¡Habla memoria!

Boca Intercontinental 2003

Final soñada entre los campeones de Europa y América y final feliz para el lado argentino.

Por Redacción EG ·

13 de diciembre de 2007
Imagen Parados, de izquierda a derecha: Rolando Schiavi, Roberto Abbondanzieri, Nicolás Burdisso, Luis Perea y Raúl Cascini. Agachados: Guillermo B. Schelotto, Sebastián Battaglia, Matías Donnet y Clemente Rodríguez.
Parados, de izquierda a derecha: Rolando Schiavi, Roberto Abbondanzieri, Nicolás Burdisso, Luis Perea y Raúl Cascini. Agachados: Guillermo B. Schelotto, Sebastián Battaglia, Matías Donnet y Clemente Rodríguez.


El mito Bianchi se agigantaba un poco más en Japón, esa tierra que ya le había dado más de una gran alegría. Al igual que en 1994 con Vélez, la víctima del Virrey fue el poderoso Milan de Kaká, Shevchenko y compañía. Otra vez después de sufrir en los penales, Boca festejaba a lo grande y ponía su nombre, una vez más, en la cima del planeta fútbol.El mito Bianchi se agigantaba un poco más en Japón, esa tierra que ya le había dado más de una gran alegría. Al igual que en 1994 con Vélez, la víctima del Virrey fue el poderoso Milan de Kaká, Shevchenko y compañía. Otra vez después de sufrir en los penales, Boca festejaba a lo grande y ponía su nombre, una vez más, en la cima del planeta fútbol.
Estadio Internacional de Yokohama. 14 de diciembre de 2003. El mundo palpita con una nueva definición de la Copa Intercontinental. Se enfrentan el Milan, rey de Europa tras vencer en una apretadísima final italiana de Champions a la Juventus (le ganó en la definición por penales después de un ajustado 0-0), y Boca, que de la mano de Carlos Bianchi arrasó en la Libertadores, en la que humilló al Santos brasileño en la serie final (lo venció 2-0 en Buenos Aires y 3-1 en San Pablo).
 
El partido es parejo de movida. En la cancha no se notan grandes diferencias entre el campeón europeo y el sudamericano, a pesar de que los italianos llegaban con una lista de nombres que realmente le metía miedo hasta al más valientes: Dida, Cafú, Maldini, Gattuso, Pirlo, Seedorf, Kaká y Shevchenko, entre otros monstruos del fútbol mundial.
 
En medio de ese desarrollo sin mayores diferencias, el que golpea primero es el Milan. A los 23 minutos, luego de un error entre Clemente Rodríguez y Battaglia, Pirlo manda un pelotazo para los hombres de punta y el danés Tomasson define entre las piernas de Abbondanzieri.
 
Es justo en el momento en que los de Bianchi comenzaban a adueñarse del partido. El gol es un golpe y Boca no puede concretar esa superioridad que empezaba a vislumbrarse. Pero la recuperación llega pronto y no le permite al Milan llegar a dominar el juego: se cumple el minuto 38 cuando Donnet gira dentro del área, mete el zurdazo ante un Dida descolocado y desata el rugido con acento argentino en Japón.
 
Se va el primer tiempo y el segundo pasa con predominio de la precaución y la actitud conservadora a la hora de atacar, con contadas ocasiones cerca de los arcos. Lo mismo sucede con los dos tiempos suplementarios y entonces el campeón del mundo debe definirse en los penales. Allí, Abbondanzieri se hizo gigante y toda la gloria se pintó de azul y oro. Una vez más…
 
Síntesis
 
Boca 1 (3): Abbondanzieri; Perea, Schiavi, Burdisso, Clemente Rodríguez; Donnet, Cascini, Battaglia, Cagna; Iarley y Barros Schelotto (ST 27’ Tevez). DT: Carlos Bianchi.

Milan 1 (1): Dida; Cafú, Maldini, Costacurta, Pancaro; Gattuso (PT sup. 11’ Ambrosini), Pirlo, Seedorf; Kaká (ST 32’ Rui Costa); Shevchenko y Tomasson (ST 14’ Inzaghi). DT: Carlo Ancelotti


Arbitro: Valentin Ivanov (Rusia).

Cancha: Internacional de Yokohama.
 
Los penales: Por Boca convirtieron Schiavi, Donnet y Cascini. El remate de Battaglia, ejecutado en segundo orden, fue desviado por Dida. Por Milan convirtió Rui Costa, Abbondanzieri contuvo los remates de Pirlo y Costacurta, y Seedorf lo tiró por arriba del travesaño.

LA VOZ DE CARLOS BIANCHI
"Tengo una sensación de felicidad plena. Por haber conseguido el título y por la manera en que lo hicimos. Fuimos un justo ganador, sin objeciones"