¡Habla memoria!

EL PRIMER PREMIO A UNA CARRERA DE AUTOS ARGENTINA

Un ex periodista de El Gráfico, Federico Kirbus, “salva” la cigarrera de plata que ganó Juan Cassoulet en la primera carrera de autos de nuestro país. Se lo cuenta a nuestra web como primicia.

Por Redacción EG ·

24 de agosto de 2007
“En diciembre de 1901 se realizó la primera carrera para automóviles del país. Fue en el desaparecido Hipódromo Nacional de Núñez, donde ahora se encuentra el Barrio River. Una de sus calles circulares sigue incluso el dibujo de la vieja pista. Y hasta existe una placa conmemorativa.”
 
Dejemos que sigan fluyendo las palabras de Federico Kirbus, periodista especializado en automovilismo en El Gráfico durante las décadas del cincuenta y sesenta:
“Compitieron ese día coches a petróleo y a vapor, y ganó Juan Cassoulet con un Rochester. Como premio, Cassoulet recibió una cigarrera y una fosforera de plata 900 en un estuche forrado.
 
Pasaron los años. En 1960 reconstruí los comienzos del automovilismo deportivo argentino para un número especial de El Gráfico. En mi investigación apareció desde luego también aquella cigarrera, que se había extraviado; solo se sabía que Cassoulet se la había entregado en comodato al Automóvil Club Argentino (junto a la copa Pacheco y Anchorena, también ganada por Cassoulet, en el Gran Premio de 1910).
 
Poco después de realizar esa tarea de investigación llegó hasta mis manos la cigarrera con el fin de que preservara un objeto de incalculable valor histórico: el premio
dado al ganador de la primera carrera de coches sin caballos realizada en el país.
La conservé durante muchos años, hasta que Juan Manuel Fangio anunció la apertura
de su museo en Balcarce. Pensé que sería el sitio ideal para exponer la pieza. Organizamos entonces un asado, y en la oportunidad le entregué a ‘El Chueco’ la cigarrera, que desde la apertura del repositorio se encuentra en una de las vitrinas.
 
‘El Quintuple’ me dio la absolución diciendo lo que yo sostuve: que para quien ignoraba la historia del premio, eso eran 150 gramos de plata, nada más.
Al principio la cigarrera y su fosforera estaban bien expuestos en el Museo de Balcarce, arriba, al comienzo de la historia, donde correspondía estar, con un letrero bien explicado.
En su sitio actual lamentablemente le falta ahora una leyenda adecuada, porque nadie sabe que con eso comenzó la historia del automovilismo deportivo argentino.”
 
Néstor Saavedra.