DESAFIO. Me refiero a lo que hice en el programa de Susana Giménez. No arriesgué demasiado el físico, mi presencia era más amistosa que otra cosa, pero lo pasé muy bien y lo tomé muy en serio.

SOMOS MEDIATICAS. Las Leonas no podemos evitarlo de ninguna manera, esto es así; y estar frente a una cámara es algo bastante sencillo para nosotras. La primera vez que me hicieron una nota tal vez fue horrible pero hoy una se olvida de las cámaras.

ME DIO PENA MARADONA por todas las tremendas experiencias que ha tenido que pasar. Haber estado con él en su programa, jugando al fútbol, fue una de las mejores cosas que me han ocurrido en mi vida, por todo lo que lo admiro. Me acuerdo de que me preguntó qué se sentía ser número uno... ¡Justamente él!

CON REZAR NO SE GANA NADA. Soy católica, pero no activa y creo que lo importante es ser una buena persona. Rezar los domingos no ayuda si, además, no te portás bien. No tengo nada contra la Iglesia, aunque le sacaría algunas cositas y se las daría a los pobres...

LAS LOLAS FUERON UN TEMA, pero ya pasó....  Estuve 105 días lesionada en 2007, así que aproveché e hice un combo: me operé de las amígdalas y me hice las lolas. Pero ojo, lo de la lesión fue bravo, un edema óseo es muy complicado, muy doloroso. Fue en la articulación del fémur y la tibia y por suerte me recuperé muy bien. ¿Lo de las lolas? Es de lo mejor que hice en mi vida. Creí que me podía perjudicar para el juego, pero sigo igual que antes. Bah, en realidad, creo que mejor todavía...